"Coitus interruptus", segundo m¨¦todo anticonceptivo m¨¢s usado en Espa?a

En su ¨²ltimo n¨²mero, la publicaci¨®n Comentario Sociol¨®gico, de la Confederaci¨®n de Cajas de Ahorro, prev¨¦ un progresivo descenso de la fecundidad en Espa?a, con mayor incidencia de los m¨¦todos anticonceptivos, adem¨¢s de un aumento de las tasas migratorias hacia las grandes ciudades.Por lo que respecta a los m¨¦todos anticonceptivos, el profesor Salustiano del Campo indica, en Comentario Sociol¨®gico, que el 90,7% de la poblaci¨®n femenina espa?ola ?conoce? al menos uno de ellos. Figura en cabeza la p¨ªldora, seguida del ?coitus interruptus?. Por su parte, la actividad laboral femenina se reduce, a partir de los veinticinco a?os, en un 50% a causa del matrimonio, d¨¢ndose en nuestro pa¨ªs el caso at¨ªpico, con respecto a Europa, de que la mujer casada no vuelve al trabajo que desempe?aba antes de casarse.

La situaci¨®n demogr¨¢fica espa?ola, cqn una tasa de crecimiento del 17,2% en 1978, sit¨²a a nuestro pa¨ªs en cabeza de los europeos a este respecto. No obstante, hay que se?alar una disminuci¨®n r¨¢pida del ¨ªndice de nupcialidad desde 1973. A este respecto, la publicaci¨®n se?ala que el 79% de los matrimonios se formalizan ?para respetar las reglas morales y religiosas?. Aunque las personas son cada vez m¨¢s j¨®venes a la hora de casarse, el per¨ªodo de fecundidad pr¨¢ctica de la mujer espa?ola se ha acortado y pr¨¢cticamente no tiene hijos a partir de los 38 a?os. El n¨²mero de hijos ha pasado, en promedio, de 4,7, en 1900, a 2,5, en 1975.

La mujer que trabaja en Espa?a responde al siguiente esquema b¨¢sico: esposa de cuadros medios, superiores u obreros especializados, con una edad entre veinticinco y 34 a?os, viviendo en ciudades medias y capitales de provincia, y, fundamentalmente, en Catalu?a, Baleares, Valencia, Murcia y Madrid capital. En cambio, en Andaluc¨ªa, Canarias, Vascongadas, Navarra, Arag¨®n, Castilla la Vieja y Le¨®n la mayor¨ªa de las mujeres trabaja en su hogar y reside en zonas agrarias.

Comentario Sociol¨®gico concluye que la sociedad espa?ola avanza hacia una mayor permisividad respecto a la sexualidad prenupcial, con mayor control de la natalidad que incide en su descenso global, y apuntando hacia una relativa emancipaci¨®n de la mujer. Tambi¨¦n se indica una reversi¨®n de la tendencia al rejuvenecimiento de la edad de contraer matrimonio y un aumento importante del divorcio bajo la forma de anulaciones o separaciones matrimoniales.