Los festivales de m¨²sica de Salzburgo se inauguran hoy bajo el signo de Beethoven, Mozart y Haydn

Con una fiesta de inauguraci¨®n a la que asiste el presidente de Austria, Rudolf Kirschlaeger, comienza hoy, domingo, el Festival de M¨²sica y Teatro de Salzburgo, que se prolongar¨¢ hasta el 30 de agosto y ofrece este a?o 111 representaciones entre ¨®peras, conciertos, serenatas, sesiones mozartianas y otras manifestaciones de contenido predominantemente cl¨¢sico, donde destacan el repertorio de obras de Beethoven, Haydn, Mozart, Mahler y Stavinsky, y en el apartado teatral una pieza del dramaturgo Peter Handke. El tenor espa?ol Pl¨¢cido Domingo intervendr¨¢, el 9 de agosto, en la ¨®pera Los cuentos de Hoffmann, con direcci¨®n musical de James Levine.

Acudir al Festival de Salzburgo, sin duda una de las manifestaciones m¨¢s famosas del mundo en su g¨¦nero, en gran coche deportivo, vestido con un elegante esmoquin y acompa?ado de una bella mujer susceptible de ser lucida es el sue?o de todo austriaco, como aseguraba no hace mucho un extendido cartel publicitario de este pa¨ªs.Sin embargo, el sue?o choca frontalmente con los precios de las entradas, que llegan este a?o a los 2.400 chelines (casi 15.000 pesetas) en las sesiones de ¨®pera. Las entradas m¨¢s baratas de todas, no existentes para algunas funciones, cuestan 56 chelines (m¨¢s de trescientas pesetas) y no dan derecho a sentarse.

Por otra parte, la orientaci¨®n tur¨ªstica y la proyecci¨®n internacional del festival, una de cuyas funciones oficiales es contribuir al reconocimiento de Austria como gran potencia musical, hace que buena parte de las localidades se vendan con gran anticipaci¨®n en el extranjero a quien, adem¨¢s de la posibilidad de coste¨¢rselas, pueda pagan tambi¨¦n el viaje y la estancia en la cara localidad tur¨ªstica de Salzburgo.

En v¨ªsperas de la inauguraci¨®n del festival se han o¨ªdo voces de protesta en la Prensa austriaca que solicitaban un mayor acceso de la poblaci¨®n local a estos festivales, financiados, en ¨²ltima instancia, con los impuestos de los ciudadanos. El presupuesto, costeado por las autoridades federales, regionales y locales de Salzburgo, adem¨¢s del fomento del turismo de esta ciudad, supone, este a?o unos 250 millones de chelines austriacos (m¨¢s de 1.500 millones de pesetas).

El programa de este verano, como en los anteriores, se concentra en las obras consagradas, para las que se encuentran ya agotadas las localidades. Dos d¨ªas antes de iniciarse el festival las ¨²nicas entradas disponibles eran las de las novedades, entre ellas el estreno de una obra del dramaturgo Peter Handke.

En su vertiente teatral, el festival se inaugura con la obra de Hugo von Hofmannsthal Jedermann, que data de 1911 y se representa cada a?o en la plaza de la catedral. Los papeles principales corren a cargo de Senta Berger y Maximilian Schell.

En la vertiente musical, la inauguraci¨®n ser¨¢ protagonizada por la ¨®pera Fidelio, la ¨²nica compuesta por Beethoven, que estrena este a?o una nueva escenificaci¨®n realizada por el octogenario Leopold Lindtberg.

En el cap¨ªtulo oper¨ªstico, Salzburgo ofrece tambi¨¦n el estreno de una nueva escenograf¨ªa para Cosi fan tutte, de Mozart, que ser¨¢ dirigida por Ricardo Muti. Los asiduos del festival esperan con curiosidad esta producci¨®n y apuestan a que ¨¦sta dif¨ªcilmente conseguir¨¢ igualar la cima alcanzada por el fallecido Karl B?hm.

B?hm, que dirigi¨® 338 funciones distintas entre 1938 y 1980, seg¨²n las estad¨ªsticas del festival, se pas¨® tres d¨¦cadas dirigiendo una y otra vez Cosi fan tutte, hasta que la obra fue retirada del programa en 1977. El festival despidi¨® con un r¨¦quiem de Mozart en 1981 a Karl B?hm, uno de los grandes ausentes de este a?o.

Pl¨¢cido Domingo en 'Los cuentos de Hoffmann'

Dentro de un amplio programa de retransmisiones desde los principales festivales musicales que se celebran en Austria durante el verano, la Radiotelevisi¨®n Austriaca emite por primera vez este a?o una funci¨®n del Festival de Salzburgo en directo. Se trata de la ¨®pera Falstaff, de Verdi, dirigida por Herbert von Karajan.Otras de las ¨®peras representadas en Salzburgo ser¨¢n La flauta m¨¢gica, de Mozart, y Los cuentos de Hoffinann, que contar¨¢ esta ¨²ltima con la participaci¨®n del tenor espa?ol Pl¨¢cido Domingo, el 9 de agosto. En ambas ¨®peras interviene el gran director James Levine.

En el programa de conciertos en sus diferentes modalidades -orquesta, instrumental, c¨¢mara- destaca Josef Haydn, de cuyo nacimiento se cumple este a?o el 2562 aniversario.

Haydn, seguido de Mozart, Mahler y Stravinski, acaparan la mayor parte del repertorio de los conciertos de orquesta (Filarm¨®nica de Viena, Academy of St. Martin in the Fields, Filarm¨®nica de Berl¨ªn, entre otras), bajo la batuta de Claudio Abbado, Neville Marriner, Seiji Ozawa, Leonard Bernstein y Von Karajan, por citar algunos nombres.

Beethoven, por su parte, ocupa un lugar privilegiado de los conciertos de piano (Claudio Arrau, Maurizio Pollini, Alfred Brendel y Christian Zacharias, entre otros). En el festival no falta un programa de conciertos matinales dedicados al ilustre paisano Wolfgang Amadeus Mozart.

En teatro, el Festival de Salzburgo ofrece este a?o cuatro obras, de las cuales s¨®lo una, el poema dram¨¢tico Ueber den doerfer, de Peter Handke, es una producci¨®n posterior a la primera guerra mundial y adem¨¢s se. estrena. Elandke, el creador del antiteatro, famoso por Insultos al p¨²blico, ha puesto su poema dram¨¢tico en manos de Wim Wenders, uno de los directores del nuevo cine alem¨¢n residente en EE UU. Wenders ha llevado al cine dos obras de Handke, Falsche bewegung y El miedo del portero ante el penalti.

Siendo este el a?o dedicado a Goethe, tampoco pod¨ªa faltar en el festival una obra de este dramaturgo alem¨¢n fallecido en 1832, por lo que el certamen ofrece la representaci¨®n de Torquato Tasso, en su programa teatral.

El programa del Festival de Salzburgo se complementa con una serie de representaciones teatrales ambulantes y gratuitas por las calles y plazas de Salzburgo con un repertorio de car¨¢cter popular.

Estas representaciones han sido objeto de duras cr¨ªticas, ya que una parte de la opini¨®n p¨²blica las considera un apa?o, una especie de premio de consolaci¨®n para los habitantes locales que no tienen acceso al festival.

En 1981, el Festival de Salzburgo tuvo 159.000 visitantes.