El F-18 es muy caro y est¨¢ pobremente armado, seg¨²n la Marina norteamericana

Para la supervisi¨®n de dicho contrato, lleg¨® ayer a Madrid una comisi¨®n gubemamental estadounidense. Por su parte, Felipe Gonz¨¢lez declar¨® ayer que el Gobiemo no deber¨ªa concluir dicho contrato sin consultar con las fuerzas que a partir del 29 de octubre podr¨ªan ocupar el Gobierno.El secretario de la Marina norteamericana, John F. Lehman, apoyado por el secretario de Defensa, Caspar Weinberger, ha sido el encargado de dar la voz de alarma en Estados Unidos sobre los puntos d¨¦biles de este avi¨®n, que ha sido elegido por el Gobierno espa?ol como el futuro avi¨®n de combate (FACA) de las Fuerzas Armadas espa?olas para los pr¨®ximos veinte a?os.

La tesis del Pent¨¢gono, recogida en el n¨²mero del 20 de septiembre del semanario Bussines Week, es que, a menos que McDonnell Douglas y Northrop Corp., principales suministradores de los componentes del aparato, rebajen sensiblemente el precio del avi¨®n, la Marina no tendr¨¢ otro remedio que cancelar su pedido, que, firmado inicialmente en 1980, incluye el suministro de m¨¢s 1.300 aparatos en los pr¨®ximos a?os. El Pent¨¢gono ha pensado ya en el F-14 y el A-6, de la Grumman Corp., como posibles sustitutos del F18.

El precio inicial concertado por la Marina fue, seg¨²n las primeras estimaciones, de 18 millones por cada aparato. En menos de dos a?os, los fabricantes han elevado el precio a m¨¢s de 24 millones de d¨®lares por unidad y Lehman mantiene que la Marina no pagar¨¢ m¨¢s de 22,5 millones, pese a los argumentos del incremento de los costes aducidos por los dos fabricantes.

Sea cual sea el precio final de este aparato, la cantidad en discusi¨®n en Estados Un¨ªdos contrasta con la manejada en Espa?a para el mismo tipo de caza. El programa FACA prev¨¦ un desembolso superior a los 300.000 millones de pesetas (unos 3.000 millones de d¨®lares al cambio de 1981) por los 84 aparatos encargados. Al camb¨ªo de 1981, cuando estas cantidades fueron inicialmente concertadas, el precio por unidad supera los 35 millones de d¨®lares. Seg¨²n la revista, existe un sentimiento creciente en el Departamento de Defensa de que el F-18 est¨¢ escasamente armado, comparado con el F-14, para hacer frente a las amenazas sobre la flota estadounidense por parte de los bombarderos de largo alcance sovi¨¦ticos y sus misiles crucero".

Misiles de corto alcance

"El F-18 es un buen avi¨®n", seg¨²n un funcionario del Pent¨¢gono, "pero, dado su precio y la dificultad creciente de su misi¨®n, puede que no lo sea lo suficiente". Otro problema con el armamento parte del tipo de misiles con los que va provisto (los Sparrow), cuyo alcance es apenas de veinticinco millas, frente a las cien millas que ofrece el Phoenix que fleva el F-14. En opini¨®n de los t¨¦cnicos de la Marina, una de las ense?anzas de la guerra naval modema es que lo que cuenta en el armamento de un caza es, sobre todo, el radio de acci¨®n de sus misiles.Si la Marina estadounidense decidiese, fmalmente, rechazar la compra del F- 18A, no s¨®lo peligrar¨ªa la colaboraci¨®n y la salud econ¨®mica de las empresas McDonnell Douglas y Northrop, sino que Espa?a ver¨ªa incrementado el precio de los aviones. El pedido de la U.S. Navy asciende a 1.367 aparatos, de los que se llevan fabricados 240.