La Iglesia no cambia porque cambie el Papa

Juan Bautista Metz, mentor de la teolog¨ªa pol¨ªtica, inspirador de la teolog¨ªa latinoamericana de la liberaci¨®n, el te¨®logo m¨¢s cr¨ªtico de la Iglesia alemana, no ha firmado la dura carta que 135 intelectuales alemanes dirig¨ªan al Papa y que EL PAIS dio a conocer el pasado domingo.Puestos al habla con el profesor Metz, ha especificado las, razones de su negativa. En primer lugar, porque la carta revela el complejo alem¨¢n de autoridad que tanbien describ¨ªa Lenin cuando dec¨ªa, que ?los revolucionarios alemanes, cuando ocupan una estaci¨®n, lo primero que hacen es comprar un billete de entrada?. La Iglesia no cambia porque cambie el Papa o los obispos, sino el pueblo creyente. La segunda raz¨®n ¨¦s porque no est¨¢ de acuerdo con el tipo de iglesia liberal que subyace a las preguntas que plantean. El divorcio de los cat¨®licos o el celibato de los curas o el control de nacimientos interesan, en su opini¨®n, a creyentes que juzgan el contenido de la religi¨®n desde su mentalidad liberal, propia de la sociedad europea. Y no es que est¨¦ por el celibato ni por la indisolubilidad. Metz est¨¢ contra el celibato obligatorio no porque vaya contra un derecho humano ?del que, por lo dem¨¢s, cualquiera puede abdicar?, sino porque el celibato impide la creaci¨®n de una iglesia de base, libre y cr¨ªtica. Y no le interesa reivindicar el control de natalidad en raz¨®n de especulaciones malthuserianas sino como un tema que debe entrar en el contexto de las posibilidades de emancipaci¨®n del Tercer Mundo. Seg¨²n Metz, la carta revela una mentalidad ?provinciana y eurocentrista?; ¨¦l est¨¢ por un planteamiento ?cat¨®lico?, es decir, universal de esos temas, que arranque del Serm¨®n de la Monta?a, del que Bismark dec¨ªa ?que con ¨¦l no hay manera de construir Estado moderno alguno?, pero que s¨ª sirve para ?que encuentren un sitio en la sociedad aquellos que el Estado moderno margina?.