Un impuesto hipotecado

El impuesto sobre el valor a?adido (IVA), tributo que grava el valor incorporado a cada fase del proceso de producci¨®n y distribuci¨®n de bienes y servicios, llegar¨¢ a Espa?a con una doble hipoteca. Es una exigencia para entrar en la Comunidad Econ¨®mica Europea (CEE), si bien lo tienen dos docenas de pa¨ªses no comunitarios. Ser¨¢, adem¨¢s, un pilar b¨¢sico para aumentar las aportaciones del Estado a la Seguridad Social, aliviando las de los empresarios.Hacienda lo ha dicho claramente: "El IVA incide, en definitiva, sobre el consumidor". Es decir, que en el futuro la generalidad de los ciudadanos soportar¨¢n las dos fuentes ampliamente mayoritarias de recursos estatales: renta al ingresar, IVA al consumir. Los otros impuestos, esperemos, ser¨¢n testimoniales.

Pero los empresarios, a juzgar por las reiteradas declaraciones de la Confederaci¨®n Espa?ola de Organizaciones Empresariales (CEOE), parece que lo van a pagar s¨®lo ellos. Ayer mismo, en la introducci¨®n a su libro sobre los aspectos sectoriales de la integraci¨®n de Espa?a en la CEE, la patronal ha dicho que ¨²nicamente la armonizaci¨®n en el plano de las aportaciones a la Seguridad Social (se quejan de que aportan el doble que sus colegas comunitarios, no de que la Seguridad Social espa?ola sea poco m¨¢s de la mitad de la europea) har¨ªa posible una implantaci¨®n del IVA en Espa?a.

Su argumento es que, en otro caso, ello supondr¨ªa un muy grave da?o para el conjunto de los intereses econ¨®micos nacionales. Ciertamente, les pesa, y debe pesarnos a todos, en especial a los parados espa?oles, que los productos hispanos lleven incorporado en su valor las cotizaciones empresariales a la Seguridad Social, que no son devueltas en aduanas, lo que resta competitividad con respecto a los pa¨ªses donde la Seguridad Social se paga m¨¢s con impuestos.

No obstante, los representantes del resto de la sociedad (sindicatos, organizaciones de consumidores, partidos pol¨ªticos) quiz¨¢ deber¨ªan contribuir a que la voz empresarial no sea exclusiva sobre un tema que tanto costar¨¢ a los ciudadanos. Los partidos parlamentarios tendr¨¢n su oportunidad en los pr¨®ximos meses, con motivo del debate del proyecto de ley del IVA, si sus enmiendas son inspiradas tambi¨¦n por intereses no s¨®lo patronales. El resto de los estamentos no parece haber tomado hasta ahora posiciones p¨²blicas, y su actitud bien podr¨ªa favorecer otra hipoteca para el nuevo impuesto.