Una plaza p¨²blica de Tossa de Mar ha pasado a ser privada

Una de las principales plazas de Tossa de Mar fue apropiada y cercada sin permiso municipal por los propietarios del hotel Windsor, con la intenci¨®n de convertirla en aparcamiento del mismo, ante la absoluta pasividad del Ayuntamiento. La misma pasividad muestra ahora la Generalidad competente en el tema. Esta actitud ya se ha repetido en diversas ocasiones, especialmente ante problemas de tipo urban¨ªstico, ya que se trata de una de las poblaciones con mayor porcentaje de obras ilegales.En 1967, la familia Cobartca i Butsems, propietaria del hotel antes citado, decidi¨® vallar la plaza de Las Corominas para utilizarla como aparcamiento y jard¨ªn. Ante este hecho los vecinos comenzaron sus protestas y denuncias frente al ayuntamiento, sin recibir ninguna respuesta.

En abril de 1970 ocho vecinos de Tossa enviaban un nuevo informe al ayuntamiento para protestar por la instalaci¨®n de una caseta para dep¨®sito de botellas de gas butano o propano, ?sin que a alguno de los suscritos vecinos conlindantes de dicha instalaci¨®n se nos avisara?, dec¨ªa el informe, ?cosa incorrecta e ilegal, seg¨²n el reglamento de. actividades del 30 de noviembre de 1961 ?.

Ante la insistencia de ¨¦stos, el arquitecto del Ayuntamiento de Tossa, Valentin Provensal Herrero, elabor¨® un informe con fecha del 6 de abril de 1979, en el que reconoc¨ªa como p¨²blicas no s¨®lo la plaza de Las Corominas, sino tambi¨¦n una de las calles que sale de ella y que tambi¨¦n se ve afectada por el cercamiento.

En contradicci¨®n con esta afirmaci¨®n, el Ayuntamiento de Tossa -seg¨²n manifest¨® a este diario Carlos Adell, arquitecto del servicio de disciplina urban¨ªstica de la Generalidad-, despu¨¦s de haber mantenido un absoluto silencio durante a?os, mantiene la tesis de que los terrenos son propiedad del hotel Windsor, que en estos momentos est¨¢ en manos de la familia Blanque.