El ritmo actual de explotaci¨®n y consumo de carb¨®n no reducir¨¢ la dependencia del petr¨®leo
Los objetivos carbon¨ªferos previstos por el mundo industrializado para atenuar la carest¨ªa o la falta de petr¨®leo no ser¨¢n alcanzados, de no acelerar la extracci¨®n y el consumo del carb¨®n. As¨ª lo afirma el Consejo Consultivo de la Industria del Carb¨®n (CCIC), creado en abril de 1980 por la Agencia Internacional de la Energ¨ªa (AIE), organismo con sede en Par¨ªs que agrupa veinti¨²n pa¨ªses industrializados, Espa?a entre ellos.
En materia carbon¨ªfera, las dos dianas fijadas por el mundo desarrollado occidental a partir del momento en que se desmoron¨® para siempre la ilusi¨®n del crecimiento salvaje de la d¨¦cada de los a?os sesenta (basada en la energ¨ªa petrol¨ªfera regalada) fueron los siguientes: doblar la producci¨®n y la utilizaci¨®n del carb¨®n para el a?o 1990 y triplicarlas para el a?o 2000. Pero, seg¨²n el trabajo realizado por el CCIC, el ritmo actual de explotaci¨®n y de consumo no permitir¨¢ alcanzar esas cimas.El razonamiento de base es el siguiente: a lo largo de los pr¨®ximos veinte a?os, el empleo principal del carb¨®n ser¨¢ la producci¨®n de electricidad. Y el estudio citado indica que, si se quieren lograr los objetivos previstos, ser¨¢ necesario, de aqu¨ª al a?o 2000, triplicar la potencia instalada de las centrales de electricidad que funcionan con carb¨®n en la zona de la OCDE (los veinti¨²n pa¨ªses de la AlE forman parte de los veinticinco de la OCDE).
El CCIC estima que el mayor obst¨¢culo para acelerar el ritmo de implantaci¨®n de la electricidad a base de carb¨®n se refiere ?a que las incertidumbres que pesan sobre el papel futuro del carb¨®n le impiden a este ¨²ltimo asumir plenamente su capacidad para reducir la utilizaci¨®n del petr¨®leo en los pa¨ªses industrializados, y esto a pesar de que la opci¨®n de carb¨®n es interesante desde el punto de vista econ¨®mico?. Para suprimir esas incertidumbres, el CCIC recomienda a los Gobiernos de los veinti¨²n pa¨ªses de la AlE una serie de medidas a practicar urgente e intensamente: que los pa¨ªses de la OCDE se comprometan a crear centrales de carb¨®n equivalentes a la potencia instalada necesaria. La aplicaci¨®n de esa recomendaci¨®n debiera facilitar las realizaciones que siguen: que el precio del petr¨®leo y el del gas alcanzaran niveles mundiales; segundo, que se prohibiera la construcci¨®n de centrales t¨¦rmicas alimentadas por petr¨®leo, y en tercer lugar, las compa?¨ªas de electricidad y los grandes consumidores de esa energ¨ªa transformar¨ªan con menos reticencia sus calderas de petr¨®leo en las equivalentes de carb¨®n.
Otras recomendaciones del CCIC: los pa¨ªses productores y exportadores de carb¨®n deben tomar medidas que faciliten la extracci¨®n y el transporte del mineral.
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