El Pleno del Congreso pide al Gobierno decisi¨®n y contundencia frente al terrorismo

Por 305 votos favorables, ninguno en contra y dos abstenciones (una de ellas del diputado abertzale Juan Mar¨ªa Bandr¨¦s, y la otra, fruto de un error, del socialista Manuel N¨²?ez), el Pleno del Congreso de los Diputados aprob¨® ayer una moci¨®n por la que requiere al Gobierno ante la nueva acci¨®n coordinada y dirigida por ETApm en Andaluc¨ªa y en el Pa¨ªs Valenciano, ?para que ataje la acci¨®n terrorista con toda la decisi¨®n y contundencia que las leyes permiten?. Los proponentes de la moci¨®n fueron los socialistas, pero al texto aprobado se incorpor¨® una enmienda comunista, aceptada por todos los grupos.

La parte inicial de la proposici¨®n no de ley -debida ¨ªntegramente a la propuesta socialista- alude a la acci¨®n terrorista de ETApm en los territorios citados, mediante la colocaci¨®n de bombas en zonas tur¨ªsticas y de descanso, ?con la finalidad de obtener por medio de la coacci¨®n y de la amenaza determinados objetivos pol¨ªticos?.El Congreso de los Diputados, ante esta situaci¨®n, declara:

?Primero. El Estado no aceptar¨¢ en ning¨²n caso entrar en negociaciones para discutir los repetidos objetivos pretendidos por ETA Pol¨ªtico-militar.

Segundo. Que tales procedimientos suponen una c¨ªnica y criminal acci¨®n inaceptable como m¨¦todo en cualquier pa¨ªs civilizado, que el Congreso de los Diputados reprueba y condena.

Tercero. Que el principal perjuicio lo sufren los trabajadores y las empresas de las zonas afectadas, todos los ciudadanos residentes en las mismas y todas aquellas personas nacionales o extranjeras que pretenden pasar en ellas sus vacaciones.

Cuarto. Que los intereses colectivos y la econom¨ªa general pueden verse seriamente afectados por la incalificable campa?a de ETA Pol¨ªtico-militar?.

La proposici¨®n socialista a?ade lo siguiente: ? Por tanto, requiere al Gobierno, a todas las autoridades y a todos los ciudadanos para que tomen todas las medidas pertinentes, tanto a nivel interno como internacional para atajar la acci¨®n terrorista con toda la decisi¨®n y contundencia que las leyes permiten?.

Aceptada la enmienda comunista

Este ¨²ltimo p¨¢rrafo fue sustituido, con la conformidad incluso de Manuel Fraga, en nombre de Coalici¨®n Democr¨¢tica, por el siguiente, fruto de una enmienda comunista: ?Requiere al Gobierno y a todas las autoridades para que tomen las medidas pertinentes, tanto a nivel interno como internacional, para atajar la acci¨®n terrorista con toda la decisi¨®n y contundencia que las leyes permite, con el fin de hacer posible la convivencia pac¨ªfica entre todos los espa?oles y el pleno ejercicio de las libertades p¨²blicas, tanto colectiva como individualmente. El Congreso de los Diputados insta a todos los ciudadanos a pronunciarse activamente por la consecuci¨®n de estos objetivos, como garant¨ªa indispensable para el pleno funcionamiento de nuestra sociedad democr¨¢tica?.

En nombre de los tres grupos socialistas proponentes de la moci¨®n, intervino Carlos Solchaga, quien asegur¨® que no pretend¨ªan apuntarse un tanto pol¨ªtico, ni caer en la trampa de ?discutir los objetivos pol¨ªticos que los responsables de ETApm parecen plantearse al hacer esta amenaza?. Record¨® que ETApm pretende distinguir sus acciones de terror y de chantaje de las de la otra rama de la ETA, ?por aquello de que en alg¨²n momento de su historia han aceptado lo que ellos califican de v¨ªa institucional o del estatuto?.

La ausencia del PNV

El socialista Gregorio Peces-Barba record¨® m¨¢s tarde que la defensa por parte de Solchaga de la proposici¨®n socialista quer¨ªa poner de relieve que los socialistas vascos reprueban las acciones terroristas.

En contraste con esta actitud, lament¨® la ausencia del PNV, para la que no encontr¨® justificaci¨®n ni tampoco para el chantaje que ejerce sobre el Gobierno y su partido.

El andalucista Miguel Angel Arredonda tambi¨¦n lament¨® la ausencia del PNV, al que record¨® que para gobernar debe arrostrarse LI Impopularidad, cuando es necesario. A?adi¨® que ETApm se al¨ªa con las fuerzas m¨¢s reaccionarias -que, entre otras cosas, piden el restablecimiento de la pena de muerte- para desestabilizar la democracia y empobrecer Andaluc¨ªa y otros pueblos.

