El Pleno del Senado inicia el debate del Estatuto de los Trabajadores
El Pleno del Senado comenz¨® ayer el debate del proyecto de Estatuto de los Trabajadores, en el que apenas se est¨¢n introduciendo modificaciones con respecto al texto aprobado por el Congreso de los Diputados. En la sesi¨®n de ayer se aprobaron los 38 primeros art¨ªculos. Unicamente se cambi¨® la redacci¨®n del art¨ªculo 15, de modo que los contratos temporales de trabajo se prorrogar¨¢n por el tiempo que se determine mediante decreto, previa consulta al consejo general del Instituto Nacional de Empleo y seg¨²n la situaci¨®n del mercado de trabajo.
Esta enmienda fue propuesta con juntamente por PSOE y UCD, y hab¨ªa sido negociada tras la introducci¨®n en la Comisi¨®n de Trabajo de una enmienda de UCD por la que se fijaba en dos meses el l¨ªmite m¨¢ximo de pr¨®rroga de este tipo de contratos, modificaci¨®n que los socialistas consideraban regresiva, ya que el Congreso no hab¨ªa establecido ning¨²n m¨ªnimo. En el mismo paquete negociado se contempla la modificaci¨®n del art¨ªculo 52 sobre extinci¨®n del contrato por causas objetivas, de modo que la necesidad de amortizar un puesto de trabajo s¨®lo pueda aplicarse en empresas de menos de cincuenta trabajadores.Tambi¨¦n se modificar¨¢ la disposici¨®n transitoria tercera, para incluir entre los posibles beneficiarios de los contratos a tiempo parcial a los trabajadores agrarios que hubieran quedado en desempleo Salvo negociaciones de ¨²ltima hora, no se espera que se introduzcan m¨¢s modificaciones en el proyecto.
La sesi¨®n discurri¨® con gran agilidad y sin apenas debate, aunque los socialistas mantuvieron la pr¨¢ctica totalidad de sus enmiendas. Por su parte, el senador Casademont, integrado en el Grupo Vasco, defendi¨® las enmiendas del PNV, cuyos parlamentarios actualmente no asisten a las Cortes, y el independiente Tirso Pons mantuvo algunas de las enmiendas que hab¨ªa presentado, correspondientes a las tesis sostenidas por el Grupo Comunista en el Congreso. UCD, sin embargo, se opuso sistem¨¢ticamente a las propuestas de modificaci¨®n, excepto las negociadas.
Al comienzo de la sesi¨®n, el ministro de Trabajo, Rafael Calvo Ortega, present¨® el proyecto afirmando que el nuevo Estatuto modifica tres principios fundamentales en la legislaci¨®n anterior. El primero, relativo a la intervenci¨®n administrativa en las relaciones laborales, ya que se part¨ªa de que la empresa es una convergencia de intereses, mientras que ahora se reconoce como un hecho la existencia de una confrontaci¨®n de intereses, por lo que se deja la iniciativa de las relaciones a la libre autonom¨ªa de las partes.
Tambi¨¦n se matiza el principio de la uniformaci¨®n de contrataci¨®n, introduciendo el nuevo tipo de contratos temporales frente al ya existente de contrato indefinido. Este, seg¨²n el ministro, era positivo cuando exist¨ªa el pleno empleo, -pero ahora puede beneficiar a unos pocos y perjudicar al conjunto de la clase trabajadora. Asimismo, se acaba con la reglamentaci¨®n del proceso negociador, que tambi¨¦n se deja a la autonom¨ªa de las partes.
El ministro calific¨® el proyecto de equilibrado, no porque sea fruto de un consenso, sino porque es el resultado de la aceptaci¨®n de una determinada relaci¨®n de fuerzas.
Anunci¨® que el Gobierno se solidariza totalmente con este Estatuto, y que en el futuro responder¨¢ de ¨¦l ante las fuerzas sociales, sin pedir auxilio para llevarlo a la pr¨¢ctica.
Por ¨²ltimo, dijo que carecen de fundamento las cr¨ªticas contra el proyecto realizadas desde posiciones autonomistas, ya que no es cierto, como se ha dicho, que lo! acuerdos interconfederales sean una limitaci¨®n para los sindicatos y organizaciones empresariales de ¨¢mbito auton¨®mico.
