El Ministerio de Industria y el Gobierno vasco negocian el conflicto de la importaci¨®n de motos

El Ministerio de Industria, el Ministerio del Interior y el Gobierno vasco han iniciado una ronda negociadora para lograr un acuerdo en el pol¨¦mico asunto de la importaci¨®n de motos BMW para la Polic¨ªa Aut¨®noma del Pa¨ªs Vasco. El conflicto ha puesto sobre el tapete un problema de descoordinaci¨®n entre la pol¨ªtica de compras de las diversas Administraciones, y su resoluci¨®n definitiva, en la que intervendr¨¢ ya el nuevo Gobierno socialista, supondr¨¢ una piedra de toque sobre su actitud en torno al fomento y grado de protecci¨®n que quiera dar a la industria espa?ola.

La historia arranca de la pasada primavera, en que el departamento del Interior del Gobierno vasco cerr¨® la compra de una partida de motos de la marca alemana BMW para los servicios de tr¨¢fico de su Polic¨ªa Aut¨®noma. Recientemente, el Ministerio de Industria tramit¨® un expediente invalidando esta importaci¨®n e impidiendo as¨ª que se matriculasen los veh¨ªculos. Esta acci¨®n fue apoyada por el departamento de Industria de la Generalitat, interesada en evitar importaciones que perjudicasen la industria espa?ola, en gran parte radicada en Catalu?a: las motocicletas habitualmente adquiridas por la Guardia Civil y los ayuntamientos ven¨ªan siendo las Sanglas 400, fabricadas en Barcelona por la firma del mismo nombre, que ha sido integrada en la nueva empresa Sociedad Espa?ola de Motocicletas (SEMSA), propiedad de la japonesa Yamaha y del grupo Banesto, a partes iguales. El consejero vasco del Interior, Luis Retolaza, respondi¨® anunciando que presentar¨ªa un recurso contra la inmovilizaci¨®n de las motos BMW adquiridas, argumentando que otros organismos ten¨ªan tambi¨¦n motos extranjeras.El argumento del Gobierno central para frenar estas importaciones estriba en que todas las compras de bienes y servicios que realice la Administraci¨®n deben ajustarse al art¨ªculo 10 de la Ley de Ordenaci¨®n y Defensa de la Industria, dictada en 1939, y heredera de otras anteriores. Seg¨²n esta norma, los organismos oficiales, sean centrales, locales o provinciales -y, por extensi¨®n, auton¨®micos- deben efectuar sus compras a la industria espa?ola, salvo en los casos excepcionales en que no se encuentren en el mercado productos de fabricaci¨®n espa?ola. Estos casos excepcionales son determinados en ¨²ltima instancia por el Ministerio de Industria, que los autoriza mediante un certificado de excepci¨®n, requisito indispensable para efectuar cada importaci¨®n.

De igual forma, la ley obliga a los organismos oficiales a que no incluyan en sus pedidos condiciones arbitrarias que excluyan de antemano las posibilidades de la industria espa?ola para servirlos

En el caso concreto de las motocicletas BMW, el Ministerio entiende que "para la regulaci¨®n del tr¨¢fico es suficiente un cubicaje de 400 cent¨ªmetros c¨²bicos". La compra del Gobierno vasco se realiz¨® en principio para tal objetivo. Las actuales negociaciones van encaminadas a deslindar exactamente las funciones para las que se requieren estos veh¨ªculos, existiendo una buena disposici¨®n del Gobierno central a autorizar unos cupos limitados para servicios especiales que requieran motos de mayor cubicaje, como los servicios en zonas monta?osas o de representaci¨®n y escolta, aunque la ¨²ltima palabra la tendr¨¢ seguramente el Gobierno entrante.

Apoyo de Tr¨¢fico

Significativamente, la Direcci¨®n General de Tr¨¢fico, del Ministerio del Interior, apoya, en contra de Industria, la postura del Gobierno vasco, quiz¨¢ en el deseo de dotarse en el futuro de motocicletas m¨¢s flamantes y de cubicaje m¨¢s Potente. Es una actitud bastante com¨²n a la de diversos organismos: existen crecientes peticiones de ayuntamientos para la adquisici¨®n de autobuses fabricados en otros pa¨ªses, o de la Subsecretar¨ªa de Aviaci¨®n Civil para la compra de veh¨ªculos especiales contra incendios, fen¨®meno diferente al que sucede, por ejemplo, en Francia, donde se tiene m¨¢s confianza en los productos de fabricaci¨®n nacional."Hay que analizar no s¨®lo las posibilidades inmediatas de las industrias espa?olas, sino tambi¨¦n sus capacidades potenciales", manifest¨® el subdirector general de Automoci¨®n del Ministerio de Industria, Antonio Farr¨¦. "Lo conveniente ser¨ªa", a?adi¨®, "que se normalizaran definitivamente los tipos de productos, en este caso motos de tr¨¢fico, que necesitan los organismos oficiales, para que as¨ª la industria espa?ola supiera de antemano a qu¨¦ atenerse y pudiera organizarse para ello, porque actualmente se halla desorientada por falta de programaci¨®n previa".