Respuestas a Garc¨ªa de Enterr¨ªa
Desear¨ªa proporcionar algunas referencias de car¨¢cter hist¨®rico-docente para que el se?or Eduardo Garc¨ªa de Enterr¨ªa pueda complementar su informaci¨®n y ser m¨¢s riguroso cuando exponga a sus interlocutores extranjeros facetas de la vida social en este pa¨ªs. Recordarle, por ejemplo, que la universidad espa?ola todav¨ªa se resiente profundamente de aquellos singulares procesos de selecci¨®n del profesorado protagonizados por los tribunales de oposiciones del r¨¦gimen anterior, en los que el uniforme de falangista o la credencial del Opus Dei eran pasaporte para la adscripci¨®n al c¨ªrculo m¨¢gico de la ciencia nacional. Todav¨ªa se recuerda en Barcelona c¨®mo fueron alimentadas las poltronas pedag¨®gicas de la facultad de Ciencias Econ¨®micas en el momento de su fundaci¨®n, cuando algunos contables y tenedores de libros de la vieja escuela mercantil de la calle de Balmes -algunos incluso carentes de bachillerato- fueron cata-Pasa a la p¨¢gina 12
Respuestas a Garc¨ªa de Enterr¨ªa
Vlene de la p¨¢gina 11pultados por el dedo, tambi¨¦n m¨¢gico, hacia la c¨¢tedra vitalicia. El espacio de esta carta no da para m¨¢s, pero la muestra puede ser de utilidad.
Por otra parte, es necesario marcar distancias con la l¨®gica que domina el an¨¢lisis del citado se?or y no meter a todos los catedr¨¢ticos universitarios en el mismo saco, cosa que ¨¦l hace con los PNN (producto nacional neto).
Mas en ¨²ltima instancia el nudo del problema es sencillo. La LAU puede mermar parte del omn¨ªmodo poder que un sector del estamento vitalicio entiende literalmente como privilegio providencial-paternal y matizar vergonzosas pernadas que todav¨ªa subsisten en la instituci¨®n universitaria. La oligarqu¨ªa se eriza cuando tocan sus privilegios. Ni siquiera el criterio burgu¨¦s de valorar al individuo por su actividad puede operar en este pa¨ªs, pues las oligarqu¨ªas enfeudadas anteponen la reproducci¨®n de sus intereses por encima de cualquier racionalidad.
En cuanto a lo ole la "cientificidad" y el "manual,", etc¨¦tera, son temas que no pueden ser abordados a partir de las premisas sentadas por el se?or Garc¨ªa de Enterr¨ªa, pues se fundamentan simplemente en una apetencia de conservaci¨®n y hegemon¨ªa que menoscaban la naturaleza del tema y lo degradan,./ .
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