La Comisi¨®n de Inform¨¢tica ha pedido modificaciones al pliego de condiciones del segundo concurso

La Comisi¨®n Interministerial de Inform¨¢tica rechaz¨® ayer el nuevo pliego de condiciones presentado por Hacienda para la adjudicaci¨®n de los equipos de inform¨¢tica para la gesti¨®n de impuestos, tras la pol¨¦mica declaraci¨®n de concurso desierto (en contra de las recomendaciones de la citada comisi¨®n) que tuvo lugar hace unos d¨ªas. No obstante, la Comisi¨®n de Inform¨¢tica ha propuesto una serie de modificaciones a la ¨²ltima propuesta de Hacienda, que podr¨ªan dejar abierta la posibilidad de una adjudicaci¨®n directa del grueso del concurso a IBM y a la empresa nacional Secoinsa.

La citada adjudicaci¨®n se har¨ªa en base a dos grandes paquetes, el sistema inform¨¢tico regional y el provincial, correspondiendo el primero a IBM y el segundo a Secoinsa. Quedar¨ªan desplazadas la firma Univac, que ha acudido a estos concursos agrupada con Secoinsa, y que fue la opci¨®n recomendada por la Comisi¨®n de Inform¨¢tica, y la tercera oferta -presentada por la firma inglesa ICL tras ser declarado desierto el anterior concurso-, que hab¨ªa sido auspiciada por la propia Administraci¨®n para poder recurrir sin incumplir la Ley de Contratos del Estado a la adjudicaci¨®n directa. Este reparto tratar¨ªa de respetar los intereses de la empresa del INI Secoinsa.

Univac preve¨ªa esta posibilidad

Directivos de Univac, en una reciente conferencia de Prensa, opinaron ya sobre esta hipot¨¦tica soluci¨®n. La conexi¨®n de los equipos de IBM y Secoinsa, seg¨²n ellos, supondr¨ªa infrautilizaci¨®n de las posibilidades de los equipos de Secoinsa, un nuevo per¨ªodo de pruebas y la adopci¨®n de la soluci¨®n t¨¦cnica dise?ada por los hombres de Univac para concurrir a este concurso en agrupaci¨®n con la empresa del INI. Los ejecutivos de Univac anunciaron entonces, por otra parte, que no renunciaban a acciones legales y a solicitar a Hacienda da?os y perjuicios. La presentaci¨®n a este concurso de inform¨¢tica fiscal les ha supuesto unos fuertes gastos y las vicisitudes que est¨¢ siguiendo la adjudicaci¨®n da?a la imagen p¨²blica de Univac.El nuevo concurso para la inform¨¢tica fiscal propuesto por Hacienda ha elevado su cuant¨ªa en unos 200 millones de pesetas sobre los 650 iniciales, y ha ajustado su pliego de condiciones -seg¨²n medios del sector- a la oferta presentada por IBM. La agrupacion Univac-Secoinsa, que estuvo a punto de quedarse fuera del segundo concurso como consecuenicia de la renuencia de los funcionarios del Centro de Proceso de Datos para hacerse cargo de la oferta minutos antes de que expiara el plazo, hab¨ªa incrementado la participaci¨®n de Secoinsa en el proyecto hasta converetirla en mayoritaria.

La oferta de ICL, considerada "convidado de piedra" en medios del sector, ha resultado ya recompensada por la publicidad que se le ha dado a esta firma con ocasi¨®n del concurso. ICL es la primera empresa de ordenadores del Reino Unido.

En medios del sector no se descarta que el Consejo de Ministros de hoy aborde el controvertido concurso de informatizaci¨®n fiscal de Hacienda y que, en un futuro pr¨®ximo, se produzcan algunos relevos de responsables directos de los servicios inform¨¢ticos de la Administraci¨®n. "Cualquiera que sea la soluci¨®n final", a?aden los citados medios, "el revuelo planteado por estos concursos de Hacienda es muy positivo para el sector. De ahora en adelante los responsables de la Administraci¨®n ser¨¢n conscientes de las repercusiones p¨²blicas que pueden alcanzar sus decisiones en la adjudicaci¨®n de concursos de adquisici¨®n de bienes y servicios por el Estado".

En los pr¨®ximos d¨ªas se reunir¨¢ la ponencia t¨¦cnica para estudiar, a la vista de las recomendaciones de la Comisi¨®n Interministerial de Inform¨¢tica, el engarce de las distintas ofertas. Posteriormente se celebrar¨¢, previamente a la adjudicaci¨®n directa, una nueva reuni¨®n de la Comisi¨®n Interministerial de Inform¨¢tica. El anuncio de la soluci¨®n definitiva, que ser¨¢ la citada adjudicaci¨®n directa a IBM y Secoinsa, tardar¨¢ unos dias. La decisi¨®n de respetar los intereses de Secoinsa evita, por otra parte, el posible conflicto entre Hacienda e Industria.