Intervenci¨®n socialista
Por el Grupo Socialista, Jos¨¦ Rodr¨ªguez de la Borbolla y Juan Jos¨¦ Laborda afirmaron que el modelo de relaciones que establece este Estatuto rompe decisivamente con la etapa anterior, devolviendo el protagonismo a las partes a quienes les correspond¨ªa, y aunque en ¨¦l quedan defectos, es ya una buena base para avanzar y defender las reivindicaciones de los trabajadores.
Francisco Villodres, de UCD, resalt¨® que el Estatuto favorecer¨¢ el empleo con la introducci¨®n de la contrataci¨®n a tiempo parcial, ya que permite emprender empresas que no se sabe cu¨¢ndo terminar¨¢n y que potencia la autonom¨ªa de las partes.
Las propuestas de modificaci¨®n de los socialistas pretend¨ªan, entre otras cosas, que a los funcionarios se les pueda aplicar parte de este Estatuto, que el deber de contribuir a la mejora de la producci¨®n se cumpla de acuerdo con lo pactado libremente por trabajadores y empresarios, que tengan preferencia para ser contratados como fijos los trabajadores que ya hayan estado antes en la empresa en r¨¦gimen temporal o de pr¨¢cticas, que el empresario pueda verificar por un m¨¦dico propio el estado de enfermedad o accidente de un trabajador en baja, y que las pagas extras sean de un m¨ªnimo de treinta d¨ªas de trabajo, as¨ª como la implantaci¨®n de la jornada de cuarenta horas.
Los senadores vascos deseaban evitar la exclusi¨®n de los funcionarios p¨²blicos que el contrato de trabajo sea visado por la representaci¨®n sindical, as¨ª como el documento que declara extinguida la relaci¨®n laboral. El senador Pons pidi¨® la supresi¨®n del deber de contribuir a la mejora de la producci¨®n.
Ib¨¢?ez Freire responde
Al comienzo de la sesi¨®n, el presidente del Senado, Cecilio Valverde conden¨®, en nombre de la C¨¢mara, los recientes sucesos en la embajada espa?ola en Guatemala, as¨ª como la actitud del Gobierno de aquel pa¨ªs que calific¨® de incomprensible. Seguidamente, el senador socialista por Navarra, V¨ªctor Manuel Arbeloa plante¨® una pregunta sobre la muerte de Miguel Arregui Mar¨ªn, concejal de Herri Batasuna, al disparar la Guardia Civil sobre el autom¨®vil en que viajaba en un control establecido en Echarri-Aranaz. El se?or Arbeloa expres¨® su horror y asco por los recientes asesinatos de seis guardias civiles y dos j¨®venes de izquierda, y mostr¨® sus dudas sobre la correcci¨®n t¨¦cnica del control y las instrucciones sobre la conveniencia de disparar en ¨²ltima instancia s¨®lo a las ruedas de los coches. Su opini¨®n de que es preferible que se escape un asesino a que muera un inocente provoc¨® las protestas de UCD y un momento de gran tensi¨®n.
Contest¨® el ministro del Interior, Antonio Ib¨¢?ez Freire, quien afirm¨® que el control era t¨¦cnicamente correcto, como lo prueba el que durante hora y media no se produjo ning¨²n incidente, y que la actuaci¨®n de las fuerzas de seguridad se ajust¨® a las normas reglamentarias, mientras que el autom¨®vil no hizo caso a las se?ales de alto e intent¨® seguir adelante. Tambi¨¦n dijo que todos estamos hartos de tanta violencia, sobre todo de los terroristas que atacan a la democracia y quieren imponer la dictadura marxista leninista en una parte de Espa?a.
Asimismo, el secretario de Estado para la Salud contest¨® a una pregunta sobre la pol¨ªtica sanitaria respecto a las enfermedades reum¨¢ticas planteada por el senador socialista Javier Paulino, quien acus¨® a la Seguridad Social de no combatir esta enfermedad como es debido.
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