Los Taviani presentan en Venecia su ¨²ltimo filme

Paolo y Vittorio Taviani han escrito con las im¨¢genes de Il Prato (El Prado), que ya no es posible la rebeli¨®n, la esperanza. No han llegado a pronunciar la palabra revoluci¨®n, pero el p¨²blico asistente al estreno de su pel¨ªcula en la Mostra Internacional de Cine de la Bienal de Venecia recibi¨® la visi¨®n personal de los cineastas sobre la sociedad contempor¨¢nea.Dentro del cine italiano, los hermanos Taviani representan un caso singular de colaboraci¨®n, fruto de una experiencia personal y vivencial, donde el hombre se enfrenta a la historia. Los rasgos m¨¢s destacados son la sinceridad y autenticidad con que exponen sus propuestas sociopol¨ªticas, vinculadas al cine desde los primeros documentales y cortometrajes en los a?os cincuenta, a partir de su colaboraci¨®n con Valentino Orsini y Cesare Zavattini.

Tanto el p¨²blico como la cr¨ªtica, que ofrecieron discretos aplausos al finalizar la proyecci¨®n, se han sentido descolocados e inc¨®modos ante una pel¨ªcula que rompe la l¨ªnea habitual pol¨ªtica de los realizadores italianos. Su discurso ha pasa do desde la ideolog¨ªa a los problemas personales. ?En cada pel¨ªcula?, declararon los Taviani, ?intentamos analizar los problemas de nuestros d¨ªas. Con Il Prato hemos sentido el dolor, la angustia de los j¨®venes a trav¨¦s de cuatro personajes. En este sentido no expresamos, como ocurre en otras pel¨ªculas nuestras, con mayor intensidad las ideas te¨®ricas, sino unos sentimientos y situaciones concretas. Es un problema amplio; la pel¨ªcula es una protesta contra tanto dolor y angustia en la juventud actual, la imposibilidad de vivir la historia. El camino de la rebeli¨®n est¨¢ cerrado.?

Algunas constantes del cine de los Taviani siguen presentes en Il Prato, como la corporeizaci¨®n del paisaje y la m¨²sica (de Ennio Morricone), s¨ª bien la realizaci¨®n se americaniza y es m¨¢s dispersa que en Padre, Padrone, tocando diversos temas: el amor, la amistad a tres, la agitaci¨®n, la comuna agr¨ªcola, para tener como resultante la desesperaci¨®n y la muerte. El argumento se puede definir como la historia de un suicidio, recalcada a trav¨¦s de referencias cinematogr¨¢ficas, como secuencias y carteles de Alemania, a?o cero, de Rossellini, y Stroszek, de Herzog.