Sectores de UCD estudian una alternativa a largo plazo pam Su¨¢rez

La ¨²ltima crisis provocada por el asesinato de tres altos mandos militares y el atentado a la cafeter¨ªa California 47 de Madrid ha motivado en el partido gubernamental, Uni¨®n de Centro Democr¨¢tico (UCD), y especialmente en su grupo parlamentario, el deseo de plantear a nivel interno y a largo plazo la b¨²squeda de una cierta soluci¨®n de recambio para el presidente del partido y del Gobierno, Adolfo Su¨¢rez.

Fuentes centristas consultadas por EL PA?S confirmaron que esa posibilidad est¨¢ sobre el tapete, pero que no deb¨ªa interpretarse como una operaci¨®n a corto plazo, sino como un l¨®gico deseo de tener prevista la posibilidad de una crisis, de mayor envergadura que la pasada, que hiciera imprescindible que el se?or Su¨¢rez presentara su dimisi¨®n. El debate interno sobre la soluci¨®n de recambio se orienta en un mayor grado -dado que parece imposible una crisis de tal alcance si el proceso de consolidaci¨®n de la demiocracia se afianza- hacia el segundo congreso nacional de UCD, que tendr¨¢ lugar en 1980, y en el que una parte de Union de Centro Democr¨¢tico quisiera ver planteadas alternativas al se?or Su¨¢rez.Algunos diputados de UCD se han apresurado a estimar que, en el hipot¨¦tico caso de una crisis grave, el partido deber¨ªa recurrir a personalidades como la de Leopoldo Calvo Sotelo, desvinculado de las tres tendencia ideol¨®gicas de Uni¨®n de Centro Democr¨¢tico y bien visto por los poderes econ¨®micos y militares. El se?or Calvo Sotelo se encuentra alejado plenamente de estas tesis. Otras fuentes, cercanas al actual Gabinete, descartaban cualquier an¨¢lisis basado en la consideraci¨®n de una crisis presidencial grave, pero estimaban posible que en el pr¨®ximo congreso empiecen a perfilarse alternativas personales a Adolfo Su¨¢rez. No ser¨ªa descartable que, en la b¨²squeda de esa alternativa, sectores democratacristi anos y socialdem¨®cratas intentaran un acuerdo t¨¢cito.

La mayor¨ªa de las fuentes centristas consultadas conced¨ªan gran importancia al desarrollo de las asambleas provinciales de UCD, previstas para el pr¨®ximo mes de septiembre. Del an¨¢lisis del resultado de dichas asambleas y de los sectores que resulten victoriosos en ellas, ser¨¢ posible calibrar la fuerza del actual equipo dirigente del partido y la labor realizada por su secretario general, Rafael Arias Salgado. El se?or Arias Salgado deber¨¢ resistir los embates de otras personalidades del partido deseosas de alcanzar la secretar¨ªa general, y cuya estrategia se ha planteado tambi¨¦n a largo plazo Entre estas personalidades se apunta el nombre de Rodolfo Mart¨ªn Villa, ex ministro del Interior y hombre de gran influencia todav¨ªa, tanto en el Grupo parlamentario de UCD como en la estructura provincial del partido.

Recomposici¨®n del consenso

Por el momento, las miradas de los parlamentarios centristas se dirigen hacia el se?or Su¨¢rez y su moment¨¢nea decisi¨®n de no crear la comisi¨®n permanente del comit¨¦ ejecutivo. El consejo pol¨ªtico de UCD, que deb¨ªa haberse reunido el pasado d¨ªa 30 de mayo, fue aplazado a la vista de los ¨²ltimos acontecimientos pol¨ªticos y se ignora cu¨¢ndo se realizar¨¢ la nueva convocatoria. Un sector cada vez m¨¢s numeroso del partido gubernamental desear¨ªa que el consejo pol¨ªtico debatiera como uno de los puntos fundamentales la sLtuaci¨®n econ¨®mica por la que atraviesa el pa¨ªs. Para este sector, la crisis econ¨®mica hace cada d¨ªa m¨¢s necesario un pacto; el ¨ªndice de inflaci¨®n ha superado los niveles previstos en el plan Abril, y en oto?o podr¨ªa ser necesario revisar cientos de convenios colectivos. El pacto econ¨®mico podr¨ªa completarse con una recomposici¨®n del consenso pol¨ªtico para sacar adelante con rapidez muchas de las leyes org¨¢nicas remitidas al Congreso, y especialmente las relacionadas con las comunidades aut¨®nomas.

La necesidad de un pacto econ¨®mico no es rechazada, incluso, por el m¨¢ximo defensor de la pol¨ªtica liberal, Joaqu¨ªn Garrigues. El se?or Garrigues defiende sus tesis, pero no oculta el alto costo de las mismas.

La decisi¨®n final est¨¢ en manos del vicepresidente para Asuntos Econ¨®micos, Fernando Abril, y del ministro de Econom¨ªa, Jos¨¦ Luis Leal. El se?or Abril est¨¢ siendo fuertemente contestado dentro de su partido y parece irritado por el fracaso de su plan, hasta el extremo de recluirse moment¨¢neamente y desaparecer del primer plano de la pol¨ªtica.