La posici¨®n de Bandr¨¦s

Especial inter¨¦s exist¨ªa en el hemiciclo por conocer la posici¨®n del diputado de Euskadiko Ezkerra (EE) Juan Mar¨ªa Bandr¨¦s, en este debate, dadas las relaciones que se atribuye a EE con ETApm. Bandr¨¦s agradeci¨® a los miembros del Grupo Mixto que le hubieran dejado hablar en nombre de su partido exclusivamente. Rechaz¨® las actuaciones que originaban este debate, y dijo hacerlo ?sin ambig¨¹edad?. Record¨® unas palabras suyas, en ocasi¨®n penosa (con motivo de la explosi¨®n de una bomba de ETApm), seg¨²n las cuales ?el mejor procedimiento para que no exploten bombas es no ponerlas?.

Sin embargo, Bandr¨¦s se opuso a que los hechos sean desmesurados o aislados de su contexto. ?Los hechos no se producen en una campa?a neum¨¢tica. Hoy existe involuci¨®n en las relaciones de Euskadi con el poder central?. Aludi¨® al abandono del Parlamento por parte del PNV, que hace que Bandr¨¦s sea el ¨²nico nacionalista vasco en el Congreso de los Diputados, que trata de demostrar, con su presencia la solidaridad de la izquierda abertzale con el resto de los pueblos del Estado. Asegur¨® que algo grave ocurre para que un partido conservador como el PNV no est¨¦ en el Parlamento.

A continuaci¨®n, Juan Mar¨ªa Bandr¨¦s declar¨® que no pod¨ªa decir ya que en Euskadi no exista tortura y aludi¨® concretamente a la que ¨¦l hab¨ªa comprobado en la persona de Santiago Su¨¢rez. Asimismo, aludi¨® a la actitud amenazante del ministro del Interior -?conmigo o conta m¨ª?-, a las instrucciones dadas a los gobernadores civiles y a la no destituci¨®n del director de la c¨¢rcel de Soria.

Por ¨²ltimo, Bandr¨¦s expres¨® su rechazo a las acciones de ETApm, pero anunci¨® que no aprobar¨ªa la moci¨®n, ya que, como jurista, sab¨ªa muy bien lo que significaba ?con toda la decisi¨®n y contundencia que las leyes permiten?.

El centrista Antonio Jim¨¦nez Blanco lament¨® la abstenci¨®n anunciada por Juan Mar¨ªa Bandr¨¦s, y asegur¨® que s¨®lo cuando vote a favor de una propuesta de este car¨¢cter se har¨¢ la luz sobre su posici¨®n pol¨ªtica en este tema.

Por su parte, el ministro del Interior, Juan Jos¨¦ Ros¨®n, tras agradecer a la C¨¢mara la posici¨®n generalmente favorable a la moci¨®n, manifest¨® su desacuerdo con imputar a la polic¨ªa un protagonismo en los sucesos de la c¨¢rcel de Soria, cuando fue necesaria su presencia para poner orden en ella. Asimismo, neg¨® las acusaciones de malos tratos y la coincidencia, por parte de Bandr¨¦s, con dos de los tres puntos reivindicados por ETApm.

En respuesta a unas palabras anteriores de Fraga, quien hab¨ªa manifestado ?o ellos o Espa?a?, el ministro del Interior se?al¨®: ?Nosotros optamos por el Pa¨ªs Vasco y por Espa?a, frente a la irracionalidad de ETApm?.

La informaci¨®n y el terrorismo

Todos los grupos parlamentarios coincidieron en la repercusi¨®n de las acciones programadas por ETApm sobre la situaci¨®n econ¨®mica de los trabajadores y peque?os empresarios y el riesgo de que se produzca un enfrentamiento entre los pueblos y se fomente un sentimiento antivasco en el resto de Espa?a.

El socialista Peces-Barba introdujo el tema de la actitud de los medios de comunicaci¨®n social. Se?al¨® que los que son propiedad del Estado han silenciado la informaci¨®n sobre la campa?a de ETApm. Neg¨® que una correcta informaci¨®n pueda ser considerada apolog¨ªa del terrorismo y aludi¨® especialmente a la conveniencia de que Televisi¨®n hubiera informado debidamente.

El portavoz centrista, Antonio Jim¨¦nez Blanco, reconoci¨® que es necesaria ?cierta dosis de informaci¨®n para mantener a los ciudadanos despiertos?. Pero encontr¨® muy problem¨¢tico c¨®mo y cu¨¢ndo debe darse tal informaci¨®n, y asegur¨® que cient¨ªficamente est¨¢ en estudio y pol¨ªticamente es un problema profundamente delicado si la informaci¨®n sobre las acciones terroristas benefician a la sociedad o producen un efecto multiplicador.

M¨¢s informaci¨®n del Pleno del Congreso, en la p¨¢gina 19