Rechazada la reconstruccion de los hechos en el juici¨® del 'caso Almer¨ªa'
La reiterada petici¨®n del acusador particular, abogado Dar¨ªo Fern¨¢ndez, a la que se sum¨® en un momento de la fase sumarial el propio ministerio fiscal, de proceder a la reconstrucci¨®n de los hechos que se produjeron en la madrugada del d¨ªa 10 de mayo de 1981 en el kil¨®metro 8,400 de la carretera comarcal de G¨¦rgal, con el resultado de la muerte de tres j¨®venes, ha sido definitivamente rechazada por el tribunal que viene juzgando desde el pasado lunes el caso Almer¨ªa.La nueva petici¨®n del acusador particular se produjo en la sesi¨®n de la tarde, tras las constantes declaraciones contradictorias ante el tribunal del procesado teniente coronel Carlos Castillo Quero con anteriores declaraciones suyas.
Las comunicaciones entre la Guardia Civil de Madrid y la comandancia de Almer¨ªa, punto clave del proceso
A juicio del acusador particular, la reconstrucci¨®n de los hechos, diligencia fundamental sobre todo en un proceso como el del caso Almer¨ªa, servir¨ªa para acabar con el rompecabezas de ambig¨¹edades, imprecisiones y hechos contradictorios que el procesado est¨¢ ofreciendo al Tribunal.
El Tribunal, tras deliberar durante media hora, decidi¨® no acceder a dicha petici¨®n, bas¨¢ndose, por una parte, en que el momento procesal oportuno se sit¨²a en el tr¨¢mite de conclusiones provisionales y no en la vista del juicio oral, y, por otra parte, en que tampoco se ha producido un hecho nuevo relevante que obligue a esta reconstrucci¨®n de los hechos por vias de informaci¨®n suplementaria. El acusador particular hizo constar su protesta a los efectos del posible recurso de casaci¨®n ante la sala segunda del Tribunal Supremo.
La petici¨®n formulada por el acusador particular dio lugar a un incidente provocado por el defensor del teniente G¨®mez Torres, abogado Fulgencio P¨¦rez Dob¨®n, que atribuy¨® a una finali dad publicitaria, y no al deseo de esclarecer la verdad, el planteamiento de aquella petici¨®n. El presidente del Tribunal cort¨® esta manifestaci¨®n, recordando que lo que all¨ª se estaba realizando era un debate jur¨ªdico procesal, al margen de problemas personales. Por su parte, el acusador particular aludido solicit¨® que constase en acta dicha manifestaci¨®n para que en su momento se dedujese testimonio contra el autor de tales manifestaciones por el delito de injurias. Los defensores de los procesados se opusieron, alegando motivos legales, a la diligencia de reconstrucci¨®n de los hechos, pero a?adieron que estaban dispuestos a admitirla si se realizaba en las mismas condiciones de tiempo y hora, incluso "con viento y lloviznando".
En la sesi¨®n de la tarde el interrogatorio del acusador particular al teniente coronel Carlos Castillo Quero se centr¨® en los momentos en que se inician en la comandancia de la Guardia Civil de Almer¨ªa los preparativos de la caravana de cuatro veh¨ªculos, un Seat 127 en primer lugar, el Ford Fiesta con los tres detenidos en segundo lugar, otro Seat 127 en tercer lugar y finalmente el Clirysler en que iba el procesado que ha de dirigirse a la localidad de G¨¦rgal. Igualmente el interrogatorio abord¨® la situaci¨®n en que se encontraban los cuatro veh¨ªculos de la caravana en el momento en que fueron muertos los tres j¨®venes que iban en el interior del Ford Fiesta . En uno y otro tema, las respuestas del procesado fueron frecuentemente evasivas, inconcretas y contradictorias con los datos y declaraciones efectuadas por ¨¦l mismo y por otros guardias civiles testigos de los hechos en el sumario.
El informe de las comunicaciones
En la sesi¨®n de la ma?ana el acusador particular solicit¨® del Tribunal que remita al juzgado. de guardia, tras deducir el correspondiente testimonio de su contenido, un informe enviado en junio de 1981 por la direcci¨®n general de la Guardia Civil al juez instructor del sumario, por exhorto de ¨¦ste sobre las comunicaciones de todo tipo (t¨¦lex, radiogramas, telef¨®nicas o por medio del ordenador del servicio de inform¨¢tica) que hayan dejado constancia escrita habidas entre la citada direcci¨®n general y la comandancia de la Guardia Civil de Almer¨ªa, entre las catorce horas del d¨ªa 9 y las cipco de la madrugada del d¨ªa 10 de mayo de 1981 sobre la localizaci¨®n y captura de los miembros de ETA Mazusta y Bereciart¨²a y sobre la identificaci¨®n de los tres j¨®venes Luis Cobo, Luis Montero y Juan Ma?as, que hab¨ªan sido detenidos bajo la presunci¨®n de ser los citados terroristas. Sobre este punto, el presidente del Tribunal manifest¨® que la sala se resolver¨¢ en su momento sobre la petici¨®n formulada por el acusador particular. Esta petici¨®n se produjo cuando el procesado Carlos Castillo Quero manifest¨® ante el Tribunal que todas las comunicaciones producidas con motivo de la detenci¨®n de las tres j¨®venes v¨ªctimas se realizaron a trav¨¦s de la Direcci¨®n General de la Guardia Civil. Seg¨²n el acusador particular, en el informe remitido en su d¨ªa por la Direcci¨®n General de la Guardia Civil al juez instructor existe una contradicci¨®n sobre el controvertido dato de si existi¨® o no una orden procedente de Madrid p¨¢ra que los tres j¨®venes detenidos fueran traslada,los a la capital de Espa?a. En el informe se dice en primer lugar que no consta que se produjera ninguna comunicaci¨®n en la que quede constancia escrita entre la Direcci¨®n de la Guardia Civil y la comandancia de Alm r¨ªa en el tiempo que va desde las catorce horas del d¨ªa 9 hasta las cinco de la madrugada del d¨ªa 10 de mayo de 1981. A continuaci¨®n el informe manifiesta que fuera de este espacio de tiempo s¨ª consta que hubo comunicaciones, de las que hay constancia escrita, entre los dos centros referidos. Yendo m¨¢s all¨¢ de lo que hab¨ªa solicitado el juez instructor, y en un deseo de colaborar al m¨¢ximo con la justicia, el informe de la Direcci¨®n General de la Guardia Civil a?ade que este centro tuvo conocimiento de que se produjeron comunicaciones de las que no hay constancia escrita entre la citada direcci¨®n general y otras dependencias con motivo de la detenci¨®n de los tres j¨®venes en Almer¨ªa, dentro del espacio de tiempo antes referido. Ninguna de las que se cita con expresi¨®n de la hora en que se produjo, se refiere a la comandancia de la Guardia Civil de Almer¨ªa. Sin embargo, m¨¢s adelante el informe a?ade que "se orden¨® a la comandancia de Almer¨ªa el traslado de las personas motivo del servicio a esta direcci¨®n general", sin precisar la hora en que se produjo esta orden.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.