Nuevas p¨¦rdidas

Los esfuerzos de la Bolsa por encontrar nuevos activos que despierten el inter¨¦s de los inversores no siempre encuentran el eco deseado. Este ha sido un poco el caso, en la ma?ana de ayer, del mercado de letras. El err¨¢tico devenir de la subasta de efectos depar¨® a sus seguidores una sesi¨®n absolutamente carente de inter¨¦s, en la que casi todo parec¨ªa concertado de antemano. Concretamente, la negociaci¨®n de cuarenta letras del Deustche Bank, en el primer corro y sin que existiesen mayores dificultades para su cumplimentaci¨®n, desataba comentarios en este sentido por parte de los m¨¢s cualificados especialistas.Por lo dem¨¢s, el mercado de valores en si no aport¨® mayores novedades. Los bancos continuaron con sus repeticiones en bloque, convencidos ya de que las cesiones en sus cambios no comportar¨ªan reducciones sensibles en sus niveles de oferta. Uno solo de sus integrantes, el Hispano, absorb¨ªa el total de la oferta presentada y consegu¨ªa llegar al cierre con un cierto desahogo.

Las el¨¦ctricas, aunque menos presionadas por la oferta que en jornadas anteriores, no observaron un comportamiento precisamente brillante, y es que el fantasma de las probables p¨¦rdidas de competitividad en sus rentabilidades, frente al progresivo encarecimiento del dinero, es un elemento que determina las decisiones de los especialistas, que son quienes, en definitiva, inciden en los procesos de confecci¨®n de cambios.

El resto del mercado no aport¨® ninguna novedad.