A Radiotelevisi¨®n Espa?ola siempre se le puede vender un poco mas caro

RTVE ha estado comprando sus productos con un 10% por encima de los precios normales del mercado. Se compra al por menor lo que podr¨ªa comprarse a mayoristas o fabricantes. El 63% del presupuesto para gastos corrientes se denomina ?otros gastos? y la absoluta mayor¨ªa de las compras, de un total presupuestado de 7.000 millones de pesetas, se efect¨²an, no por expediente, sino por contrataci¨®n directa. En TVE se dan, afirma la auditor¨ªa, todas las circunstancias para que puedan llevarse a cabo pr¨¢cticas fraudulentas. El descontrol es tal que, ?no es posible hacer una auditor¨ªa de las compras? de este organismo.

La organizaci¨®n de la funci¨®n de compras es vital en cualquier empresa. En el caso de RTV E, seg¨²n el informe, no se puede hablar de verdadera organizaci¨®n de compras porque no existe una concepci¨®n unitaria de la misma. El siguiente p¨¢rrafo textual, uno de los m¨¢s severos de la auditor¨ªa, enjuicia as¨ª la Financiaci¨®n de compras: ?Puede afirmarse, sin temor a equivocaci¨®n, que en RTVE no existe una concepci¨®n espec¨ªfica de la financiaci¨®n de las compras. Es m¨¢s, creemos que la direcci¨®n no conoce la incidencia global de las compras en la econom¨ªa de RTVE. Al no existir una contabilidad d gesti¨®n ni, hasta fechas cercanas indicios de preocupaci¨®n en la direcci¨®n de administraci¨®n y finan zas por este tema, resulta dif¨ªcil imaginarse al equipo directivo de RTVE manejando conceptos elementales en cualquier empresa como capital circulante, per¨ªodo de rotaci¨®n o endeudamiento a corto plazo, por citar algunos. Ni siquiera puede utilizarse como sustitutiva la informaci¨®n econ¨®mica que pueda ofrecer la gesti¨®n del presupuesto, ya que la contabilidad del presupuesto refleja muy escasamente la realidad econ¨®mica de RTVE.?Los precios pagados por RTVE comparados con los precios que por id¨¦nticos productos y en id¨¦nticas fechas se efectuaron en otro organismo oficial, de acuerdo con una muestra expresamente escogida por los interventores de Hacienda, son bastante m¨¢s altos que los que se pagar¨ªa en una situaci¨®n normal de tesorer¨ªa. El informe arroja las siguientes conclusiones: ?RTVE ha estado pagando un promedio de un 10% por encima de los precios normales de mercado. Este 10% se hubiera incrementado considerablemente si hubi¨¦ramos comparado los precios pagados por RTVE con los que se hubieran obtenido con una gesti¨®n de compras eficiente y que hubieran sido bastante m¨¢s bajos que los de mercado.?

Como prueba de esta aseveraci¨®n se exponen algunos casos particularmente llamativos: ?Primero. el Serviclo de Control y Aprovislonarri lento ha comprobado con datos fehacientes que un proveedor hab¨ªa recargado en un 91,32% el precio de suministro de doce rodillos pluma. Este descubrimiento fue accidental, normalmente estos casos pasar¨ªan inadvertidos. Segundo. el reacondicionamiento de cabezas de video y audio. un cap¨ªtulo muy importante. se ha estado pagando durante a?os aproximadamente un 40'7,- por encima del precio que ofrecen estas casas: a este 40% habr¨¢ que a?adir las comisiones de los intermediarios pues, como se dice en otro lugar, en ning¨²n caso se ha contratado este servicio con las casas extranjeras que en definitiva lo llevaron a cabo. Tercero, sin que tengamos datos cuantitativos, se observa que numerosas compras se realizan en unos grandes almacenes. Creemos innecesario demostrar que los precios de unos grandes almacenes de venta al por menor son necesafiamente m¨¢s altos que los que se obtendr¨ªan de un mayorista o del propio fabricante.?

La situaci¨®n propicia, en definitiva, lo que los interventores denominan ?sospechas de inmoralidad?. ?Decimos sospechas, porque lo que hemos detectado han sido varios casos de personas relacionadas con la funci¨®n de compras que confiesan claramente haber recibido ofertas de comisiones de suministradores habituales. Naturalmente, si algu len ha aceptado estas comisiones no lo confiesa. S¨ª poderrios asegurar que, dada la dispersi¨®n y desorganizaci¨®n de las compras. se dan las circunstancias ideales para que los proveedores puedan llevar a cabo pr¨¢cticas fraudulentas.?

