Los antiguos colectivos del PSOE y PSC, enfrentados de nuevo
La actual crisis por la que atraviesa el socialismo catal¨¢n es estrictamente pol¨ªtica y los conflictos de la UGT catalana son meras repercusiones de las tensiones internas del partido, que se expresan a trav¨¦s de una reaparici¨®n de los colectivos -el PSOE y el PSC- que te¨®ricamente se autodisolvieron para dar luz al actual partido unificado.Como elemento significativo y grave del problema destaca una innegable aparici¨®n, coincidente con el resurgimiento de los colectivos, de un aut¨¦ntico embri¨®n de conflicto comunitario. ?Durante meses?, afirm¨® un dirigente socialista a este diario, ?hemos visto c¨®mo el partido no se preocupaba de los temas estrictamente obreros y se limitaba a la pol¨ªtica auton¨®mica y a la Generalidad. Ello no puede seguir siendo as¨ª.?
Una nueva manifestaci¨®n del conflicto puede tener efecto ma?ana, en ocasi¨®n de la reuni¨®n ordinaria de la ejecutiva del PSC-PSOE. En la ¨²ltima celebrada, tres miembros de la misma, todos ellos procedentes del mismo partido que Obiols y seguidores de ¨¦ste -Josep Mar¨ªa Sala, Juan Jos¨¦ Ferreiro, Pedro Jov¨¦-, amenazaron con dimitir si no se revisaban las recientes sanciones habidas dentro de: la UGT. Estas sanciones afectan a los muy escasos seguidores con que el grupo Obiols cuenta dentro del sindicato socialista.
Los seguidores de Obiols intentaron conseguir que la prensa interpretara los conflictos dentro del sindicato como efectos de una inexistente pol¨¦mica interna de la UGT sobre cuestiones organizativas. Ninguna fuente de la UGT dio credibilidad alguna a esta f orma de presentar el problema. Por su parte, el profesor socialista 555,antiago Rold¨¢n manifest¨® a este diario que no exist¨ªa ninguna pol¨¦mica de car¨¢cter sindical. ?Este, ni tan siquiera es el decorado del tema?, afirm¨®.
En cambio, un elemento objetivo de primer orden es la cercan¨ªa de las elecciones al Parlamento catal¨¢n. Por un lado, la posible elecci¨®n de Revent¨®s a la presidencia de la Generalidad -dada como muy probable por los socialistas, quiz¨¢ con excesiva precipitaci¨®n- plantea el tema de su sustituci¨®n al frente del partido.
Por otro lado, hay que destacar que paralelamente han surgido fuertes intereses en favor ?le que el alcalde de Barcelona, Narc¨ªs, Serra, sea un candidato alternativo a dicha presidencia, para el caso, pr¨¢cticamente seguro, de que la designaci¨®n del presidente por parte del Parlamento obligue a efectuar diversos pactos o maniobras en el seno del Parlamento auton¨®mico. Serra es mucho mejor visto por la derecha que Revent¨®s. De ah¨ª que sectores de izquierda de su propio partido est¨¦n intentando que a Serra le sea ofrecido un lugar en la candidatura al Parliamento catal¨¢n tan bajo que le obligue a no aceptarlo.
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