EL PAIS y el n¨²mero 1.000
?EL PAIS naci¨® como peri¨®dico de oposici¨®n, y sigue si¨¦ndolo, aunque los ministros se matan por escribir en sus p¨¢ginas, y algunos son como de "la casa", bien que en ocasiones reciban sus buenas raciones de estaca. ?Pues claro que "los espa?oles tenemos el derecho a ser gobernados normalmente por la izquierda pol¨ªtica"!, pero antes esa izquierda tiene que ganarse las elecciones, lo cual a¨²n no ha hecho. Como los peri¨®dicos ya han dejado de ser un "parlamento de papel", aqu¨ª la voluntad soberana es la que nace desde el Congreso, y la democracia viene desde all¨ª y no desde lo que nosotros queremos. Contraponer libertad con orden social es tambi¨¦n un peligroso sofisma, porque no hay libertad sin orden ni el orden es digno sin la libertad, pero cuando el orden perece, la libertad, por lo general, muere, y nuestras dos Rep¨²blicas han sido -sin contar otros episodios-, prueba de que esto es cierto. Tampoco nos parece exacto iden tificar al centro o a UCD con la derecha -EL PAIS suele insistir siempre en esto-, porque entonces marginamos o dejamos sin terreno de juego a otros grupos que decla ran estar en la derecha, mientras que UCD lo niega en una vocaci¨®n, acaso sincera, por una integraci¨®n plena en el sistema, que, guste o no, ha nacido desde el consenso con la izquierda dentro. "Todo, pese a la crisis econ¨®mica y a la amenaza terrorista, configura ahora un panorama de larga estabilidad de la derecha en el poder", dice el editorial del n¨²mero 1.000, ci¨¦rta mente bien hecho. Pero si la dere cha es Su¨¢rez, ?entonces por qu¨¦ hizo desplomarse a un sistema que era aut¨¦nticamente de derechas? Lo cierto es que Su¨¢rez no quiere ser de derechas ni lo ha sido desde las juventudes cat¨®licas, pasando por la Secretar¨ªa General del Mo virniento. Todo en el car¨¢cter y en la pol¨ªtica de Su¨¢rez es centro. La derecha hubiera conservado al franquismo aunque fuese con naf talina. Y esto no hay quien lo nie gue. ( ... )Hoy la Espa?a real coincide con la oficial, y creo que fue Su¨¢rez mismo quien propugn¨® hacer verdad oficial lo que era verdad al nivel de la calle, lo cual supuso hacer la reforma con un par de perendengues. Fue tambi¨¦n Ortega quien dijo entonces que "en las ¨¦pocas de crisis la verdadera opini¨®n p¨²blica no es la expresada por los t¨®picos al uso", y aqu¨ª a los t¨®picos del pasado hemos tenido el coraje colectivo de retorcerles el cuello. Por vez primera en muy largo tiempo es lo cierto que la Espa?a real. y la Espa?a oficial coinciden, aunque haya muchos diputados sin un solo peri¨®dico -por ejemplo, los socialistas- mientras un soler diputado tiene dos diarios, lo cual es demas¨ª¨¦, pero as¨ª sucede. Como Juan Luis Cebri¨¢n, a quien conozco desde que tomaba el pelarg¨®n, "yo todav¨ªa soy de los optimistas", pero no de quienes creen que haya que "romper la red", porque la ¨²ltima vez que lo hicimos ca¨ªmos de bruces en el 18 de julio y en sus dram¨¢ticas consecuencias. En cuanto a la "esclerosis del Estado", eso es un t¨®pico del 98 que hoy d¨ªa no tiene ninguna vigencia. Esta Espa?a de hoy tiene sus venas sanas, y son algunos de sus adversarios los que las tienen pochas y deshechas.?
24 de julio
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