Las el¨¦ctricas pedir¨¢n un aumento de tarifas inferior a la inflaci¨®n

Las empresas el¨¦ctricas solicitar¨¢n para 1983 un aumento de tarifas inferior al incremento de la inflaci¨®n, declar¨® ayer su presidente, Juan Alegre Marcet. Alegre defendi¨® la aplicaci¨®n del programa energ¨¦tico en cuanto a la finalizaci¨®n de las centrales nucleares que est¨¢n en construcci¨®n, pero asegur¨® que no se necesitaban otras nuevas.

Las empresas el¨¦ctricas estiman que "el aumento de tarifas necesario para el pr¨®ximo ejercicio no debe superar, en cualquier caso, el aumento del Indice de Precios al Consumo", seg¨²n manifest¨® ayer Juan Alegre Marcet, presidente de la patronal del sector, Unidad El¨¦ctrica (UNESA), y de Fuerzas El¨¦ctricas de Catalu?a, FECSA.Alegre Marcet, que defini¨® esta postura a t¨ªtulo personal, consider¨® que es a¨²n imposible fijar exactamente el porcentaje de aumento, pues se desconocen las previsiones macroecon¨®micas fundamentales del pr¨®ximo ejercicio, y singularmente los aumentos salariales, la pol¨ªtica a seguir sobre la cotizaci¨®n de la peseta y la cadencia de aplicaci¨®n del programa nuclear, aspectos de m¨¢xima incidencia en las cuentas de explotaci¨®n del sector.

Sobre uno de estos factores, el programa nuclear, el presidente de Unesa manifest¨® la conveniencia de que se aplique lo previsto en el Plan Energ¨¦tico Nacional (PEN): "si queremos que Espa?a salga de la actual dependencia del petr¨®leo, hay que terminar las centrales en construcci¨®n".

Acuerdo generalizado

Aparte de ¨¦stas, seg¨²n dijo Alegre Marcet, hay un acuerdo generalizado de que "no hace falta iniciar la construcci¨®n de ninguna central m¨¢s de ning¨²n tipo".En su visi¨®n, la detenci¨®n o morosidad en la entrada en funcionamiento de las centrales a medio construir, adem¨¢s de aumentar la dependencia del petr¨®leo y de reportar perjuicios a las empresas el¨¦ctricas, traer¨ªa consecuencias muy negativas para las proveedoras, tanto constructoras, como firmas de ingenier¨ªa y de laminaci¨®n, y con ellas a sus empleos.

La postura de aplicar el programa nuclear en curso, pero no ampliarlo, se basa en que "no hay exceso de energ¨ªa el¨¦ctrica en Espa?a, si se sigue buscando el objetivo deseado y programado por el Plan Energ¨¦tico Nacional de reducir la dependencia del petr¨®leo, pero s¨ª la habr¨ªa en caso de abandonar dicho objetivo". Actualmente, seg¨²n datos del sector, el consumo de fuel se aproxima a los seis millones de toneladas, inferiores a los diez millones de 1979, pero muy distante a¨²n de lo programado oficialmente para el ejercicio 1985-1986, fecha para la que se previ¨® un consumo residual inferior al mill¨®n de toneladas.

Respecto a la central nuclear de Asc¨®, en la que FECSA ostenta un paquete de control, Alegre Marcet se lament¨® de que cada vez los controles fueran m¨¢s rigurosos, pues a su entender ya pod¨ªa haber entrado en funcionamiento con plena seguridad desde hace varios meses.

La ¨²ltima previsi¨®n de la compa?¨ªa es que antes de final de diciembre pueda haberse "alcanzado la criticidad" y, por tanto, que entre en pleno funcionamiento a principios del a?o pr¨®ximo.

Aumenta la demanda

El presidente de Fuerzas El¨¦ctricas de Catalu?a ofreci¨® tambi¨¦n unos datos significativos de la marcha de la empresa. Indic¨® que durante los diez primeros meses del a?o, la hidraulicidad hab¨ªa sido m¨¢s positiva en Catalu?a que en el resto de Espa?a, y que en el caso de su empresa, similar a otras de la misma zona, la demanda energ¨¦tica hab¨ªa crecido en tomo al 2,6%, por lo que era previsible que se acabara el ejercicio con un incremento cercano al 3%, superior a los consumos del resto del pa¨ªs, que actualmente oscilan en torno al 1,6%.Este aumento de la demanda resulta del incremento de los consumos industriales, mientras los dom¨¦sticos han continuado estancados. La ligera reactivaci¨®n se ha manifestado principalmente en sectores de claro componente exportador, como el cementero; en empresas que han realizado importantes cambios tecnol¨®gicos, como el grupo sider¨²rgico catal¨¢n; y m¨¢s suavemente en otros sectores como el papelero, el textil y la automoci¨®n.

La recuperaci¨®n del mercado ha tenido, sin embargo, un grave contrapunto negativo en las graves consecuencias de las recientes inundaciones. Los directivos de la empresa estiman que las p¨¦rdidas de FECSA originadas por la cat¨¢strofe superan los 1.500 millones de pesetas. De esa cantidad, 1.040 millones corresponden a los da?os causados en las centrales de Llebors¨ª, Camarasa y Ser¨®x, que quedaron completamente inundadas y cuyas bobinas resultaron anegadas de lodo.

Estas instalaciones no entrar¨¢n completamente en servicio antes del pr¨®ximo 10 de diciembre. Los da?os restantes corresponden a las l¨ªneas de transporte, en la Cerdanya y en L¨¦rida, lugares donde han desaparecido no s¨®lo postes, sino torres enteras.