La RFA no sigue el boicot a las olimpiadas
La Rep¨²blica Federal de Alemania no hace propio el ultim¨¢tum norteamericano para la entrada en vigor del boicot de los pr¨®ximos Juegos Ol¨ªmpicos de Mosc¨². Seg¨²n se desprende de esta afirmaci¨®n del ministro del Interior de Bonn, Gerhart Rudolf Baum, liberal, uno de los tres ministros alemanes occidentales que se encuentran en el extranjero para negociar aspectos relacionados con la crisis afgana, la RFA no tendr¨¢ porqu¨¦ decidirse hasta el d¨ªa 20, si retiene o no a sus atletas y anula su participaci¨®n en la Olimpiada. La diplomacia alemana, que en los ¨²ltimos d¨ªas transcurre por vericuetos hasta ahora no frecuentados, ha puntualizado tambi¨¦n estas declaraciones del ministro mediante otras del experto en pol¨ªtica exterior del Partido Social Dem¨®crata (SPD), Peter Corterier, que tambi¨¦n se encuentra ahora en viaje de ?buena voluntad?, en Estados Unidos. Corterier declar¨® ayer a la emisora Deutschland Funk, que, en cualquier caso, la RFA no podr¨¢ sustraerse de prestar su adhesi¨®n al boicot ol¨ªmpico si Norteam¨¦rica as¨ª lo decide. A su vez, el diputado socialdem¨®crata ha a?adido sobre las diferencias ¨²ltimas entre Washington y Bonn que, efectivamente, el Gobierno de la RFA est¨¢ molesto con el norteamericano por la falta de transparencia en las consultas bilaterales sobre la crisis afgana. Tres d¨ªas antes de que Washington decidiese aplicar el boicot ol¨ªmpico, el presidente Carter hab¨ªa asegurado a Bonn que ni siquiera se hab¨ªa planteado tal medida. Para Corterier, sin embargo, existe un buen indicio de que esta falta de permeabilidad est¨¢ a punto de subsanarse, y es que Estados Unidos ha reconocido su error para con sus m¨¢s fieles aliados. Que sea efectivamente as¨ª, o todo lo contrario, puede quedar de manifiesto con ocasi¨®n de la visita de Cyrus Vance a la RFA, en las pr¨®ximas horas. El diputado socialdem¨®crata ha aplicado tambi¨¦n a las relaciones germano-norteamericanas un concepto que los alemanes gustan de emplear, sobre todo desde que comenz¨® la crisis de Afganist¨¢n, a sus relaciones con la Uni¨®n Sovi¨¦tica: as¨ª como la ostpolitik no debe transcurrir por una ?calle de una sola direcci¨®n?, lo mismo debe aplicarse a las relaciones con Estados Unidos. La solidaridad debe ser rec¨ªproca, si no quiere tropezar con malentendidos y susceptibilidades. Por lo pronto, seg¨²n Corterier, Washington debe comprender que cada pa¨ªs ha de contar con ? un cierto margen de juego propio?.Frente a esta toma de postura del Partido Social Dem¨®crata, a trav¨¦s de un Parlamento de su fracci¨®n, la Democracia Cristiana ha insistido en la ?estrecha vinculaci¨®n? que debe existir entre Bonn y Washington. HeImut Kohl, el casi enmudecido l¨ªder conservador, presidente de este partido, ha declarado que esta vinculaci¨®n con Estados Unidos ?es prioritaria respecto de la amistad con Francia?. Seg¨²n Kohl, ?es lamentable la reacci¨®n tan pobre de una gran parte del mundo libre? contra la invasi¨®n sovi¨¦tica en Afganist¨¢n. Un comentarista de la misma emisora a la que Kohl ha hecho estas declaraciones -Sender Freies Berlin- a?adir¨ªa en otro espacio que, dentro del mundo libre, una gran parte de ¨¦l, justamente los pa¨ªses menos desarrollados, ?no son tan antisovi¨¦ticos como antinorteamericano?. Helmut Kohl ha pedido tambi¨¦n un contundente rechazo de la Conferencia Europea para el Desarme, propuesta por el jefe del Partido Obrero Unificado polaco, Edward Giereck, propuesta que el canciller Schmidt y su ministro de Exteriores, Genscher, consideran ?digna de ser estudiada?. La proposici¨®n polaca coincide en la forma con otra anterior francesa, y significar¨ªa, de aceptarse, una prolongaci¨®n de la Conferencia.
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