El general Aramburu pidi¨® 20.000 hombres mas para la Guardia Civil

Cumpliendo el deber de honrar a sus mejores y recordar a quienes murieron en acto de servicio, la Guardia Civil celebr¨® ayer solemnemente la fiesta de su patrona, la Virgen del Pilar. En Aranjuez, bajo la presidencia del ministro de Defensa y del presidente del Tribunal Supremo, y con asistencia de los ministros de Interior y, Cultura, del director de la Seguridad del Estado y de los m¨¢s altos mandos del cuerpo, se aprovech¨® la fecha para inaugurar la Academia Especial de la Guardia Civil. El general Aramburu pidi¨® 20.000 hombres m¨¢s para el cuerpo.

Las nuevas instalaciones ocupan veintid¨®s hect¨¢reas de terreno y permitir¨¢n, en consecuencia, la pr¨¢ctica y el adiestramiento en condiciones de espacio satisfactorias. La academia aprovecha las edificaciones de una antigua escuela femenina de extensi¨®n agraria que estaba fuera de servicio.Los actos de Aranjuez, tras la recepci¨®n de ordenanza a las m¨¢ximas autoridades, se iniciaron con una misa de campa?a oficiada por el vicario general castrense, monsenor Emilio Benavent. Su homil¨ªa fue un modelo de brevedad y claridad. Monse?or Benavent puso a la patrona, la Virgen, como modelo a imitar por toda la Guardia Civil en tres aspectos: su respeto a las leyes, su amor a la justicia y su fortaleza. Mencion¨® c¨®mo el respeto a la ley del censo hizo a la Virgen abandonar su casa de Nazaret y ponerse en camino a Bel¨¦n, a pesar de su avanzado estado de embarazo. Habl¨® luego de que las leyes y lal ¨®rdenes cambian, pero lo que no cambia es la obligaci¨®n de obedecer las leyes vigentes, sin juzgar las leyes ni a los legisladores.

?Las leyes?, dijo, ?cambian y tienen que cambiar al servicio de la convivencia pac¨ªfica, pero para un cristiano no cambia la obligaci¨®n de cumplirlas y tampoco cambia para la Guardia Civil la obligaci¨®n de hacerlas cumplir.

El lamentable 23-F

El director de la Guardia Civil, general Jos¨¦ Luis Aramburu Topete, pronunci¨®, concluida la misa, un discurso de once folios, que inici¨® con un cap¨ªtulo de agradecimientos a los asistentes y recuerdo a los muertos y exaltaci¨®n de su ejemplo permanente premiado con la imposici¨®n de algunas condecoraciones prendidas en las guerreras de hombres que, muchas veces, han visto su cuerpo traspasado por las balas o la metralla terrorista.El general Aramburu se refiri¨® a los ?lamentables hechos del 23-F, que pudieron comprometer a la Guardia Civil, porque pusieron en cuesti¨®n, para muchos, la tradici¨®n b¨¢sica del cuerpo de acatamiento al poder constituido?. Luego a?a di¨®: ?Sin juicios de valor, porque ¨ªos hechos est¨¢n subjudice, quiero resaltar la fidelidad casi total a las leyes de la Guardia Civil durante aquellas jornadas. Nuestro esp¨ªritu de disciplina y trabajo?, precis¨® ?son los de siempre, los que nos han hecho queridos e imitados? y rog¨® a las autoridades presentes que hicieran llegar al Rey la lealtad y af¨¢n de servicio de la Guardia Civil.

El director del cuerpo crey¨® la ocasion propicia para extenderse en un balance de logros y problemas y reclamaciones. Pidi¨® 20.000 hombres m¨¢s para la Guardia Civil, es decir, un aumento del 33% respecto de la actual plantilla, y dijo haber entregado al Gobierno un proyecto para la creaci¨®n de guardias civiles auxiliares. Estos guardias, servir¨¢n por un per¨ªodo de dieciocho meses, y al finalizarlo se les dar¨¢ por cumplido el servicio militar y tendr¨¢n la opci¨®n de marcharse o solicitar la permanencia en el cuerpo.