Escritores occidentales aparecen como favoritos al Premio Nobel de Literatura

Escritores occidentales, sobre todo, compiten por el Premio Nobel de Literatura que se concede hoy en Estocolmo en medio de la expectaci¨®n habitual. Los nombres son tambi¨¦n los acostumbrados y las dudas que se mantienen en torno al galard¨®n afectan a los que desde hace tiempo se han hecho a la idea de que jam¨¢s van a ser los agraciados por el premio literario m¨¢s prestigioso y codiciado del mundo, cuya concesi¨®n casi coincide en el tiempo con el Cervantes espa?ol, que se concedi¨® ayer (v¨¦ase p¨¢ginas siguientes de esta misma edici¨®n).

Poco despu¨¦s del mediod¨ªa de hoy, jueves, la Academia de Letras de Suecia dar¨¢ a conocer el nombre del escritor laureado con el Premio Nobel de Literatura correspondiente al a?o en curso. Se trata, sin duda, del premio que concita mayor expectativa tanto en Suecia como en el mundo entero. No solamente por su dotaci¨®n, que este a?o alcanza un 1.150.000 coronas (m¨¢s de diecis¨¦is millones de pesetas), sino por su prestigio. La posibilidad de difusi¨®n masiva entre p¨²blicos de diferente condici¨®n y lengua, que es intr¨ªnseca a la creaci¨®n literaria, justifican esa expectativa tanto entre los lectores como entre los escritores.

150 propuestas

Como ya es tradicional, los dieciocho miembros de la Academia, sobre los cuales recae la dif¨ªcil responsabilidad de la decisi¨®n final, guardan la m¨¢s estricta reserva sobre el posible ganador, lo que tal vez explique la proliferaci¨®n de conjeturas que cada a?o se tejen al respecto. El profesor Lars Gyllensten, secretario permanente de la Academia y escritor a su vez, explic¨® brevemente a EL PAIS que se han recibido un total de 150 propuestas de todas partes del mundo, aunque con neto predominio de escritores occidentales. Un gran n¨²mero de especialistas efect¨²a una preselecci¨®n hasta que las 150 propuestas quedan reducidas a una docena. Sobre ¨¦stas trabajan cinco miembros de la Academia, los que, a su vez, descartan, al menos por este a?o, seis.De las seis obras que quedan como finalistas la Academia en pleno escoge la que ser¨¢ consagrada con el Premio Nobel. Muchos de los autores, se?al¨® el profesor Gyllensten, son ya conocidos del jurado por haber sido propuestos en anteriores ocasiones y los que no resulten ganadores no quedan excluidos de una nueva posibilidad en a?os siguientes. Sobre nombres o nacionalidades de los finalistas, el informante declin¨® proporcionar ning¨²n dato, como es habitual en el ambiente secreto de Estocolmo.

Quedan entonces las conjeturas, con fundamento o sin ¨¦l, que son recogidos y publicados por algunos medios de difusi¨®n. En tal sentido, junto a consecuentes y hasta ahora frustrados candidatos, casos del argentino Jorge Luis Borges o el brit¨¢nico Graham Greene, vuelven a mencionarse, entre los escritores de lengua hispana, al colombiano Gabriel Garc¨ªa M¨¢rquez, al argentino-franc¨¦s Julio Cort¨¢zar, al mexicano Carlos Fuentes, al peruano Mario Vargas Llosa y a la espa?ola Ana Mar¨ªa Matute. Habitualmente las especulaciones, sin desmedro de los valores de los candidatos por los c¨ªrculos literarios, no resultan corroboradas por la decisi¨®n final de la academia. Aunque no siempre ha sido as¨ª. De todos modos, este mediod¨ªa quedar¨¢ despejada la inc¨®gnita.