En los ¨²ltimos cinco anos, 377 deportistas espa?oles perdieron la vida

La pr¨¢ctica de ocho deportes produce todos los a?os accidentes mortales en Espa?a. Monta?ismo, caza, actividades subacu¨¢ticas, deporte a¨¦reo, f¨²tbol, ciclismo, pesca y motociclismo pueden considerarse los deportes m¨¢s peligrosos; pues, en los ¨²ltimos cinco a?os, siempre protagonizaron accidentes mortales. Otros dieciocho deportes tambi¨¦n se vistieron de luto espor¨¢dicamente en el ¨²ltimo lustro. En total fueron 377 personas las que perdieron la vida a causa del deporte.

El a?o negro del deporte espa?ol fue 1977, en el que murieron 85 deportistas. Desde entonces la cifra se ha ido rebajando, merced a las mayores medidas de seguridad que se toman cada d¨ªa, y as¨ª se lleg¨® a las 68 v¨ªctimas del pasado a?o, aunque este n¨²mero se ver¨¢ ligeramente aumentado, pues en caza, por ejemplo, el a?o termina con la temporada cineg¨¦tica y ¨¦sta ha concluido recientemente, con lo que hay partes de accidentes mortales que a¨²n no han sido cerrados.Cuando sobreviene un accidente, el deportista, si est¨¢ federado, autom¨¢ticamente tambi¨¦n est¨¢ asegurado. La Mutualidad General Deportiva es el organismo que se hace cargo de todo, aunque f¨²tbol y caza tienen sus propias entidades aseguradoras con la Mutualidad General de Futbolistas y compa?¨ªas privadas, respectivamente. Como accidente deportivo entienden, adem¨¢s del que acontece durante el desarrollo de la propia actividad, el que se pueda producir en el traslado hasta o desde el escenario deportivo.

Las medidas de seguridad que se toman hoy d¨ªa para la pr¨¢ctica deportiva son totalmente insuficientes, como lo demuestra la estad¨ªstica de accidentes mortales. El monta?ismo siempre est¨¢ a la cabeza de esta luctuosa lista. Unos a?os h¨¢s y otros menos, pero la monta?a, invariablemente, cobra siempre su tributo, al igual que en otros deportes, aunque en menor escala.

De los ocho deportes que resultan anualmente mortales, en tres no se toma ning¨²n tipo de prevenci¨®n de accidentes. Las Federaciones de Ciclismo, F¨²tbol y Pesca ignoran la seguridad de.sus asociados y conf¨ªan ¨²nicamente en la prudencia de cada uno.

La prevenci¨®n de accidentes en monta?ismo llega a trav¨¦s de los cursillos que imparten las escuelas de monta?a. La ense?anza tambi¨¦n deriva hacia la iniciaci¨®n para los principiantes. La prudencia y la seguridad es tema principal y casi exclusivo en los boletines que se env¨ªan a las federaciones provinciales y sociedades.

Para las actividades subacu¨¢ticas tambi¨¦n existen cursillos, que en ciertas modalidades son obligatorios. Cuestan 7.000 pesetas y su duraci¨®n puede ser de hasta cuatro meses. Si no se superan, la Federaci¨®n s¨®lo concede entonces la licencia para actividades menos peligrosas.

El incremento de accidentes.en el deporte a¨¦reo ha llegado a trav¨¦s del vuelo libre. Para prevenirlos la Federaci¨®n ha recibido una subvenci¨®n de 1.300.000 pesetas, destinadas a la compra de paraca¨ªdas. Esto se completa con el regular env¨ªo a los clubes de consejos sobre la seguridad.

En motociclismo hay dispuestas unas medidas de seguridad pasiva. Luego, lo que pase en carrera es imprevisible. La principal est¨¢ orientada a disminuir la peligrosidad de los circuitos, y la segunda, a proteger a los pilotos a trav¨¦s de la equipaci¨®n. Adem¨¢s es obligatoria la revisi¨®n t¨¦cnica de las motos antes de cada carrera.

Por ¨²ltimo, en la caza, los ¨²nicos consejos sobre seguridad llegan por medio de los cursillos de la Escuela Espa?ola de Caza. Generalmente los accidentes se producen al ser alcanzado el cazador por un disparo de su propia escopeta a causa de una ca¨ªda, un enganche o una imprudencia. En la caza existe, adem¨¢s de un seguro obligatorio que cubre hasta 300.000 pesetas, un seguro voluntario que llega a los dos millones de pesetas.

Para atender accidentes en otros deportes, ya que no existe una prevenci¨®n espec¨ªfica, suele haber en todos los polideportivos un ayudante t¨¦cnico sanitario al frente del botiqu¨ªn, adem¨¢s de un m¨¦dico de zona y la posibilidad de contar con un servicio de ambulancias del ayuntamiento. Esto es suficiente para cubrir los primeros cuidados de un accidentado en un polideportivo, ya que las lesiones no son, por lo general, graves.