ETA (p-m) reivindica el triple atentado de Madrid y anuncia de nuevas acciones

ETA pol¨ªtico-militar se ha declarado autora del triple atentado que ha costado cinco vidas humanas, m¨¢s de cien heridos y unos veinticinco millones de pesetas en p¨¦rdidas, al hacer explosi¨®n tres artefactos de relojer¨ªa, con unos seis kilos de explosivo cada uno, situados en las consignas de equipajes de las estaciones madrile?as de Chamart¨ªn y Atocha y en la zona de llegadas nacionales del aeropuerto de Barajas. La organizaci¨®n terrorista anuncia que proseguir¨¢n los atentados en tanto permanezcan en Soria presos vascos. El Consejo General Vasco, en su reuni¨®n de ayer, hizo p¨²blica su repulsa en tono tajante. El ¨®rgano preauton¨®mico de Euskadi afirma que no se puede estar a favor del Estatuto y al mismo tiempo cometer acciones semejantes.

Las reacciones han sido en esta ocasi¨®n especialmente duras por parte de los partidos, sindicatos y organizaciones. El presidente del Consejo General Vasco, Carlos Garaikoetxea, dirigi¨® un telegrama al presidente del Gobierno en el que condenaba en t¨¦rminos tajantes la acci¨®n terrorista.Juan Mar¨ªa Bandr¨¦s, dirigente de Euskadiko Ezkerra coalici¨®n que pasa por ser brazo pol¨ªtico de ETA (p-m), anunci¨® tambi¨¦n su estupor y su consternaci¨®n. Coment¨® que la llamada de aviso por parte de los autores pod¨ªa suponer que no deseaban v¨ªctimas, pero a?adi¨® que la mejor manera de que una bomba no haga explosi¨®n es no colocarla.

La organizaci¨®n terrorista ETA (p-m) anunci¨® la colocaci¨®n de los explosivos a la agencia Euskadi Press a las doce de la ma?ana del domingo. La agencia lo comunic¨® a su vez a la comisar¨ªa de polic¨ªa de San Sebasti¨¢n, pero el Gobierno Civil de Madrid no tuvo conocimiento de la amenaza ?hasta poco despu¨¦s de las 12,40?,

Pese a que se montaron los dispositivos policiales adecuados al caso -en Madrid hay de quince a veinte falsas alarmas cada d¨ªa- y se reforzaron las dotaciones de las Fuerzas de Orden P¨²blico, no se pudo impedir que entre la una y la una y cuarto explosionaran los tres artefactos.

El alto n¨²mero de heridos y lo distante de los tres puntos saboteados dio al suceso especial dramatismo, al poblarse la ciudad de ambulancias y coches policiales que trasladaban v¨ªctimas a distintos centros sanitarios. Poco despu¨¦s de comenzar los ingresos hospitalarios se hicieron llamamientos a la poblaci¨®n para que acudiese a donar sangre a la residencia Primero de Octubre; la solidaridad fue tan intensa que en poco tiempo hubo que solicitar que cesase la llegada de donantes.

La confusi¨®n fue notable en los primeros momentos por el n¨²mero de personas aterrorizadas en cada uno de los puntos y el trasiego de veh¨ªculos asistenciales. En el Instituto Anat¨®mico Forense ingres¨® un cad¨¢ver ajeno al suceso que, en las primeras horas de la tarde, se contabiliz¨® como v¨ªctima de los atentados. Pero fue durante la madrugada cuando falleci¨® una mujer herida en la estaci¨®n de Atocha.

Los atentados se produjeron mientras el Consejo de Ministros se encontraba reunido en la Moncloa para debatir el programa econ¨®mico del Gobierno. El presidente Su¨¢rez y el ministro del Interior abandonaron la sala durante largo espacio de tiempo, mientras el resto del Gabinete continuaba sus tareas normales. A ¨²ltimas horas de la noche del domingo se hizo p¨²blico un comunicado en el que el Gobierno ?expresa su voluntad de hacer caer todo el peso de la ley sobre quienes desaf¨ªan los prop¨®sitos de paz del pueblo espa?ol?.

Anoche, el Ministerio del Interior distribuy¨® las fotograf¨ªas de seis presuntos activistas de ETA (p-m). por cuya captura ofrecerecompensas que van de los dos millones a las 500.000 pesetas. Se afirma en la nota que ?su localizaci¨®n interesa especialmente en estos momentos?, aunque no se les relaciona con los atentados de Madrid.

En el extranjero la noticia ha producido notable conmoci¨®n. La prensa francesa se interroga sobre el giro de ETA (p-m), y el independiente Le Monde sugiere que esta organizaci¨®n est¨¢ buscando bases en Portugal.

La jornada de ayer estuvo rodeada de tensi¨®n en Madrid, a causa de numerosas llamadas telef¨®nicas que anunciaban la explosi¨®n de artefactos en distintos puntos de la ciudad. A media ma?ana se procedi¨® a desalojar todas las estaciones del Metro, la estaci¨®n Sur de autobuses y otros lugares p¨²blicos. Todo ello provoc¨® un gran caos de circulaci¨®n, especialmente ins¨®lito en estas fechas veraniegas. Todas las llamadas resultaron ser falsas.