Ayer se celebr¨® en Madrid el "D¨ªa del Sol"

El ?D¨ªa del Sol? se celebr¨® ayer por primera vez en Madrid y otras ciudades espa?olas bajo el lema ?Nuclear? No. Gracias, que, alrededor de un astro solar sonriente formaba el anagrama que presidi¨® desde carteles, camisetas y pegatinas el happening de los Amigos de la Tierra en la Casa de Campo.En unos ochenta pa¨ªses del mundo se conmemora este D¨ªa, siempre en fecha pr¨®xima al 21 de junio, solsticio de verano, por iniciativa de los grupos ecologistas internacionales. Este a?o, en Madrid, para preparar el ambiente se ha montado a lo largo de la semana un ciclo de conferencias en el Centro Cultural de la Villa, que termina en la tarde de hoy con una tribuna de inventores y un resumen de todo lo debatido.

La fiesta dur¨® todo el d¨ªa, desde las once de la ma?ana hasta las once de la noche, y en el enorme y desangelado pabell¨®n cedido por el Ayuntamiento se ofrec¨ªan varias posibilidades de diversi¨®n. En los bajos del edificio, un taller de pintura a base de l¨¢minas de papel pegadas en la las paredes, donde chicos y grandes demos traban sus habilidades art¨ªsticas.

Mientras, se proyectaban pel¨ªculas de divulgaci¨®n sobre diferentes sistemas alternativos de energ¨ªa, de paisajes submarinos o de la naturaleza en general, y algunos grupos sal¨ªan en plan de exploraci¨®n y reconocimiento bot¨¢nico por el parque. La Casa de Campo, s¨®lo campo, dec¨ªa una de las pancartas que adornaba el local.

Para reponer fuerzas se pod¨ªa tomar un ?bocata? de chorizo ecol¨®gico, frito en una cocina solar instalada en la puerta del pabell¨®n (formada por una par¨¢bola de metal de metro y medio de di¨¢metro y un tr¨ªpode sobre el que se colocaba la sart¨¦n). Se ofrec¨ªan asimismo rebanadas de pan integral untadas de mermelada de naranja, en la que se ve¨ªan hasta trozos de aut¨¦ntica naranja. Y para beber, lo t¨ªpico: refrescos, ?cubatas? y co?ac, porque los ecologistas no est¨¢n contra la energ¨ªa et¨ªlica.

Hab¨ªa puestos de artesan¨ªa, muestras geol¨®gicas, equipos de acampada y monta?ismo, y puestos de informaci¨®n donde, a cambio de la voluntad, facilitaban folletos aclaratorios, con dibujos e instrucciones muy sencillas, que explicaban c¨®mo transformar agua salada en potable, c¨®mo fabricar un calentador solar en espiral, la forma de construir una incubadora de pollos o un secadero de uvas y albaricoques, y otras t¨¦cnicas ecologistas al alcance de todos.

?Hemos dejado 35.000 pesetas de fianza en el Ayuntamiento?, explicaba uno de los organizadores, ?sin que ¨¦ste haya cumplido su compromiso de facilitarnos un servicio de megafon¨ªa, una tarima y la limpieza del local.?