El Parlamento italiano rechaza el restablecimiento de la pena de muerte

Por una mayor¨ªa aplastante, el Parlamento rechaz¨® ayer la petici¨®n del partido neofascista de Giorgio Almirante de restablecer en Italia la pena de muerte. Votaron a favor s¨®lo veinti¨²n diputados; todos los dem¨¢s, 292, se declararon contrarios. El voto fue secreto.El resultado era tan esperado que la mitad de los diputados ni se hab¨ªan presentado en el hemiciclo. Y lo m¨¢s significativo es que s¨®lo la mitad de los veintinueve parlamentarios del partido de Almirante, que hab¨ªa hecho la propuesta, votaron a favor.

Los misinos hab¨ªan recogido un mill¨®n de firmas en todo el pa¨ªs a favor de la pena de muerte. Pero en Italia no existe el refer¨¦ndum para imponer una ley, y solo vale para abrogar otra ya existente.

Por eso, Almirante se hab¨ªa acogido al subterfugio de pedir al Parlamento que ante el agravamiento de la amenaza terrorista se declarase el estado de guerra en Italia, lo cual justificar¨ªa la reintroducci¨®n de la pena de muerte.

El no de todos los oradores fue un¨¢nime. Desde los comunistas a los democristianos, desde la nueva izquierda a los liberales y, por supuesto, a los socialistas y republicanos, el coro de voces contrarias fue aplastante.

"Es una petici¨®n aberrante", dijeron los liberales; "la Democracia Cristiana se inspira en la intangibilidad de la vida, toda excepci¨®n a esta regla aleja de la civilizaci¨®n", opin¨® el partido del Gobierno; "el terrorismo se vence s¨®lo con la movilizaci¨®n democr¨¢tica de la mayor¨ªa", afirmaron, los comunistas; "la pena de muerte es algo que los italianos han barrido para siempre de su legislaci¨®n como un signo de madurez democr¨¢tica", a?adieron, por su parte, los socialistas.

Todos los partidos recordaron que precisamente en este momento, las fuerzas de orden p¨²blico, sin necesidad de medidas extraordinarias, est¨¢n dando una batalla seria y eficaz contra el terrorismo y que, a pesar de la existencia de violencia terrorista, es absurdo considerar que el pa¨ªs est¨¦ en estado de guerra.

Y es que, precisamente, Italia es uno de los pa¨ªses europeos que, desde la tradici¨®n del republicano Beccaria, luch¨® siempre con mayor ah¨ªnco contra la pena de muerte. Fue el primer pa¨ªs que la aboli¨®, incluso antes que el Reino Unido.