En la URSS, el 90% de los delitos son cometidos en estado de embriaguez

En los ¨²ltimos meses, la URSS ha intendificado la ?lucha contra la sborracheras fuertes? a trav¨¦s de una campa?a inicada por el Ministerio de la Salud P¨²blica. El pasado alo aument¨® el n¨²mero de alcoh¨®licos en el pais, y principalmente entre la juventud. Las cifras oficiales se?alan que el consumo de bebidas alcoh¨®licas se increment¨® en un 5% y, seg¨²n datos del Ministerio de Justicia, el 65% de los cr¨ªmenes y el 90% de los actos de delincuencia fueron cometidos, en 1978, en estado de enbriaguez.

Si un miliciano -polic¨ªa urbano- para a un automovilista sovi¨¦tico por considerar que cometi¨® una infracci¨®n y observa que est¨¢ bebido, de inmediato le ser¨¢ retirado el carnet de conducir y puede ser privado de ¨¦l de uno a tres a?os. Posteriormente deber¨¢ someterse a nuevo examen. Si el conductor era taxista o estaba al volante de un veh¨ªculo oficial, lo m¨¢s f¨¢cil es que pierda el empleo. Por eso, Mosc¨² es, a pesar de las dificultades de conducir en invierno, una de las ciudades con menos accidentes de circulaci¨®n.Por el contrario, esta ciudad tiene un importante ¨ªndice de borrachos ?de a pie?. A partir de los viernes por la tarde es un espect¨¢culo, no agradable, pero s¨ª normal, encontrarse con los que van dando tumbos por las calles, se quedan dormidos en los autobuses o se arrinconan al calor de los vest¨ªbulos de las estaciones del Metro. Los ciudadanos m¨¢s discretos. tambi¨¦n en n¨²mero considerable, trasladan a sus apartamentos la libaci¨®n y nunca falta un pretexto para celebrar la reuni¨®n con alg¨²n vecino o amigo y entremezclar con el vino georgiano de la cena numerosos brindis de vodka

El tema preocupa a las autoridades sovi¨¦ticas, que en los ¨²ltimos meses adoptaron a trav¨¦s del Consejo de Ministros una serie de medidas para intensificar la lucha contra el alcoholismo: ?La idea central de esta campa?a -ha se?alado a EL PAIS E. Babaian, jefe del servicio sovi¨¦tico de Toxicolog¨ªa y director de la Comisi¨®n de la Lucha Contra el Alcoholismo- se basa en crear un clima de intolerancia hacia el abuso de bebidas alcoh¨®licas, intensificar la actividad de los organismos administrativos y de las organizaciones sociales en la lucha contra las borracheras, lucha que llevan a cabo no s¨®lo la milicia, sino tambi¨¦n los tribunales de compa?eros, los destacamentos populares de protecci¨®n del orden p¨²blico y los comit¨¦s ejecutivos de los soviets locales de los diputados del pueblo.

Como medidas preventivas se proh¨ªbe la publicidad de bebidas alcoh¨®licas, se limitan las horas de venta en v¨ªspera de d¨ªas festivos, no se suministra a los menores de diecis¨¦is a?os ni a los que muestren s¨ªntomas de borrachera, no se venden en los caf¨¦s, comedores de empresas, cines, teatros y se limita la cantidad en los restaurantes. Los vendedores o suministradores que infrinjan estas normas son los primeros castigados.

Curaci¨®n de los alcoh¨®licos

El grado superior de la borrachera es el alcoholismo. Para combatir el alcoholismo cr¨®nico se ha creado un servicio de toxicolog¨ªa, dirigido y controlado por especialistas m¨¦dicos que trabajan en dispensarios toxicol¨®gicos centrales. Las secciones de estos dispensarios son los servicios de narcolog¨ªa en las empresas y f¨¢bricas. Tambi¨¦n en cada distrito ciudadano existe un despacho donde permanentemente hacen guardia un m¨¦dico y un grupo de enfermos.Las primeras medidas contra los borrachos son de car¨¢cter laboral y la milicia es la encargada de pasar denuncia a la empresa, denuncia que se anota en las hojas de trabajo y se tiene en cuenta a la hora de repartir los premios econ¨®micos mensuales, en la prioridad para asistir a balnearios en ¨¦poca de verano o p¨¦rdida de puestos en el orden que le correspondiera si hab¨ªa solicitado nuevo apartamento. Cuando reincide, queda detenido y deber¨¢ esperar la decisi¨®n de una comisi¨®n m¨¦dica que dictaminar¨¢ sobre las medidas oportunas para su curaci¨®n.

