Gran eco en Italia del almuerzo del Papa con Pertini
La comida ofrecida el martes al papa Juan Pablo II por el presidente italiano, Sandro, Pertini, en la finca presidencial de Castel Porziano, a treinta kil¨®metros de Roma, tuvo ayer un eco excepcional en toda la Prensa del pa¨ªs. Los principales diarios recogieron el acontecimiento en sus primeras p¨¢ginas y con inusitado despliegue fotogr¨¢fico. El motivo ha querido explicarse por el hecho de que era la primera vez que un Papa se sentaba a comer fuera del Vaticano con un presidente de la Rep¨²blica.
Algunos observadores consideran, sin embargo, que la verdadera raz¨®n va m¨¢s all¨¢ de ese dato estad¨ªstico. Apenas conocida la noticia, toda la opini¨®n p¨²blica pens¨® que se trataba de una comida para negociar con el presidente Pertini el delicado problema de la implicaci¨®n del Vaticano en el esc¨¢ndalo del Banco Ambrosiano, denunciado ante el Parlamento por el ministro democristiano del Tesoro, el cat¨®lico Nico Andretta. El diario Il Messaggero public¨® ayer la siguiente vi?eta: "Al terminar la comida, Pertini se vuelve y dice: La cuenta. Y el Papa levanta el dedo hacia el cielo y exclama: No, pago io". En italiano, yo se dice io, de pronunciaci¨®n casi id¨¦ntica a IOR, el Instituto de Obras de Religi¨®n, es decir, el banco vaticano, acusado del crak del Ambrosiano.Pero lo cierto es que el papa Wojtyla y Sandro Pertini no hablaron en absoluto de este asunto, ni de la renovaci¨®n del Concordato. Lo ha desmentido rotundamente el portavoz del Papa en una nota oficial y EL PAI S ha podido confirmarlo en fuentes seguras.
Temas: Polonia y L¨ªbano
El Papa y Pertini hablaron sobre todo de Polonia y de L¨ªbano, y la idea de dicha comida fue, seg¨²n la versi¨®n oficial, del propio presidente de la Rep¨²blica, quien, tal como tiene que ser protocolariamente, invit¨® a Juan Pablo II. Pero la verdad es que la comida hab¨ªa sido solicitada por el Papa.El encuentro ten¨ªa que haberse celebrado en el Vaticano, como hab¨ªa sucedido ya el 24 de octubre de 1979, pero, cuando a Pertini le lleg¨® esta segunda invitaci¨®n para ir a comer, el Vaticano insisti¨® para que esta vez el Papa fuera a comer con ¨¦l en la residencia presidencial.
Se trata de una finca al lado del mar, que durante la presidencia de Giovanni Leone era una reserva de caza cerrada al p¨²blico. Con Pertini, presidente socialista, la finca se ha convertido en un coto para la protecci¨®n de animales, y los varios kil¨®metros de playa reservados a la familia presidencial hoy est¨¢n abiertos gratuitamente al p¨²blico.
El Papa quiso invitar a Pertini precisamente en estos d¨ªas para agradecerle las cuatro visitas que el laico y no creyente presidente le hab¨ªa hecho al hospital durante las operaciones sufridas despu¨¦s del tr¨¢gico atentado en la plaza de San Pedro. Pero, seg¨²n informaciones recibidas por EL PAIS, los verdaderos motivos eran dos: pedirle a Pertini que haga todo lo posible para mantener viva la atenci¨®n italiana y europea sobre Polonia, poniendo sobre el asador todo el prestigio y popularidad que tiene el anciano socialista, y, al mismo tiempo, aprovechar la amistad de Pertini con el Papa para presentarlos juntos en un abrazo ante la opini¨®n p¨²blica. Este abrazo tiene una importancia esencial en un momento de especial dificultad para el papa Wojtyla, ante los es c¨¢ndalos financieros de los que se acusa al Vaticano y tras el gesto del ministro del Tesoro, un democristiano que revel¨® al Parlamento que el IOR debe al Banco Ambrosiano 100.000 millones de pesetas.
La sinagoga
Otro de los motivos del encuentro puede tener relaci¨®n con la afrenta recibida por el Papa de parte de la comunidad hebrea de Roma con motivo del reciente atentado a la sinagoga, que cost¨® la vida a un ni?o de dos a?os. Dicha comunidad acus¨® p¨²blicamente a Juan Pablo II de haber sido el culpable, junto con Pertini, "de haber recibido al terrorista Arafat", y no le permitieron ir al lugar del atentado.Ayer, la Prensa, al presentar a los dos personajes abrazados con gran relieve, quiso, de alguna manera, salvar a ambos de las intrigas y de los esc¨¢ndalos que retumban alrededor de los dos l¨ªderes.
Fue como decir: ellos son limpios y pueden representar, ante tanta suciedad, un momento de esperanza. As¨ª lo interpret¨® el director laico de un importante diario de la capital que hab¨ªa justificado la informaci¨®n a toda p¨¢gina de dicha noticia con el t¨ªtulo: "Una comida entre dos amigos".
El Papa se hab¨ªa reunido anteriormente con Sandro Pertini el 23 de octubre de 1978 y el 24 de octubre de 1979.
Tras este nuevo encuentro, Pertini se convierte en el ¨²nico presidente de la Rep¨²blica Italiana que se re¨²ne en tres ocasiones con un Papa.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.