Jacky Ickx logr¨® su quinta victoria en Le Mans

El belga Jacky Ickx, un piloto de 36 a?os que llevaba casi dos retirado de la competici¨®n activa, gan¨® el domingo por quinta vez la c¨¦lebre carrera de resistencia francesa de Las 24 Horas de Le Mans. Pese a rodar con cierta prudencia durante gran parte de la dur¨ªsima carrera para cuidar la mec¨¢nica, Ickx y el brit¨¢nico Derek Bell mejoraron la marca del pasado a?o, y el propio belga bati¨® el r¨¦cord del circuito. Los espa?oles Villota y Juan Fern¨¢ndez sufrieron muchos problemas mec¨¢nicos que les relegaron hasta el puesto diecis¨¦is, seg¨²n informan las agencias.

Jacky Ickx hab¨ªa sido llamado por la f¨¢brica germana Porsche para intentar ganar por quinta vez la popular carrera francesa. Le Mans, junto a Indian¨¢polis y el Rally de Montecarlo, forma el tr¨ªo de pruebas automovil¨ªsticas que trasciende de los puramente aficionados al deporte del motor. La popularidad que consigue la marca vencedora hab¨ªa motivado a Porsche para volver a intentar conseguir una victoria que el pasado a?o se le escap¨® por una aver¨ªa mec¨¢nica. Y si esa victoria llegaba de la mano de Jacky Ickx el resultado ser¨ªa m¨¢s rotundo.El belga, retirado desde hace casi dos a?os de la competici¨®n, despu¨¦s de una carrera muy brillante en la F¨®rmula 1, pero en la que nunca pudo alcanzar el t¨ªtulo mundial -dos veces fue subeampe¨®n-, no dud¨® en aceptar la proposici¨®n de Porsche. Ya lo hab¨ªa hecho el pasado a?o, pero la fortuna le hab¨ªa dado la espalda. Y este a?o, en su participaci¨®n n¨²mero doce en Le Mans, Ickx podr¨ªa intentar esa quinta victoria que le consagrar¨ªa definitivamente como el m¨¢ximo triunfador de una carrera en la que el belga ha escrito en esos a?os las m¨¢s bellas haza?as. De esa forma, Jacky Ickx sobrepasar¨ªa a su compatriota Olivier Gendebien, vencedor tambi¨¦n en cuatro ocasiones en el final de la d¨¦cada de los cincuenta y principio de los sesenta.

La primera parte de la carrera estuvo marcada por los tr¨¢gicos accidentes de Lafosse, que muri¨® destrozado al chocar a m¨¢s de 350 kil¨®metros por hora despu¨¦s de sufrir un pinchazo, y del WMP de Saulnier Boutsen, que arroll¨® a dos comisarios de pista causando la muerte de uno de ellos y grav¨ªsimas heridas al otro.

En esa parte de la carrera, Ickx-Bell rodaron con gran prudencia. Su t¨¢ctica era cuidar no s¨®lo la mec¨¢nica, sino tambi¨¦n los neum¨¢ticos, afectados por el fuerte calor reinante y que seguramente fue la causa de los pinchazos que originaron los dos accidentes mortales. La incertidumbre radicaba en si la t¨¢ctica prudente del Porsche de cabeza servirla para ganar al final la carrera o si, caso de tener alg¨²n problema, el no contar con una ventaja sustancial le podr¨ªa costar el triunfo final.

Pero esa t¨¢ctica les dio el resultado apetecido porque al final, el segundo clasificado, el Rondeau de Streiff-Haran-Schlesser -con el que deb¨ªa haber corrido el espa?ol Carlos Pe?acoba, tr¨¢gicamente desaparecido en un accidente de carretera la pasada semana-, qued¨® a catorce vueltas.

Por su parte, los espa?oles Villota y Fern¨¢ndez, acompa?ados por el brit¨¢nico Guy Edwards, consiguieron su objetivo de terminar la carrera, pero s¨®lo en el puesto diecis¨¦is. Los problemas mec¨¢nicos mantuvieron a los espa?oles mucho tiempo parados en boxes, que luego no pudieron recuperar.