El Gobierno Civil ordena el cierre provisional de cincuenta y cuatro bingos madrile?os
Cincuenta y cuatro de las 122 salas de bingo existentes en la provincia de Madrid fueron suspendidas provisionalmente ayer, por orden del gobernador civil, acusadas de haber incumplido el art¨ªculo 15 del Reglamento de Juego del Bingo, en lo referente a la presentaci¨®n del estado de cuentas y justificaci¨®n de ingresos y gastos de la entidad. El cierre que pesa desde ayer sobre dichas salas es ¨²nicamente una sanci¨®n administrativa y no supone la retirada del permiso de apertura, con lo que la reiniciaci¨®n de actividades podr¨ªa darse a partir del momento mismo en que presenten la documentaci¨®n solicitada.
El Reglamento de Juego del Bingo, en su art¨ªculo 15, establece que todas las entidades que sean concesionarias de la autorizaci¨®n para la apertura de una sala de bingo deber¨¢n, en el mes de enero de cada a?o, presentar su cuenta de p¨¦rdidas y ganancias y justificar los gastos e ingresos que a lo largo del a?o fiscal inmediatamente anterior hubieran tenido.En funci¨®n de esa obligaci¨®n, la Comisi¨®n Nacional del Juego record¨®, el pasado mes de diciembre a todos los concesionarios de tales autorizaciones la normativa vigente. Es m¨¢s, la Asociaci¨®n Empresarial de Juegos Autorizados, entidad que agrupa a todas las empresas de servicios dedicadas a la explotaci¨®n de los bingos -sean o no concesionarias de la autorizaci¨®n-, envi¨® el pasado mes de enero, una circular a todos su asociados en la que les insist¨ªa en la obligaci¨®n que pesaba sobre ellos.
Sin embargo, 54 de los bingos existentes en la provincia de Madrid, la mayor¨ªa fuera de la capital, no cumplieron con la normativa, y el Gobierno Civil, a instancias de la Comisi¨®n Nacional del Juego, orden¨® el cierre de los locales infractores en tanto no regularan su situaci¨®n administrativa. La propia asociaci¨®n empresarial reconoci¨® la existencia de tal infracci¨®n y la justicia de la sanci¨®n. El Gobierno Civil intent¨® incluso evitar la imposici¨®n de tal medida disciplinaria y prorrog¨® durante cinco d¨ªas la presentaci¨®n de la correspon diente documentaci¨®n.
La reglamentaci¨®n actualmente vigente sobre el juego del bingo intenta, en todo momento garantizar la pureza del mismo. Para ello, en el ya citado art¨ªculo 15, se establece el ¨²ltimo control: sobre las cuentas y su destino. ? Lo que queremos?, declar¨® a EL PAIS el jefe del gabinete t¨¦cnico de la Comisi¨®n Nacional del Juego, Jes¨²s G¨®mez Chaparro, ?es conocer si un bingo ha tenido beneficios; si los ha tenido, a qu¨¦ los ha dedicado, y, en definitiva, controlar a este tipo de entidades.?
Seg¨²n la vigente legislaci¨®n, las concesiones para la apertura y explotaci¨®n del juego del bingo se realizan a nombre de entidades que tengan fines sociales o ben¨¦ficos. ?Al pedir las cuentas?, insiste el se?or G¨®mez Chaparro, ?lo que hacemos es ver si cada uno de los bingos en funcionamiento cumple las funciones estatutarias por las que fue autorizado.?
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