La visita del Papa a Espa?a

Un espa?ol de cada dos podr¨¢ ver al Papa cuando, a fines de octubre, venga a esta tierra, que es, sin duda alguna, la m¨¢s cat¨®lica del mundo, pero donde la guerra fue canonizada como instrumento id¨®neo para predicar el Evangelio. Seg¨²n los c¨¢lculos de los organizadores, ser¨¢n dieciocho millones de espa?oles los que asistir¨¢n a los actos religiosos programados, en iglesias y estadios, calles y explanadas, o simplemente presenciar¨¢n el paso del Papa. ( ... )Es un viaje accidentado. Ya el Papa deb¨ªa venir el a?o pasado, y el atentado de mayo en la plaza de San Pedro oblig¨® a aplazarlo. Se hab¨ªa fijado para el mes de octubre, pero el Gobierno, en situaci¨®n diricil, disolvi¨® las Cortes y convoc¨® elecciones anticipadas. Se ha discutido mucho si conven¨ªa reenviar la visita pontificia a tiempos mejores, porque el Papa llegaba en plena campa?a electoral. (...)

Al final prevaleci¨® el criterio de un aplazamiento brev¨ªsimo. "Hemos esperado al Papa durante 2.000 a?os, podemos esperarlo quince d¨ªas m¨¢s", han declarado los sacerdotes m¨¢s sensatos. As¨ª pues, el pont¨ªfice llegar¨¢ a las cinco de la tarde del 31 de octubre. Estar¨¢n todav¨ªa frescos los resultados de las elecciones pol¨ªticas (28 de octubre), con la prevista victoria del partido socialista. ( ... )

Ser¨¢ el primer viaje de un papa a Espa?a, pese a que Juan Pablo II coment¨®: "Espa?a, como Polonia, en catolicismo es una moneda fuerte". ( ... ) Ser¨¢ tambi¨¦n el primer viaje de Juan Pablo II no organizado por el discutido cardenal Marcinkus, que ni siquiera formar¨¢ parte del s¨¦quito. ( ... ) La revista americana Time ha escrito que si Marcinkus pone los pies fuera del Vaticano, tendr¨¢ problemas con la justicia. ( ... )

29 de septiembre