Los carnavales de Tenerife, una tradici¨®n ininterrumpida

Con la elecci¨®n de la reina del carnaval, celebrada el pasado jueves en el teatro Guimer¨¢ de la capital tinerfe?a, comenzaron estas fiestas en honor de los dioses paganos Baco, Venus, Pan, entre otros. Tenerife ha sido una de las pocas provincias espa?olas que no ha visto interrumpidos los festejos del carnaval, ni siquiera durante la etapa franquista. Bast¨® que en los a?os dif¨ªciles, universitarios laguneros se echaran a la calle con sus s¨¢banas y sus habanadores, y un obispo liberal se hiciera responsable para que los carnavales fuesen tolerados a rega?adientes con el nombre disfrazado de Fiestas de Invierno, aunque los organismos oficiales se cuidaron de que este hecho no trascendiera a la Pen¨ªnsula.Si es cierto que en C¨¢diz y en otras localidades espa?olas se mantuvo el fuego sagrado del carnaval, pero desde una dimensi¨®n de mero espect¨¢culo o desfile callejero sin m¨¢scaras, en Tenerife se sigui¨® el rito del disfraz y la cara cubierta, se permitieron las concentraciones de masas en locales cerrados y locales abiertos, mientras que los cuerpos policiales permanec¨ªan acuartelados y no se registraba el menor incidente, al rev¨¦s que en R¨ªo de Janeiro. Ni muertos, ni heridos, ni magulladuras. ?No vale la pena buscar pelea en estos d¨ªas, porque te meten en el talego y luego te pierdes el resto de la fiesta?, dec¨ªa con gracejo uno de esos caracter¨ªsticos matas chicharreros. Luego, cuando se rebasa la denominada Pi?ata y el ?entierro de la sardina?, no quedan ganas ni para danzar el cl¨¢sico ?te conozco, mascarita?.

En Tenerife, de los barrios salen las comparsas, muy al estilo de las de Brasil; las murgas, que tienen bastante parecido con las gaditanas; los grupos espont¨¢neos, bien a niveles familiares o de vecinos. Adem¨¢s, el carnaval de Tenerife cuenta con esa variedad y ductilidad musicales que permite cantar v escuchar desde coros de zarzuela y ¨®pera, a cargo de las rondallas, hasta congas, sambas, rumbas, pasando por joropos habaneras y dem¨¢s g¨¦neros folkl¨®ricos

Si Tenerife lleva la delantera, en las otras islas tambi¨¦n ha despertado el carnaval en los ¨²ltimos a?os. En Las Palmas, de cara al turismo, se ha querido seguir los pasos de Tenerife, creando comparsas y murgas, concursos y desfiles. Hubo intento de regionalizar el carnaval por parte de la comisi¨®n de Las Palmas, pero no prosper¨® la idea, ya que en Tenerife se pens¨® que se trataba de una maniobra grancanaria para debilitar las fiestas de la isla picuda.

Sin embargo, aunque las fechas coinciden, millares de grancanarios se trasladan a Tenerife si es que encuentran billete de avi¨®n o de ferry o alguna plaza hotelera.