Todo indica un acuerdo base para establecer un precio de referencia de 34 d¨®lares por barril

En una atm¨®sfera general de optimismo, los trece ministros de Energ¨ªa de la Organizaci¨®n de Pa¨ªses Exportadores de Petr¨®leo (OPEP) reinician hoy, en Ginebra, su tercer intento en un a?o para uniricar el precio del crudo y poner t¨¦rmino as¨ª a una situaci¨®n excedentarla del mercado que les es particularmente adversa.

Todo indica, horas antes del inicio de la 61? Conferencia Extraordinaria de la OPEP, que existe un acuerdo base para establecer un precio de referencia de 34 d¨®lares por barril, dos d¨®lares m¨¢s de lo que cobra Arabia Saud¨ª, pero dos menos de lo que te¨®ricamente carga la mayor¨ªa del c¨¢rtel.Casi la totalidad de los ministros se encontraba ayer en el hotel Intercontinental, de Ginebra, donde hoy, a las diez de la ma?ana, comenzar¨¢ oficialmente lo que promete ser un corto encuentro. Entre ellos estaba el jeque Zaki Yamani, ministro de Petr¨®leo de Arabia Saud¨ª. Su asistencia disipa la duda de si el principal productor del consorcio, con casi el 50% de la oferta total, iba a acudir a la petici¨®n del presidente de turno de la OPEP, el indonesio Subroto, para celebrar una nueva conferencia extraordinaria tan s¨®lo dos meses despu¨¦s de haber fracasado otra.

Yamani impidi¨® el acuerdo

Yamani impidi¨® en dos ocasiones previas este a?o -en mayo y agosto pasados- que la OPEP llegara a un acuerdo sobre unas bases que no fueran las que ¨¦l marcara. Ahora, sin embargo, la OPEP y el mercado parecen estar listos para sus tesis, que no son otras que la unificaci¨®n del precio en torno al suyo propio y la imposic¨ª¨®n de unos diferenciales por calidad no superiores a tres d¨®lares por barril.

El enigm¨¢tico ministro saud¨ª tambi¨¦n parece que puede salirse con la suya en otro de los puntos conflictivos de. los anteriores encuentros. Yamani quiere que el nuevo precio de 34 d¨®lares, que fuerza a su pa¨ªs a elevar el suyo en dos d¨®lares, sea congelado durante todo el pr¨®ximo a?o. Este es, sin embargo, un punto en que no todas las delegaciones est¨¢n de acuerdo y, muy posiblemente, ser¨¢ el tema del debate para la pr¨®xima conferencia ordinaria, a celebrarse el pr¨®ximo 10 de diciembre en Abu Dhabi.

Los huesos a roer en esta reuni¨®n contin¨²an siendo las delegaciones de Venezuela e Irak, dos pa¨ªses que se han negado en anteriores ocasiones a aceptar una rebaja oficial de su precio de 36 d¨®lares, aunque luego en el mercado est¨¦n vendiendo por debajo incluso.de 34 d¨®lares por barril. No hay que olvidar tambi¨¦n el problema de los altos precios de Libia y Argelia, que Yamani quiere que bajen de 40 a 37 d¨®lares.

Ayer; sin embargo, tanto Calder¨®n Verti como Tayeh A. Karim, ministros respectivos de Venezuela e Irak, indicaron que estaban abiertos a un compromiso. "Creo que ahora existen m¨¢s pos¨ªbilidades de un acuerdo de unificaci¨®n que el pasado agosto", declar¨® Karim a su llegada al Intercontinental.

"Estoy mucho m¨¢s optimista que la ¨²ltima vez que nos vimos", declar¨® escuetamente el venezolano. No obstante, un miembro de su delegaci¨®n declar¨® a EL PAIS que Venezuela desconoc¨ªa todav¨ªa la propuesta de Subroto y que, antes de tomar una postura, su ministro necesitaba entrevistarse con Yamani, lo que hizo ayer por la noche.

Informaciones procedentes de Caracas confirman, no obstante, que el Gobierno venezolano ha sentado ya el principio pol¨ªtico de una rebaja de su precio oficial. Las razones t¨¦cnicas est¨¢n m¨¢s claras que las pol¨ªticas. Caracas vende su crudo, dentro del complicado sistema de precios que aplica, muy por debajo de su precio oficial de 36 d¨®lares, por lo que.el acuerdo posible no debe suponer ning¨²n costo.

Algo similar sucede con Irak, que ya ofrece descuentos de dos d¨®lares sobre su precio de 36 d¨®lares. Y con Ir¨¢n, otro pa¨ªs reticente a las rebajas pol¨ªticas, pero mucho m¨¢s interesado en vender todo lo que puede, por razones perentorias de necesidad de divisas, que en discutir formalismos tarifarios.

Pero la clave sigue estando en Yamani y en la pol¨ªtica petrolera de su pa¨ªs. Rumores que circulan en la sede del encuentro ginebrino vinculan su postura final al resultado del debate en el Senado norteamericano sobre la venta de los aviones AWACS, previsto para ¨²ltima hora de ayer. De la decisi¨®n que adopte Washington puede depender el resultado de la conferencia de la OPEP, que no por casualidad se celebra justo despu¨¦s de que el tema est¨¦ por decidir en la capital norteamericana. Si Reagan no obtiene los votos necesarios para dar el visto bueno legislativo a dicha venta, hay que empezar a pensar en una Arabia Saud¨ª molesta e inclinada hacia posiciones mucho menos moderadas que las que ha mantenido.