Si el tribunal m¨¦dico determina que se trata de un alcoh¨®lico cr¨®nico, ¨¦ste puede someterse voluntariamente a tratamiento, que comienza en una primera etapa de desintoxicaci¨®n que dura 45 d¨ªas, internado en un hospital. Si responde favorablemente, podr¨¢ volver a su trabajo habitual, si bien seguir¨¢ sometido a tratamiento a trav¨¦s de los dispensarios, que utilizar¨¢n la terapia oportuna para cada caso, durante tres a?os. Posteriormente, y durante otros dos a?os, le mantendr¨¢n bajo observaci¨®n m¨¦dica, hasta ser dado de alta definitivamente, siempre y cuando se le considere definitivamente curado.

Hospitales cerrados

?Si el alcoh¨®lico no se somete voluntariamente al tratamiento -nos dice el doctor Babaian-, ser¨¢ internado en hospitales cerrados que dependen del Min¨ªsterio del Interior, cuya labor se reduce exclusivamente a la vigilancia, si bien los m¨¦todos de curaci¨®n son los mismos que se utilizan en los otros centros y dispensarios, dictados por el Min¨ªsterio de la Salud P¨²blica. En estos hospitales se puede llegar a estar en r¨¦gimen abierto, y mientras dura el tratamiento m¨¦dico, le permiten incorporarse a una empresa donde pueda desarrollar su oficio o profesi¨®n o bien emprender un nuevo trabajo.?La intensa campa?a que se desarrolla en la URSS actualmente a trav¨¦s del citado Ministerio cuenta con el apoyo de un Consejo de Propaganda Antialcoh¨®lica. compuesto de m¨¦dicos, maestros y profesores de los establecimientos de ense?anza superior y secundaria y de representantes de los ministerios de Cultura, Comercio y de la Industria de la alimentaci¨®n. Asimismo, aparte de la ayuda de las instituciones gubernamentales y sociales, se incluye en los programas de las escolares un ?curso de higiene?, en el que se se?alan los peligros de las bebidas alcoh¨®licas. Por su parte, los medios de informaci¨®n tratan los problemas que plantea el alcoholismo y mantienen de continuo la propaganda donde no se evitan las denuncias p¨²blicas.

En la Uni¨®n Sovi¨¦tica no existen las asociaciones de alcoh¨®licos an¨®nimos al estilo de las que funcionan en otros pa¨ªses. En los ¨²ltimos a?os han nacido alrededor de cien clubs de ex alcoh¨®licos, quienes en colaboraci¨®n con otros que nunca bebieron apoyan la lucha contra el alcoholismo a trav¨¦s de conferencias y otras actividades que organizan en sus locales sociales. Los m¨¢s numerosos de estos clubs, cuyos miembros nunca sobrepasan el medio centenar, se encuentran en las rep¨²blicas b¨¢lticas. Es precisamente en el norte de la URSS y en las rep¨²blicas rusas donde se toman las bebidas fuertes y donde, consecuentemente, existe un mayor n¨²mero de alcoh¨®licos. Por el contrario, en las rep¨²blicas productoras y buenas consumidoras de vino, como Georgia, Moldavia o Adjertoarjan, este problema est¨¢ menos agudizado.

?Buscar la soluci¨®n al alcoholismo a trav¨¦s de una ley seca est¨¢ comprobado que no es la mejor manera de resolver este grave problema -dec¨ªa en una de sus charlas por televisi¨®n el director de la comisi¨®n de la lucha contra el alcoholismo- Hay que pensar en cada persona y sus caracter¨ªsticas.?