ETApm se responsabiliza del secuestro frustrado del industrial bilba¨ªno

La aparici¨®n de un coche patrulla de la Polic¨ªa Nacional junto al portal del domicilio del industrial vizca¨ªno Mart¨ªn Arbulu, y los gritos de una hermana de ¨¦ste desde la ventana del inmueble, frustraron el martes por la noche el intento de secuestro de que era v¨ªctima dicho empresario. ETA pol¨ªtico-militar se ha responsabilizado del hecho ayer, a trav¨¦s de varias llamadas a medios de comunicaci¨®n vascos, aclarando que no eran los autores del grave atropello ocurrido poco despu¨¦s del frustrado secuestro.El se?or Arbulu -cuya familia posee la mayor¨ªa de las acciones de la empresa Nervacero, que atraviesa desde hace meses una grave crisis financiera y laboral- acababa de regresar de un viaje cuando se produjo el intento de secuestro. Tras amordazar a la hermana del industrial, uno de los secuestradores penetr¨® con el se?or Arbulu en el despacho de ¨¦ste, interrog¨¢ndole sobre la marcha de la empresa y las gestiones realizadas para evitar el despido de los trabajadores.

Unos minutos despu¨¦s, los tres secuestradores atravesaban, junto con Mart¨ªn Arbulu, el portal de la casa, en el n¨²mero 75 de la Gran V¨ªa bilba¨ªna. Para entonces, la hermana del secuestrado hab¨ªa conseguido desasirse de la mordaza y daba gritos de auxilio desde la ventana del domicilio, en el primer piso del citado inmueble, tratando de llamar la atenci¨®n de un coche patrulla de la polic¨ªa aparcado en las inmediaciones.

Ante esta situaci¨®n, los tres j¨®venes emprendieron la huida en direcci¨®n al autom¨®vil en que hab¨ªan llegado al lugar, desentendi¨¦ndose del se?or Arbulu, que, a su vez, se dirigi¨® con los brazos en alto hacia el coche patrulla. Los secuestradores, a bordo ya de su autom¨®vil, huyeron a toda velocidad por la calle del Licenciado Poza, donde instantes despu¨¦s atropellaban a un viandante, Francisco Solana, que hubo de recibir asistencia sanitaria.