Independientemente de que en algunos casos el proveedor sea impuesto por el usuario, de que se haga el pedido a proveedores habituales o de que, en otras ocasiones, la compra se realice mediante una correcta soluci¨®n, los interventores se?alan como hechos an¨®malos que el proveedor sea ?el que menos prisa tiene por cobrar?. El retraso en los pagos a proveedores se demor¨®, en algunas ¨¦pocas, hasta dos a?os. Por ello, ?numerosos proveedores se niegan a servir pedidos a RTVE, con lo cual la competencia se resiente? y ?en el caso de proveedores insustituibles, los gestores de RTVE recurren a compras a trav¨¦s de intermediarios, estos, naturalmente, cobran sus servicios?.

La auditor¨ªa pone en evidencia la anormal organizaci¨®n de las distintas funciones de compras. As¨ª, la dispersi¨®n entre un numeroso grupo de ¨®rganos que, a su vez, de penden de los propios usuarios de bienes comprados, es enjuiciada as¨ª: ?Esta situaci¨®n es justo la contraria de la que en cualquier ma nual de buena gesti¨®n debe enten derse o puede entenderse por organizaci¨®n de compras.? Se afirma que la mezcla de ¨®rganos entre el Ministerio de Cultura y organismo aut¨®nomo es insostenible, tanto desde el punto de vista legal como de gesti¨®n. No existe verdadera contabilidad de compras, con las siguientes precisiones: ?Esta s¨®lo se recoge, no de una manera completa, en- la contabilidad presu puestaria: las compras formaliza das en expedientes se aplican al presupuesto deforma aceptable; las compras menores de 100.000 pesetas (la inmensa mayor¨ªa) se van realizando sin l¨ªmites, y, posteriormente, se van aplicando a los distintos conceptos presupuestarios cuando se puede; las compras a trav¨¦s de producci¨®n de programas se contabilizan muy defectuosamente y no se respetan los l¨ªmites que figuran en los diversos conceptos de los presupuestos de cada programa.?

El informe a?ade que tampoco se respeta el cap¨ªtulo segundo de la estructura presupuestaria de los organismos aut¨®nomos industriales, comerciales, etc¨¦tera, en que se encuadra RTVE. ? El defecto fundamental, a nuestro juicio, es que no existe presupuesto de compras como tal. A la vista del mismo podr¨ªa pensarse que en RTVE no se adquieren bienes corrientes: ni pel¨ªcula virgen, ni cinta de video-tape, ni material para decorados, ni productos de laboratorio, por citar algunos casos claros.? La dotaci¨®n para compras se encuentra dispersa en varios conceptos del presupuesto, en particular dentro del gran cr¨¦dito global del art¨ªculo 3.8 que se denomina otros gastos y que representa, nada menos, que el 63% del presupuesto para gastos corrientes, excluidos sueldos y salarios.

El problema m¨¢s grave de la contrataci¨®n, seg¨²n los interventores, consiste en que ¨¦sta se efect¨²a de forma directa y no por expedientes. ?De acuerdo con los datos facilitados por RTVE, s¨®lo un 4,2% de la dotaci¨®n del cap¨ªtulo 3 se tramita a trav¨¦s de expediente, unos 317 millones de pesetas de un total superior a 7..000 millones de pesetas.?

La recepci¨®n f¨ªsica de las mercanc¨ªas, en contra de lo usual, tampoco es independiente de la funci¨®n de compras y almacenaje. ?Numerosas mercanc¨ªas ni siquiera pasan f¨ªsicamente por un almac¨¦n. En muchos casos, adem¨¢s, se simula una entrada y una salida simult¨¢nea de un almac¨¦n, y con esto se considera la operaci¨®n de recepci¨®n formalizada.? Aunque algunas dependencias se mostraron preocupadas por la falta de control posterior al gasto, e incluso existen intentos de organizaci¨®n, el informe no exime de responsabilidades: ?Entendemos que la inexistencia de estas normas y el descontrol consecuente implican unas responsabilidades serias para los ¨®rganos (la direcci¨®n general de RTVE y la direcci¨®n de administraci¨®n y finanzas) que, debiendo haber organizado un sistema de control, no lo han hecho.?

El resultado no puede ser peor: ?Una auditor¨ªa de las compras de RTVE es imposible. Efectivamente, cualquier auditor¨ªa seria tiene como condici¨®n indispensable la existencia de unos datos contables a constatar. Como en RTVE no existen tales datos, la conclusi¨®n es obvia.?