La Comisi¨®n de Justicia no devuelve al Gobierno el proyecto de ley de divorcio

El proyecto de ley de divorcio y modificaci¨®n del matrimonio presentado por el Gobierno a las Cortes fue aceptado ayer, en la Comisi¨®n de Justicia del Congreso, ?a los solos efectos de su estudio en comisi¨®n?, seg¨²n especific¨® el presidente de ¨¦sta, P¨ªo Cabanillas, por diecisiete votos a favor (UCD), uno en contra (Pi i Sunyer, de Izquierda Republicana de Catalu?a) y diecisiete abstenciones (el resto de los grupos), tras debatir durante m¨¢s de cuatro horas las cuatro enmiendas a la totalidad que propugnaban la devoluci¨®n del texto al Gobierno, presentadas por los diputados del Grupo Mixto Pi i Sunyer, Pi?ar y Bandr¨¦s, y el centrista Diez Pin¨¦s. El proyecto ucedista super¨®, pues, aunque s¨®lo con sus propios votos favorables, la posibilidad de que fuera devuelto al Gobierno.

A lo largo de la sesi¨®n de ayer, los presentes tuvieron ocasi¨®n de enterarse de que el diputado Pi i Sunyer tiene ?una vida familiar ¨®ptima y feliz?, como ¨¦l mismo comunic¨® a la comisi¨®n, y de que, sin llegar a tanto, Juan Mar¨ªa Bandr¨¦s dir¨ªa que ?mi situaci¨®n familiar es satisfactoria?. Asimismo, los diputados supieron que al centrista D¨ªez Pin¨¦s la disoluci¨®n del matrimonio le parece tan mala que piensa que ?puede haber ciudadanos que se abstengan de casarse por repugnancia al divorcio legal?, y que para Blas Pi?ar el matrimonio desaparecer¨¢, simplemente, cuando se apruebe la posibilidad de su disoluci¨®n: ?Podr¨¢ la ley seguir llamando matrimonio a la instituci¨®n?, dijo, ?pero ser¨ªa otra cosa distinta, desnaturalizada ?.Las intervenciones de los dipu tados socialistas Antonio Sotillo y Josep Verde i Aldea ratificaron las palabras del ministro de Justicia del d¨ªa anterior sobre la ausencia de acuerdo previo con las fuerzas parlamentarias antes de la presen taci¨®n del proyecto. ?Nada se di jo?, puntualiz¨® no obstante Sotillo, ?de fuerzas que no est¨¢n en el Parlamento?. El diputado socialista por Castell¨®n ha venido haciendo hincapi¨¦ en distintas mesas redon das en su convicci¨®n de que el texto ucedista ha contado, en alguna manera, con el visto bueno de la Conferencia Episcopal espa?ola, o con el de alguno de sus miembro m¨¢s relevantes, lo cual ha sido desmentido ?firme y categ¨®ricamente ? por la Administraci¨®n.

Sotillo plante¨® ayer cuatro puntos sobre los que, a juicio de los socialistas, deber¨ªa pronunciarse UCD: la reducci¨®n de los plazos previstos en el proyecto para la obtenci¨®n del divorcio; la supresi¨®n de las causas de simulaci¨®n o similares; la supresi¨®n del art¨ªculo 87, que da una amplia discrecionafldad al juez para conceder o denegar el divorcio, y una regulaci¨®n clara que permita que la separaci¨®n pueda hacerse por mutuo acuerdo y conduzca al divorcio sin un nuevo proceso. I?igo Cavero, ministro de Justicia, afirmar¨ªa despu¨¦s que ?todos esos puntos son negociables?.

Pi i Sunyer: "Proyecto reaccionario"

La sesi¨®n se inici¨® con la intervenci¨®n del diputado Pi i Sunyer, quien calific¨® el proyecto de ley del Gobierno de ?reaccionario, cojo, regresivo, raqu¨ªtico y que no viene a solucionar,los graves problemas que tiene planteados la sociedad espa?ola?. Expres¨® su creencia en la importancia de la c¨¦lula familiar, ya que su vida, a este respecto, es ¨®ptima y feliz; critic¨® las amplias facultades que el proyecto otorga al juez (art¨ªculo 87) y atac¨® al Gobierno por haber olvidado ?el derecho a obtener una sentencia de divorcio favorable en base a la culpabilidad del otro c¨®nyuge, ya que recoge las causas para la separaci¨®n, pero no para el divorcio ?.

