El aeropuerto de Managua, cerrado al tr¨¢fico internacional

Con la guerrilla sandinista combatiendo a la Guardia Nacional en todas las poblaciones importantes que rodean a la capital y el toque de queda en vigor desde las ocho de la tarde a las cuatro de la ma?ana, ayer fueron suspendidos todos los vuelos con escala en Managua. El Frente Sandinista ha advertido a las compa?¨ªas internacionales del peligro que corren sus aviones si sobrevuelan el espacio a¨¦reo nicarag¨¹ense. Debido a la censura de prensa -hoy no salen los diarios de oposici¨®n a Somoza La Prensa y El Pueblo-, las ¨²nicas noticias que recibe la poblaci¨®n llegan desde la radio de Costa Rica y por la emisora del FSLN, Radio Sandino.

La guerrilla sandinista combate en todo el pa¨ªs contra el Ej¨¦rcito nicarag¨¹ense. Aunque, al parecer, Somoza sigue controlando la situaci¨®n, se enfrenta ya a una guerra abierta y generalizada, mientras amplios sectores de la poblaci¨®n apoyan a los sandinistas y la huelga general convocada por ¨¦stos contin¨²a desde el lunes.Las ciudades de Le¨®n, Matagalpa, Ocotal y Granada, en Nicaragua, se encontraban ayer pr¨¢cticamente bajo control del Frente Sandinista, seg¨²n esta organizaci¨®n, que continuaba ayer sus ofensivas sobre las ciudades de Masaya y Ticuantepe. Los guerrilleros arrebataron a la Guardia Nacional dos tanques de fabricaci¨®n norteamericana tipo Sherman, mientras que en varias emboscadas, una de ellas a cincuenta kil¨®metros de Managua, se cortaron los itinerarios de convoyes militares que acud¨ªan al sur del pa¨ªs con refuerzos para las tropas de Somoza. Noticias de ¨²ltima hora se?alaban la extensi¨®n de los combates al interior de la capital, Managua, si bien la vigencia del estado de sitio impide la verificaci¨®n plena de este extremo.

Los observadores pol¨ªticos se preguntan las ventajas que el Gobierno de Anastasio Somoza va a obtener de la declaraci¨®n del estado de sitio, vigente desde el mediod¨ªa del mi¨¦rcoles en toda Nicaragua. Una medida as¨ª, en opini¨®n de aqu¨¦llos, significa la aceptaci¨®n de que nos es posible mantener el control de la situaci¨®n por medios normales, lo cual a fin de cuentas, no supone m¨¢s que una cosa: debilidad.

Otras versiones se?alan que la pretensi¨®n del Gobierno ha sido institucionalizar, darle car¨¢cter legal a una situaci¨®n que exist¨ªa de hecho y asegurar mayor liberta de acci¨®n a las patrullas de la Guardia Nacional que vigilan los centros urbanos de Nicaragua, sobre todo por la noche. En estos ¨²ltimos d¨ªas, la noche se convert¨ªa en el tiempo m¨¢s apropiado para la acci¨®n urbana de los guerrilleros sandinistas. Con el establecimiento del toque de queda, la Guardia Nacional dispone de justificaci¨®n legal para disparar -simplemente- contra cualquier persona que circule por las calles a partir de esa hora.

No faltan quienes se?alan que la declaraci¨®n del estado de sitio tiene mayores alcances. Esas fuentes piensan que el Gobierno ha detectado alg¨²n tipo de maniobra interna que podr¨ªa poner en peligro la estabilidad del r¨¦gimen, y que el general Anastasio Somoza se ha adelantado a tal eventualidad.

Los medios de informaci¨®n locales est¨¢n, igualmente, afectados por las circunstancias de excepci¨®n. La Direcci¨®n de Radio y Televisi¨®n ha reiterado a las emisoras la prohibici¨®n de dar noticias sobre hechos b¨¦licos o pol¨ªticos, y en una curiosa nota ha ampliado el espectro de lo prohibido ?a los efectos especiales que puedan causar alarma a la poblaci¨®n, tales como sirenas?. Dicha direcci¨®n ha establecido tambi¨¦n c¨®mo deben ser las voces de los lucutores, haciendo expresa menci¨®n de que la locuci¨®n ?angustiada? no se permitir¨¢.