Resulta inevitable que los medios informativos se conviertan en parte del poder establecido

Resulta inevitable que la Prensa se convierta en parte del poder establecido, lo que no debe impedir que cumpla con la mayor eficacia posible su papel de oposici¨®n y denunciadora de los abusos de ese poder, cada vez m¨¢s concentrado. En este punto estuvieron de acuerdo todos los participantes en una mesa redonda que, sobre el tema "La Prensa ante poder", se celebr¨® ayer, organizada por la Fundaci¨®n Pablo Iglesias. Participaron en el debate Rossana Rossanda, directora de Il Manifesto (diario independiente de izquierda) de Roma; y los periodistas Pedro Altares, Jorge Mart¨ªnez Reverte y Juan Luis Cebri¨¢n, director de EL PAIS.

"El m¨¢s honrado profesional puede ser manipulado sin siquiera saberlo", se?al¨® Rossanda, para quien "el clich¨¦ del periodista independiente se complica mucho en una democracia en funcionamiento". Respecto al medio que dirige, un diario izquierdista que constituye un ejemplo peculiar de Prensa independiente, Rossanda opin¨® que este tipo de medios solo pueden nacer en momentos de convulsi¨®n social, como lo hizo Il Manifesto en 1971. "Ahora solo se puede mantener", agreg¨®.A la pregunta ?a qui¨¦n sirve la Prensa?, Rossanda sostuvo que nadie pod¨ªa apoyar ya la t¨¦sis de que existe una verdad social defendida por la Prensa en favor del ciudadano frente al Estado. La Prensa, al, fin y al cabo, representa el punto de vista de una parte conflictiva de la sociedad civil, que nunca puede ser objetivo.

Pedro Altares cree que la Prensa escrita, "Prensa siempre codiciada del poder", es especialmente d¨¦bil y vulnerable en estos momentos de crisis econ¨®mica, y que la batalla por su control no ha hecho m¨¢s que empezar". "Los medios de comunicaci¨®n despiertan un apetito desordenado en los pol¨ªticos", dijo.

Juan Luis Cebri¨¢n cree que "algo puede hacer la sociedad civil, por medio de los periodistas, frente al poder, cada vez m¨¢s concentrado"'. "Somos parte del poder, en el peor sentido, puesto que somos estables, estamos institucionalizados, y representamos a un grupo minoritario privilegiado. Y, sin embargo, tambi¨¦n actuamos como contrapoder, como fuerza social frente a los abusos".