El ins¨®lito nombramiento de director de la Academia de Infanter¨ªa

Seg¨²n acuerdo del Consejo de Ministros del 30 de julio pasado, y a propuesta del titular de Defensa, Alberto Oliart, ha sido nombrado director de la Academia de Infanter¨ªa y gobernador militar de Toledo el general de brigada de dicha arma, Jos¨¦ Gast¨®n Molina. El real decreto correspondiente fue publicado el lunes 2 de agosto en el Bolet¨ªn Oficial del Ministerio de Defensa.

Una vez m¨¢s todas las solemnidades declamatorias y todas las seguridades ofrecidas por el presidente del Gobierno quedan pulverizadas con un sencillo nombramiento. Lo mismo pas¨® en otro ¨¢rea cuando se opt¨® por situar a Carlos Robles Piquer en la Direcci¨®n General de RTVE, por citar un solo ejemplo. O a Jaime Mayor Oreja como delegado del Gobierno en el Pa¨ªs Vasco. ?Qu¨¦ margen le queda entonces a Landelino Lavilla?

Escrito socialista dirigido al Congreso

Seg¨²n inform¨® EL PA?S el 28 de enero de 1981, Jos¨¦ Gast¨®n Molina, siendo coronel jefe de estudios de la Academia de Infanter¨ªa, pronunci¨® una conferencia el 11 de diciembre anterior, ante 120 capitanes que hac¨ªan el curso de ascenso a comandante, de contenido anticonstitucional. El texto dio origen a un escrito dirigido a la Mesa del Congreso de los Diputados del socialista Busquets.La conferencia -precisaba la edici¨®n citada de EL PA?S- ten¨ªa por t¨ªtulo El militar y la pol¨ªtica, y en el transcurso de la misma el coronel Jos¨¦ Gast¨®n Molina "tuvo duras palabras hacia el Gobierno, los partidos, marxistas y las autonom¨ªas, propiciando una acci¨®n militar que acabase con la situaci¨®n actual". El coronel Gast¨®n aludi¨® a que "en Espa?a se vuelven a encontrar todos los elementos que dieron lugar al 18 de julio". Para el coronel, Espa?a "est¨¢ sometida al ataque de los partidos marxistas dirigidos por la Internacional Socialista y por Rusia". El r¨¦gimen actual estar¨ªa presidido por una "partitocracia" donde cada partido busca su propia satisfacci¨®n", mientras que "con Franco se buscaba el inter¨¦s de la patria".

Para salvaguardar el orden, el honor y la independencia nacional, el coronel Jos¨¦ Gast¨®n Molina pidi¨® una acci¨®n militar que durase el tiempo necesario para que "Espa?a recupere el aliento. El poder ser¨ªa entregado despu¨¦s a un Gobierno no militar constituido para servir los intereses del pueblo, que ha sido enga?ado hasta ahora".

S¨®lo veintis¨¦is d¨ªas despu¨¦s de que EL PA?S publicara esta informaci¨®n y 74 desde que se pronunciara la conferencia en Toledo, Milans, Tejero y dem¨¢s compa?eros ensayaban la puesta en pr¨¢ctica de lo que se ven¨ªa preconizando por el jefe de estudios de la Academia de Infanter¨ªa en un curso obligatorio para el ascenso a comandante con asistencia de 120 capitanes del arma.

Seis meses despu¨¦s de pronunciada la mencionada conferencia en la Academia de Toledo, el 11 de junio de 1981, el ministro de Defensa, Alberto Oliart, compareci¨® por primera vez ante la comisi¨®n correspondiente del Congreso de los Diputados para responder acerca de cuestiones militares. Fue entonces cuando el socialista catal¨¢n Julio Busquets tuvo al fin ocasi¨®n de formular su pregunta acerca del coronel Jos¨¦ Gast¨®n Molina y su intervenci¨®n contraria al r¨¦gimen constitucional vigente en Espa?a.

El ministro de Defensa en su respuesta dijo "que ten¨ªa el texto de la conferencia, en la que se dijeron muchas cosas, que a ¨¦l no le gustaban, pero que, en su conjunto, no era subversiva". Busquets, seg¨²n informaba EL PA?S del 12 de junio, no se mostr¨® satisfecho con la respuesta, por entender que se hab¨ªan vertido opiniones claramente contrarias a la normativa legal vigente.

El 18 de julio siguiente, en un comentario sobre "Los oficiales que vienen", EL PA?S recog¨ªa unas palabras del general Pinilla -entonces director de la Academia General de Zaragoza- en las que se pronunciaba por unos nuevos oficiales "conscientes del cambio y evoluci¨®n social y humana, de los nuevos estilos de convivencia y respetuosos con la voluntad nacional y soberan¨ªa popular; fieles al Rey y jefe de los ej¨¦rcitos y a nuestra sociedad y pueblo, a los que servimos, dentro de la estructura jur¨ªdica de Espa?a". Luego, el peri¨®dico se preguntaba c¨®mo hacer realidad esos prop¨®sitos y aseguraba que para superar ese reto hac¨ªa falta alguna coherencia mayor que la probada en el caso de la conferencia dictada por el coronel jefe de estudios de la Academia de Infanter¨ªa, Jos¨¦ Gast¨¢n Molina, donde se propiciaba una acci¨®n militar para terminar con la situaci¨®n pol¨ªtica.

La rentabilidad de la inconstitucionalidad

Pues aqu¨ª est¨¢ la coherencia reclamada, esa conferencia golpista ha resultado ser, a lo que se ve, la carta de presentaci¨®n adecuada para pasar de la jefatura de estudios a la direcci¨®n de la Academia de Infanter¨ªa. Una prueba m¨¢s, por si hiciera falta, de la incre¨ªble pol¨ªtica de nombramientos militares, seg¨²n la cual quienes serenamente y sin aspavientos ni exhibicionismos, pero con honestidad plena, prueban su acatamiento a la Constituci¨®n quedan poco menos que descalificados para el mando y pasan a destinos burocr¨¢ticos irrelevantes.?nase todo lo anterior al ins¨®lito editorial de la revista Reconquista sobre las sentencias del 23-F y al homenaje tributado en Valencia al coronel Ib¨¢?ez Ingl¨¦s y la l¨ªnea de puntos ir¨¢ dejando ver la silueta del elefante.