Cr¨ªticas al ingreso de Espa?a en la OTAN en la Prensa yugoslava

Coincidiendo con la conmemoraci¨®n solemne en Yugoslavia del XX aniversario de la fundaci¨®n del Movimiento de los No Alineados, el diario oficialista yugoslavo Borba niega, desde las posiciones caracter¨ªsticas del no alineamiento, que Espa?a tenga necesidad de incluirse en el Pacto Atl¨¢ntico, en un extenso art¨ªculo titulado ?Qui¨¦n va a beneficiarse de eso?. El autor, Dimitrije Seserinac, es experto en temas militares de dicho diario y fue jefe de la c¨¢tedra de contraespionaje en la academia militar yugoslava. Espa?a ser¨ªa un pa¨ªs geogr¨¢ficamente privilegiado en cuestiones de defensa que, limitando al norte con el pa¨ªs amigo que es Francia y al oeste con un pa¨ªs peque?o como es Portugal, ?no puede tener problema alguno en cuestiones de defensa?, de no ser las consecuencias de un conflicto mundial. Para el autor, Gibraltar ?tiene sentido cara al estrecho, pero no hacia el interior del pa¨ªs?, y el beneficio del retorno m¨¢s r¨¢pido de este s¨ªmbolo a Espa?a ?no compensa las concesiones que supone la entrada en el Pacto?.

?Ni desde el punto de vista de la clase dominante espa?ola? se justificar¨ªa el ingreso de Espa?a en la OTAN, dice Seserinac, y a?ade que Estados Unidos est¨¢ interesado en que Espa?a lo haga para que ?los servicios de seguridad e informaci¨®n del bloque? influyan ?a favor de la preservaci¨®n del actual orden social?. En el plano econ¨®mico, ?la econom¨ªa y las Fuerzas Armadas espa?olas se conectar¨ªan m¨¢s estrechamente con los complejos industriales militares de Estados Unidos, a trav¨¦s de una homologaci¨®n de armas y equipos?.

El ex militar publicista yugosla- vo defiende la tesis de que ?por mucho que se quiera reactivar el bipolarismo y las confrontaciones, con intentos de superaci¨®n de una superpotencia sobre la otra, se trata de algo ya minado en sus cimientos?. El panorama ser¨ªa muy distinto al de hace tres decenios, cuando se fundaba la OTAN, proliferando hoy tendencias independentistas y de cambio, tanto en pa¨ªses del Este como de Occidente, concluye el art¨ªculo.