Extranjeros en la Europa anal
El nuevo Gobierno alem¨¢n entr¨® en funciones el lunes 4 de octubre. Desde el domingo 3, sin embargo, Helmut Khol aparec¨ªa ya en las pantallas de televisi¨®n y anunciaba sus proyectos. Un peri¨®dico de Francfort resume as¨ª lo esencial: organizar elecciones anticipadas el 6 de marzo de 1983, previo saneamiento de la econom¨ªa, en primer lugar; dar soluci¨®n a la cuesti¨®n de los extranjeros, en segundo lugar. El segundo proyecto queda inmediatamente explicitado como .adopci¨®n de medidas para disminuir el n¨²mero de inmigrantes turcos".El poder que el nuevo Gobierno va a asumir corre peligro de escap¨¢rsele de nuevo el 6 de marzo. De ah¨ª que Khol aborde sin demora el s¨®rdido problema que puede garantiz¨¢rselo: respecto a la cuesti¨®n turca, el responsable se convierte en espejo del mayoritario sentir de los simples ciudadanos, aun a riesgo de exacerbarlo, de dar, seg¨²n ¨¦l ha dicho, carnaza a las fieras. Mas si el candidato profesional se adapta al medio, el elegido tiene sus limitaciones; por ello el discurso oscila: la cr¨ªtica evoluci¨®n de las relaciones entre ambas comunidades no supone en modo alguno emergencia de un sentimiento xen¨®fobo en la Rep¨²blica Federal de Alemania; la "tradicional amistad con Turqu¨ªa" ser¨¢ en cualquier caso preservada.
Expulsi¨®n de los inmigrantes mas amistad entre los Gobiernos, y as¨ª alcahueter¨ªa con los tiranos de Ankara; miserables tiranos despreciables a los ojos de un Khol por el hecho mismo de que su dominio se ejerce sobre s¨²bditos y no sobre ciudadanos. Pues si el fascismo tuvo un d¨ªa raigambre en los pueblos ricos, s¨®lo la democracia funciona ahora como valor, e incluso como valor lujoso. De ah¨ª que vivir bajo dictadura haya venido a ser sin¨®nimo de indigencia. Desprecia ¨¦ste que en la izquierda toma forma de un paternalismo disfrazado de solidaridad, aunque tiene tambi¨¦n expresiones m¨¢s groseras: as¨ª, un importante miembro de la Ejecutiva socialista reaccion¨® ante una de las tentativas de Tejero diciendo que se estaba confundiendo a un "Estado europeo" con una "rep¨²blica bananera". Las rep¨²blicas bananeras, a sus ojos, lejos de constituir un Estado, se hallan ancladas en el estado de animalidad o estado de naturaleza.
Turcos en Alemania: doblemente extranjeros como frutos de la miseria econ¨®mica y desechos del fascismo. Encarnaci¨®n de todos aquellos que arrastran su indigencia y su nostalgia por Estados definidos como lugar donde libertad y raz¨®n se confunden. Tal libertad y tal raz¨®n se han manifestado una vez m¨¢s, esta vez frente a ellos. El precario asilo que -mediante elevad¨ªsimo, coste electoral- la democracia social les preservaba, la democracia cristiana se lo arranca. Todo ello naturalmente respetando la expresi¨®n del pueblo soberano, pueblo, por consiguiente, que ser¨ªa necio confundir con el (adem¨¢s de inculto y andrajoso) calladamente sumiso.
Desde 1908, Freud puso en relaci¨®n los valores simb¨®licos del don y del rechazo con la actividad de la defecaci¨®n y el erotismo anal. La insatisfactoria resoluci¨®n de esta etapa supondr¨¢ tendencia a la retenci¨®n y al control posesivo. En los individuos, como en las sociedades, tal predisposici¨®n neur¨®tica se expresa en una tr¨ªada: orden, meticulosidad y limpieza.
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