Jugar a avioncitos

Yo tengo diecisiete a?os y, como es l¨®gico, no pude votar en las pasadas elecciones del 28-O. De todos modos, aunque mi voto hubiera sido para el partido nacionalista (UPV), sent¨ªa gran confianza y simpat¨ªa por la inminente barrida socialista.La verdad es que al mundo obrero (sin que este t¨¦rmino o t¨®pico tenga mayores connotaciones), tan marginado y problem¨¢tico, el Partido Socialista Obrero Espa?ol le abre las ventanas -enmohecidas de permanecer tanto tiempo cerradas- de la esperanza.

Pero a la vista del programa FACA (?tan necesario?) y de la preo.cupacion por los dichosos avioncitos F- 18A, que nos costar¨¢n unos 356.400 millones de pesetas y que s¨®lo servir¨¢n para recreo y deleite de cuatro comandantes de aviaci¨®n, con el agravante de que estamos empe?ados hasta el cuello, me pregunto si el Gabinete socialista se ha olvidado de los dos millones de parados, de la situaci¨®n tercermundista (no nos llevemos a enga?o) de muchas zonas del, territorio espa?ol, de la crisis econ¨®mica que nos ahoga y se ha puesto a jugar a avioncitos con Reagan. Estas preocupaciones armament¨ªsticas le sientan bien al presidente de EE UU (porque no tiene otra cosa en la cabeza que los rusos), pero a nuestro Ejecutivo, no. Porque me parece que el presupuesto econ¨®mico de un pa¨ªs como el nuestro (y por desgracia de muchos m¨¢s, de momento). debe dar prioridad en proporcionar trabajo a una familia que.se hunde y no a unos aparatos que nos van a hundir a todos.. ?No le parece? / estudiante seminarista de COU.