Perspectivas pesimistas para la reuni¨®n de P¨¦rez-Llorca y Francis Pym sobre Gibraltar

El ministro espa?ol de Asuntos Exteriores, Jos¨¦ Pedro P¨¦rez-Llorca, se entrevistar¨¢ hoy en Luxemburgo con su colega brit¨¢nico, Francis Pym, para discutir si se cancela o no la reuni¨®n hispano-brit¨¢nica prevista para el pr¨®ximo d¨ªa 25 en Sintra (Portugal) a prop¨®sito de Gibraltar. El Gobierno espa?ol quiere tener seguridades de que la reuni¨®n de Sintra ser¨¢ una aut¨¦ntica sesi¨®n de negociaci¨®n y no un acto formal, sin contenido alguno. Las espectativas eran ayer pesimistas.

P¨¦rez-Llorca, a su llegada a Luxemburgo, donde asistir¨¢ a una reuni¨®n de negociaci¨®n con la Comunidad Econ¨®mica Europea (CEE), no quiso confirmar ni desmentir la cancelaci¨®n de la reuni¨®n del d¨ªa 25."No puedo decir nada hasta que me entreviste con la persona con la que tendr¨ªa que haber tenido la reuni¨®n de Portugal", afirm¨® el ministro, dejando entender que la entrevista de Sintra tiene pocas posibilidades de celebrarse.

Francis Pym, por su parte, se neg¨® a hacer ning¨²n comentario al ser interrogado por periodistas espa?oles.

Seg¨²n fuentes bien informadas, pr¨®ximas al Ministerio de Santa Cruz, P¨¦rez-Llorca expondr¨¢ hoy a su colega brit¨¢nico el deseo de Madrid de tener seguridades sobre el contenido del comunicado final que se har¨ªa p¨²blico en Sintra. Espa?a quiere que se afirme, desde el primer momento, que ambas partes "han entrado en el fondo de los problemas" y que se fije un calendario concreto de negociaci¨®n. El Gobierno espa?ol no est¨¢ dispuesto -seg¨²n dichas fuentes- a establecer la libre circulaci¨®n hacia el Pe?¨®n y la apertura de la verja "a cambio de una foto".

Portavoces oficiosos brit¨¢nicos se?alaron, por su parte, que si la reuni¨®n se cancelaba ser¨ªa "por inicativa espa?ola", aunque reconocieron que el conflicto de las Malvinas ha exacerbado el esp¨ªritu nacionalista brit¨¢nico y que el apoyo espa?ol al r¨¦gimen de Buenos Aires en dicho conflicto era comprendido aunque no jaleado. Dichas fuentes oficiosas se negaron a precisar si Londres estaba dispuesto a dar a la luz en Sintra un comunicado en el que se afirmara que brit¨¢nicos y espa?oles hab¨ªan empezado a negociar sobre la soberan¨ªa de Gibraltar.

Para los medios oficiosos espa?oles consultados por EL PAIS, la apertura de la verja y el restablecimiento de las comunicaciones con Gibraltar supone "una inyecci¨®n econ¨®mica" para el Pe?¨®n, que debe obtener en respuesta el compromiso brit¨¢nico de empezar a discutir desde el primer d¨ªa el tratado que recibir¨¢n los espa?oles en Gibraltar, el estado de la base militar del Pe?¨®n y, sobre todo, el problema b¨¢sico de la soberan¨ªa.

Dichos medios tem¨ªan que los negociadores brit¨¢nicos alegaran la sensibilidad de la opini¨®n p¨²blica de su pa¨ªs a prop¨®sito del conflicto de las Malvinas para vaciar de contenido la primera reuni¨®n de negociaciones hispano-brit¨¢nica y dejar en el aire la fecha de la pr¨®xima reuni¨®n.

Juan Carmona, partidario de la negociaci¨®n

En la informaci¨®n aparecida en la edici¨®n de EL PAIS, de ayer domingo, y referida a la situaci¨®n en La L¨ªnea en v¨ªsperas de la apertura de la verja y al temor existente en la ciudad ante la posibilidad de un nuevo retraso, se recog¨ªan unas declaraciones del alcalde, Juan Carmona, que por necesidades de ¨²ltima hora fueron cortadas, informa

La ausencia de sus ¨²ltimas frases pod¨ªa mover a err¨®nea interpretaci¨®n de su forma de pensar al respecto, por lo que a continuaci¨®n reproducimos sus declaraciones, tal como figuraban antes del mencionado corte: "El cierre fue un error que adem¨¢s de ahogar a esta ciudad alej¨® a los gibraltareflos de Espa?a y supuso un retroceso enorme en su asimilaci¨®n, que era lo que se pretend¨ªa. Es un error que la democracia no tiene hoy por qu¨¦ asumir. Se reconoce la equivocaci¨®n, se vuelve a abrir y ya est¨¢.

Para forzar unas negociaciones Espa?a no tiene por qu¨¦ utilizar el argumento de una verja. Nuestra diplomacia debe ser lo bastante h¨¢bil como para utilizar otros argumentos de m¨¢s peso, como la presencia de Espa?a en la OTAN. Este ha debido y debe ser el elemento de presi¨®n para negociar, y no la verja".