Un testigo presentado por EE UU para probar injerencias en El Salvador dice haber sido torturado

Un joven nicarag¨¹ense con cuyo testimonio contaba el Departamento de Estado norteamericano para probar la existencia de injerencias extranjeras en El Salvador afirm¨® ayer a los periodistas que las confesiones que hab¨ªa hecho en ese sentido le hab¨ªan sido arrancadas mediante torturas por las autoridades salvadore?as.Orlando Jos¨¦ Tardencillas Espinosa, de 19 a?os, deb¨ªa, seg¨²n las previsiones del Departamento de Estado, repetir ante la Prensa norteamericana, convocada en el despacho de Dean Fischer, portavoz del Departamento de Estado, una confesi¨®n hecha hace un a?o en El Salvador seg¨²n la cual hab¨ªa sido entrenado en Cuba y en Etiop¨ªa y enviado a El Salvador por los sandinistas para ayudar a la guerrilla.

En lugar de confirmar sus declaraciones, Tardencillas afirm¨® que esta confesi¨®n le hab¨ªa sido arrancada mediante torturas y que ¨¦l nunca hab¨ªa vivido m¨¢s que en El Salvador y Nicaragua. Tardencillas precis¨® que hab¨ªa servido en el Ej¨¦rcito nicarag¨¹ense, que lo hab¨ªa abandonado antes de ir a El Salvador y que por su propia decisi¨®n se uni¨® a la guerrilla.

Dean Fischer y otros responsables del Departamento de Estado que asist¨ªan al encuentro entre Tardencillas y la Prensa, rechazaron hacer todo comentario ante estas declaraciones y parec¨ªan particularmente descontentos. El joven indic¨® que hab¨ªa pertenecido a los grupos guerrilleros de las Fuerzas Armadas de Liberaci¨®n Nacional, uno de las organizaciones rebeldes en El Salvador, y agreg¨® que tras su captura en enero de 1981, hab¨ªa permanecido detenido en una prisi¨®n de San Salvador. Para probar que hab¨ªa sido torturado, mostr¨® a los periodistas una cicatriz que ten¨ªa detr¨¢s de la oreja provocada por una operaci¨®n destinada a extraerle un co¨¢gulo de sangre que se le hab¨ªa formado a ra¨ªz de los golpes recibidos en la c¨¢rcel. En los ¨²ltimos meses, precis¨®, no fue sometido a tortura f¨ªsica, sino psicol¨®gica.