S¨ªmbolos franquistas

Estamos viviendo en nuestro pa¨ªs un per¨ªodo de paso de un r¨¦gimen dictatorial fascista a un r¨¦gimen democr¨¢tico donde se olviden las rencillas del pasado y se llegue a una aut¨¦ntica reconciliaci¨®n nacional. Pues bien, creo que una medida imprescindible que todos los espa?oles sensatos deseamos es que los emblemas, retratos y dem¨¢s que recuerden y glorifiquen la victoria de la Espa?a fascista (con la ayuda de Hitler y Mussolini) sobre la Espa?a democr¨¢tica de 1936, que ten¨ªa un Gobierno elegido por el pueblo, desaparezcan en las calles y centros oficiales. Quien quiera tener un retrato de Franco o de Jos¨¦ Antonio y el yugo y las flechas, que lo tenga en su domicilio o en el local de la organizaci¨®n pol¨ªtica que siente nostalgia de esos se?ores.Digo esto porque, en estos d¨ªas, he visto cosas que me han dejado perplejo y me hacen dudar de la democracia en que estamos. Por ejemplo, en el local de la Seguridad Social, en el paseo de Pontones, est¨¢ colgado un retrato de Jos¨¦ Antonio. Cuando lo vi, me dirig¨ª al director del centro para explicarle que ese edificio no era el local de Falange, que era un edificio oficial y que, por tanto, con el retrato del Rey era suficiente. Me contest¨® que no era yo el primero que se lo planteaba, que hab¨ªa consultado con el Ministerio de la Seguridad Social y que le hab¨ªan contestado que no ten¨ªa por qu¨¦ quitarlo. Adem¨¢s, este se?or me dijo que era alf¨¦rez provisional, que lleva veinticinco a?os de director en ese centro y que, si alg¨²n d¨ªa ten¨ªa que retirarlo, dimitir¨ªa y se lo llevar¨ªa a su casa.

Ayer pas¨¦ por la Cruz de los Ca¨ªdos, en Pueblo Nuevo, y observ¨¦ que en el citado monumento siguen el yugo y las flechas y la inscripci¨®n ?Muertos por Dios, por Espa?a y la revoluci¨®n nacionalsindicalista?. Creo que as¨ª no se ayuda a olvidar los odios y que, en este momento, deben quitarse tanto el yugo y las flechas como la inscripci¨®n y cambiarla por un monumento en recuerdo homenaje a las v¨ªctimas de la guerra civil.

En la oficina del documento nacional de identidad situada en la calle de C¨¢ceres he visto que, junto a una fotograf¨ªa del Rey, est¨¢ una fotografla de Franco con su testamento pol¨ªtico.

Creo que, en bien del futuro de Espa?a y de su porvenir democr¨¢tico, el Gobierno deber¨ªa dar las ¨®rdenes oportunas para que todas estas cosas, que recuerdan un pasado muy triste para el pueblo espa?ol, desaparezcan de todos los sitios sobre los que el Gobierno tiene autoridad./ ..