Londres volvi¨® a vivir una noche de extrema violencia racial el pasado lunes
En diversos barrios de Londres se volvieron a producir en la noche del lunes enfrentamientos entre polic¨ªas y j¨®venes negros, que se saldaron con cincuenta polic¨ªas heridos, tres de ellos graves, y 107 detenciones en menos de una semana despu¨¦s de los acontecimientos de Brixton y ante una creciente cr¨ªtica al nuevo proyecto de ley de nacionalidad, que la primera ministra de la India, Indira Gandhi, ha calificado de racista.
Los nuevos enfrentamientos se produjeron en un d¨ªa festivo en el Reino Unido, concentr¨¢ndose especialmente en la feria de Finsbury Park, al norte de Londres, y en Ealing y en Wanstead, al oeste y al este de Londres, respectivamente. Estos nuevos incidentes vuelven a ilustrar las malas relaciones entre la juventud de color y la polic¨ªa brit¨¢nica, que empeoran especialmente en los centros urbanos, donde est¨¢ concentrada la poblaci¨®n de origen caribe?o, trabajadores no cualificados en su mayor¨ªa, duramente afectados por el paro y los deficientes alojamientos, que ven en la polic¨ªa el s¨ªmbolo de una sociedad blanca contra la cual est¨¢n resentidos.Se calcula, aunque no hay datos concretos, que la poblaci¨®n de color originaria de la nueva Commonwealth y Pakist¨¢n (es decir, no incluyendo canadienses, australianos ni neozelandeses), es de unos dos millones de habitantes en el Reino Unido, es decir, un 3,5 % de la poblaci¨®n brit¨¢nica, con un 40% de los integrantes de estas minor¨ªas ¨¦tnicas nacidas en el Reino Unido, que esperan unos derechos y una igualdad racial de los que no siempre disfrutan.
El vandalismo que se ha desatado en los ¨²ltimos d¨ªas no puede resultar del todo? sorprendente dada la poco ortodoxa actuaci¨®n de la polic¨ªa, que, en muchos casos, acosa a esos j¨®venes negros que no tienen nada que hacer porque est¨¢n en paro. El desempleo ha subido en un 66% en el Reino Unido en el ¨²ltimo a?o, pero el paro entre las minor¨ªas ¨¦tnicas ha aumentado en un 88% en el mismo per¨ªodo. En un barrio londinense como Brixton, con unas minor¨ªas ¨¦tnicas que representan el 29% de su poblaci¨®n, m¨¢s de la mitad de los j¨®venes de diecis¨¦is a veinticuatro a?os en paro forma parte de estas minor¨ªas.
Aunque en 1976 se aprob¨® una ley sobre relaciones raciales que proh¨ªbe toda forma de discriminaci¨®n, la realidad es muy otra. Estas tensiones raciales vienen favorecidas adem¨¢s por algunos prominentes pol¨ªticos y grupos neofascistas, como el Frente Nacional y el Movimiento Brit¨¢nico. Ahora han de sum¨¢rseles tambi¨¦n el pol¨¦mico proyecto de ley sobre nacionalidad.
The Times of India, un peri¨®dico serio, coment¨® durante la reciente visita a ese pa¨ªs de Margaret Thatcher que ?la primera ministra brit¨¢nica ha da?ado m¨¢s las relaciones raciales en el Reino Unido que cualquier otro l¨ªder de la posguerra?. Algo con lo que, sin duda, estaba de acuerdo Indira Gandhi. Ahora, el Gobierno brit¨¢nico quiere recortar los debates sobre el nuevo proyecto de ley de nacionalidad cuando ¨¦ste llegue al Pleno de la C¨¢mara de los Comunes, lo que ha provocado grandes protestas por parte de la oposici¨®n laborista que califica de racista el proyecto.
Tres categor¨ªas de ciudadanos brit¨¢nicos
El proyecto de ley introduce tres categor¨ªas de ciudadanos brit¨¢nicos: en la primera se define a los ciudadanos brit¨¢nicos con pleno derecho a vivir en el Reino Unido. La segunda, para los ciudadanos brit¨¢nicos de territorios dependientes (es decir las colonias que a¨²n quedan), presenta problemas para casos como el de Hong Kong o Gibraltar, aunque los gibraltare?os sean miembros de la Comunidad Europea. La tercera categor¨ªa define a los brit¨¢nicos en el extranjero (asi¨¢ticos de Africa oriental y otros grupos). Ninguno de los ciudadanos de las dos ¨²ltimas categor¨ªas tiene un derecho autom¨¢tico a instalarse en el Reino Unido.Margaret Thatcher ha indicado que el nuevo proyecto de ley vendr¨ªa a limitar el n¨²mero de Inmigrantes que vienen al Reino Unido, ?un pa¨ªs con una densidad de poblaci¨®n mayor que la de la India?, a?adi¨®. Las leyes de inmigraci¨®n brit¨¢nicas son sumamente duras y no concordaban ya con una ley de la nacionalidad que data de los tiempos del imperio brit¨¢nico.
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