Respondi¨® a la intervenci¨®n anterior el centrista Jos¨¦ Antonio Escart¨ªn, quien opin¨® que ?las consecuencias de lo que pide Pi i Sunyer ser¨ªan la devoluci¨®n del proyecto al Gobierno y la vuelta a la legalidad actual, que es m¨¢s regresiva que la que se propone en el nuevo texto?.

El socialista catal¨¢n Verde i Aldea contest¨® a lo anterior que ?tambi¨¦n requieren inscripci¨®n y publicidad las hipotecas, terreno que el se?or Escart¨ªn conoce tan bien, y tambi¨¦n se sale de ellas dif¨ªcilmente, pero lo que debe decir el legislador es justamente cu¨¢l es esta salida?. Tras calificar el proyecto de ?corto y t¨ªrnido?, Verde i Aldea critic¨® el art¨ªculo 87, que deja la concesi¨®n del divorcio en manos del juez, y record¨® que ?este art¨ªculo tiene un precedente en los pa¨ªses llamados socialistas, donde el juez decide si lo acordado por los c¨®nyuges va contra la construcci¨®n del socialismo en el pa¨ªs. No creo que ¨¦ste sea el precedente que el Gobierno quiera invocar?.

Otro de los enmendantes a la totalidad que ped¨ªan la devoluci¨®n del proyecto al Gobierno, Blas Pi?ar, manifest¨® que todo lo que afecta a la familia deber¨ªa integrarse en un C¨®digo Civil de la Familia, distinto al que recoge obligaciones y contratos, y respondi¨® a las citas de varios canonistas que hizo el ministro de Justicia el d¨ªa anterior ?con una del vicario de Cristo, que ha dicho reiteradas veces: "Rechazad el divorcio"?. Opin¨® que el divorcio no es una soluci¨®n para el matrimonio en quiebra, porque la ley admite volver a fracasar y solicitar nuevos divorcios, y dijo que le permitieran una iron¨ªa, pero que pensaba que ?el oficial del Registro Civil deber¨ªa dar un certificado de perpetua felicidad a los nuevos contrayentes?. Cit¨® el modelo colombiano y se mostr¨® partidario de regular un triple matrimonio: can¨®nico indisoluble; de otras religiones, disoluble o no, seg¨²n lo previera cada confesi¨®n, y civil, disoluble o no, a elegir por los contrayentes en el momento de casarse.

Respondi¨® Mar¨ªa Dolores Pelayo, de UCD, quien habl¨® de los cambios operados en la familia. ?Cuando el divorcio llega?, apunt¨®, ?la familia no existe ya, y lo dijo San Agust¨ªn al afirmar que donde no hay amor no hay matrimonio?.

Manuel D¨ªez Pin¨¦s, ucedista por Ciudad Real, defendi¨® tambi¨¦n su enmienda a la totalidad en un largo parlamento sobre lo que llam¨® ?ley de divorcio Cavero?. A su juicio, el proyecto no se ajusta al programa electoral de UCD. Al enumerar ¨¦ste y llegar a la promesa de protecci¨®n fiscal, el diputado exclam¨®: ?Tengo que decir una vez m¨¢s que el concubinato se ve primado o el matrimonio penalizado?. Estim¨® que ?la estabilidad de esta gran familia que es Espa?a pasa por UCD necesariamente ?, y se mostr¨® contra la oportunidad del proyecto, contra su constitucionalidad y contra su juricidad.

Tras una intervenci¨®n del socialista Virgilio Zapatero, que advirti¨® contra ?quienes pretenden convertir esta C¨¢mara en un confesonario?, y defendi¨® que el proyecto no iba contra los acuerdos firmados con la Santa Sede, como hab¨ªa apuntado alg¨²n diputado; lleg¨® el turno a Juan Mar¨ªa Bandr¨¦s, de Euskadiko Ezkerra, quien se opuso ?a la filosof¨ªa de que la meta del hombre o la mujer es el matrimonio ?, y fue el ¨²nico que puso en cuesti¨®n el modelo tradicional de familia compuesta por una pareja heterosexual -?hay quienes la ven formada por individuos de su propio sexo o por la relaci¨®n libremente consentida de varias personas?-. Afirm¨® que ?en Espa?a hemos empezado a desmitificar el municipio y el sindicato vertical, y ya es hora de que empecemos a hacerlo con la familia?, y justific¨® su petici¨®n de devoluci¨®n del proyecto por entender que ?la legalidad actual es p¨¦sima; la que se nos propone es mala o muy mala, y no nos conformamos con la soluci¨®n mala para no tener la p¨¦sima?.