Correr con las piernas rotas

La gesta m¨¢s importante de Angel Nieto en su ya larga carrera del mundial, la que le encumbr¨® sin discusi¨®n hasta el lugar en el que los aficionados de todo el mundo solamente colocan a los elegidos fue su victoria en el Gran Premio de Gran Breta?a de 1979. Pese a una grav¨ªsima ca¨ªda en Portugal, que le dej¨® si correr varias pruebas, Angel Nieto era ya virtual campe¨®n del mundo por novena vez. Ten¨ªa la pelvis y las dos piernas rotas, y asist¨ªa postrado en una cama de un hospital, al desarrollo de la ¨²ltima fase del mundial. Los peri¨®dicos dec¨ªan que el espa?ol ganar¨ªa ese a?o el mundial desde la cama. Con el car¨¢cter de Angel Nieto, eso era dificil de digerir; aunque entend¨ªa que lo ganaba en la cama porque hab¨ªa acumulado en la pista los puntos suficientes para ser inalcanzable. No era argumento suficiente. Nieto abandon¨® repentinamente el hospital, apoyado en unas muletas, y se fue a correr a Silverstone. Sus mec¨¢nicos le auparon a la moto, como un yoquei en su caballo. No pod¨ªa inyectarse ning¨²n calmante; porque le quitaba sensibilidad. Empuj¨® la moto en la arrancada dos o tres pasos, hasta el l¨ªmite de la extenuaci¨®n. Cuando la moto arranc¨®, Angel Nieto supo que la victoria ser¨ªa suya. Dejar¨ªa la vida con tal de ganar ante 150.000 espectadores, que comprend¨ªan su gesta y le aclamaban. Y gan¨®. Nadie le llev¨® el t¨ªtulo a la cama.