El presidente Carter, dispuesto a liberalizar los precios de la energ¨ªa

Un plan nacional en materia de energ¨ªa para combatir la escasez de petr¨®leo y sus elevados precios ser¨¢ expuesto por el presidente Carter a todo el pa¨ªs a trav¨¦s de las c¨¢maras de televisi¨®n el pr¨®ximo d¨ªa 29, anunciaron ayer l¨ªderes del Congreso.El presidente Carter estuvo ayer, reunido durante echo horas en su retiro de Camp David con el vicepresidente, Mondale, y todos los ministros y consejeros de car¨¢cter econ¨®mico, discutiendo problemas y buscando soluciones a la actual crisis.

Tras las gestiones directas de Carter en Oriente Pr¨®ximo entre ¨¢rabes y jud¨ªos para conseguir cierta paz y estabilidad en la zona, el presidente norteamericano ha tenido que volver sus ojos y preocupaciones al interior del pa¨ªs y m¨¢s concretamente a su situaci¨®n econ¨®mica, afectada de una creciente inflaci¨®n y de la crisis energ¨¦tica provocada por el cambio de tendencia del mercado de crudos, de una fase de excedente de oferta a otra de falta de suministros.

El representante dem¨®crata Jim Wright, uno de los que se reuni¨® ayer con Jimmy Carter para tratar sobre las posibles soluciones a los problemas econ¨®micos de Estados Unidos, dijo que el jefe de la Casa Blanca les expuso su intenci¨®n de suprimir el control sobre los precios de la energ¨ªa.

La medida, cont¨® Wright, ir¨¢ acompa?ada de otra que imponga un impuesto especial sobre los beneficios de las compa?¨ªas petrol¨ªferas.

El asunto del control gubernamental de los precios del combustible es sumamente pol¨¦mico. Aunque la mayor¨ªa de analistas y observadores reconocen que es la manera m¨¢s sencilla de evitar el presente despilfarro de energ¨ªa, tambi¨¦n parece claro que imprimir¨¢ un ritmo aun m¨¢s fuerte a la inflaci¨®n.

La Administraci¨®n Carter puso recientemente especial ¨¦nfasis en la lucha antiinflacionista, pero la revoluci¨®n iran¨ª y la consiguiente elevaci¨®n de los precios del crudo hicieron in¨²til cualquier intento de combatir la inflaci¨®n con las medidas previstas.

Si, efectivamente, el presidente anuncia la pr¨®xima semana la eliminaci¨®n de las disposiciones oficiales que regulan el precio de la energ¨ªa, la medida se pondr¨¢ en pr¨¢ctica en diversos plazos para evitar su impacto inflacionista.

La reducci¨®n de la temperatura de los termostatos a un m¨¢ximo de 65 grados y el cierre de las estaciones de servicio los domingos son otras de las posibles decisiones que la Casa Blanca puede tomar a corto plazo.

Las decisiones del Gobierno norteamericano en materia de ahorro energ¨¦tico son decisivas para el resto de pa¨ªses importado res de energ¨ªa. Si Estados Unidos fuerza, sus importaciones de petr¨®leo, el mercado se ver¨¢ seriamente amenazado por la falta de oferta de crudos y los precios se multiplicar¨¢n. Un programa severo de ahorro por parte de Estados Unidos supondr¨ªa un gran alivio para todas las econom¨ªas dependientes de petr¨®leo, ya que el suministro estar¨ªa garantizado y los precios tendr¨ªan posibilidades de estabilidad. En los ¨²ltimos tiempos, Estados Unidos ha forzado las importaciones con ¨¢nimo de constituir una reserva estrat¨¦gica que garantizara el autoabastecimiento durante un a?o completo. Los presupuestos del Gobierno federal norteamericano han destinado grandes sumas a este efecto.