Una batalla agraria con ra¨ªces pol¨ªticas

La batalla agraria que se replantea ahora en Le¨®n entre la Uni¨®n de Campesinos Leoneses (UCL) y la Asociaci¨®n de Agricultores y Ganaderos Leoneses (AAGL) data de las guerras de los tractores, a ra¨ªz de las cuales se cre¨® la primera, y de la implantaci¨®n del martinvillismo en la provincia, que apadrin¨® dos sindicatos sucesivamente derrotados. Los promotores de la AAGL proceden en gran parte de estos ¨²ltimos (Sindicato Independiente Campesino y Sindicato Agropecuario Leon¨¦s) y su objetivo sigue siendo el de desbancar a un rival que ha convertido a Le¨®n en una isla inc¨®moda para el tradicional conservadurismo agrario: en las pasadas elecciones, el PSOE, con la UCL, se coloc¨® por delante de UCD y AP en la mayor¨ªa de los ayuntamientos rurales.La Uni¨®n de Campesinos Leoneses se cre¨® en 1977, coincidiendo con el declive del sindicalismo vertical y las primeras guerras de los tractores, lo que le dio desde el principio un car¨¢cter conflictivo. Uno de sus enfrentamientos con el Gobierno de UCD le cost¨® el cargo al general Prieto, entonces jefe de la VII Zona de la Guardia Civil, por negarse a disolver las concentraciones de campesinos en las carreteras. Posteriormente, la UCL alcanz¨® mayor¨ªa absoluta en las elecciones a c¨¢maras agrarias y en la coordinadora intersindical remolachera, proporcion¨¢ndole un control notable sobre los cultivos m¨¢s significativos de la provincia.

En 1979, tras presentar candidatos a las elecciones municipales, sus representantes fueron expulsados de los mercados de origen dependientes de la empresa nacional Mercorsa, mientras sus principales dirigentes eran detenidos por supuestos delitos de terrorismo en carreteras y v¨ªas de ferrocarril, nunca aclarados. A todo ello siguieron multas y sanciones gubernativas por una cuant¨ªa superior a dos millones de pesetas y la creaci¨®n de un nuevo sindicato agrario paraoficial (el Sindicato Agropecuario Leon¨¦s), que fracas¨® estrepitosamente.

En sus enfrentamientos con el Gobierno de UCD, la Uni¨®n de Campesinos Leoneses cont¨® con el apoyo de los socialistas, con los que luego llegar¨ªa a una serie de pactos sectoriales. Durante las pasadas elecciones, este sindicato no lleg¨® a firmar ning¨²n acuerdo oficial con el PSOE (aunque s¨ª apoy¨® t¨¢citamente sus candidaturas), debido a problemas de ubicaci¨®n en las listas y a rivalidades con algunos sectores del partido, fundamentalmente vinculados a UGT. De cara a las municipales, los contactos entre ambas organizaciones han continuado, aunque todav¨ªa no se ha llegado a firmar pacto alguno.