Guatemala, veinte mil muertos en diez a?os

?Ser hoy l¨ªder sindical o miembro activo de un sindicato en Guatemala significa poner en riesgo la propia vida.? Esta es la conclusi¨®n sacada por Amnist¨ªa Internacional (AI) tras la visita efectuada a dicho pa¨ªs por una comisi¨®n investigadora de la citada organizaci¨®n, efectuada el pasado a?o. Seg¨²n, los datos suministrados por AI en 1978, entre 1966 y 1976. los muertos a manos deI Ej¨¦rcito, fuerzas de seguridad y ?escuadrones de la muerte? llegaba a 20.000. Para el per¨ªodo comprendido entre mayo de 1978 y septiembre de 1979 la misma organizaci¨®n se?ala que el n¨²mero de v¨ªctimas mortales contabiliza la cifra de 2.000.

Se?ala Amnist¨ªa Internacional que en el ¨²ltimo per¨ªodo referido fueron descubiertos cementerios secretos y fosas comunes. Informa tambi¨¦n que de los m¨¢s de quinientos cad¨¢veres que fueron encontrados en la segunda mitad de 1978 cerca de doscientos presentaban se?ales de tortura.De acuerdo con la Polic¨ªa Nacional de Guatemala, en los cuatro primeros meses de 1979 se encontraron los cad¨¢veres de m¨¢s de mil v¨ªctimas. La mayor¨ªa han sido enterrados sin identificar, registrados simplemente como ?XX?. Las v¨ªctimas que han sido identificadas incluyen conocidos pol¨ªticos de la oposici¨®n, dirigentes obreros y estudiantiles, periodistas, sacerdotes y abogados y miembros de la poblaci¨®n ind¨ªgena de Guatemala.

A menudo, los cad¨¢veres son hallados a gran distancia del lugar del secuestro, y en muchos casos han sido mutilados -frecuentemente por balazos en la cara y cort¨¢ndoles las manos para hacer su identificaci¨®n imposible.

Amnist¨ªa Internacional atribuye la responsabilidad por la escalada de la violencia, que comenz¨® en mayo de 1978 con la matanza de cien indios kekch¨ªes en el norte de Guatemala, al Gobierno, a los militares y las fuerzas de seguridad y a los semiclandestinos ?escuadrones de la muerte?.

Los ?escuadrones de la muerte? -grupos ?legales que incluyen personal de seguridad fuera de servicio- fueron formados a principios de los a?os sesenta para combatir a las guerrillas. Despu¨¦s de que ¨¦stas fueron derrotadas a fines de los a?os sesenta, los ?escuadrones de la muerte? continuaron operando. secuestrando y asesinando a los l¨ªderes de la oposici¨®n y a sus simpatizantes.

En septiembre del pasado a?o, en un esfuerzo por poner fin a estos asesinatos, Al inici¨® una campa?a internacional publicando una lista de secuestros y asesinatos cometidos durante 1979. Los ministros del Gobierno rechazaron aceptar la responsabilidad por la violencia incontrolada y acusaron a Al de ?procomunista? y ?agente de la corona brit¨¢nica?.

Amnist¨ªa Internacional envi¨® una misi¨®n investigadora a Guatemala entre el 10 y el 15 de agosto, de la que formaba parte el ex presidente de las Cortes Espa?olas, Fernando Alvarez de Miranda, que mantuvo conversaciones con altas autoridades guatemaltecas.

Esta delegaci¨®n fue enviada para investigar lo que Al describe como ?alarmante aumento de asesinatos pol¨ªticos, la mayor¨ªa de ellos llevados a cabo por escuadrones de la muerte, que a menudo incluyen a miembros uniformados de las fuerzas armadas y de seguridad?.